31. H o t

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A pesar de que aún era un poco temprano, el lugar ya estaba repleto de personas. Time los guío hacia un segundo piso donde se encontraban las áreas privadas y una mesa esperaba por ellos.

La música estaba alta, el ambiente muy animado y luces de colores por todas partes, la primera ronda de bebidas fué un shot de tequila y para ser la primera vez de Pete probándolo le gustó de inmediato. Luego cada uno ordenó algo a su gusto, Vegas optó por un whisky y Pete por un Tequila Sunrise.

—¿Cómo te sientes? —preguntó Vegas a su novio.

—Relajado —dijo sonriendo.

—Beberé uno más y será todo, yo te llevaré a casa.

—Podemos llamar un taxi.

—No puedo dejar mi auto aquí, mi padre me asesinará —respondió y Pete se rió.

—Está bien.

Por un momento a Vegas no le importó la presencia de Arm, si bien aún no le agradaba prefirió enfocarse en pasarla bien con su novio y sus amigos. Con algunos tragos encima, todos comenzaron a soltarse y a sacar plática divertida, especialmente Porsche, quien después de haber bebido varios tragos de ron se volvió el alma de la fiesta y era imposible no reír cada vez que el moreno abría la boca para decir alguna tontería.

—¡Hey, Porsche! —llamó Mint —Ve a buscar a algún chico para que te calle, me duele el estómago de tanto reír —bromeó.

—No hace falta, Kinn está aquí presente —mencionó Kim.

—¡Oye! —regañó el mencionado.

—Ya hazle caso, todos los días me pregunta qué hacer para llamar tu atención —dijo Vegas.

—¡Cállate! —reclamó avergonzado y todos rieron.

Después de haber probado la mayoría de cócteles que el bar ofrecía, las mejillas de Pete se enrojecieron y estaba más animado.

—¿Vegas? —llamó a su oído.

—¿Qué pasa? ¿Te sientes bien, amor?

—Necesito ir al baño ¿Me acompañas?

—Por supuesto.

Ambos se pusieron de pie y sin avisar a los demás se alejaron en busca de los baños, no tardaron mucho en encontrarlos y cuando entraron notaron que estaba completamente vacío.

—¿Ya? —preguntó Vegas cuando Pete salió después de unos minutos.

—Ví un balcón de este lado, necesito aire.

—Está bien, vamos.

Pete lo tomó de la mano y lo guío hacia un pasillo oscuro en la parte de atrás, el mayor tuvo una extraña sensación pero aún así lo siguió.

—¿Pete? ¿Estás seguro de que hay un balcón? Yo no veo nad...

Las palabras del chico fueron interrumpidas por la unión entre sus labios y los de su novio, el menor lo había tomado por sorpresa besándolo con desesperación. El sabor dulce en sus labios lo debilitaron y envolvió el cuerpo de Pete en sus brazos, aferrándose a él con fuerza mientras le seguía el ritmo.

—Así que esto es lo que querías —dijo con voz seductora después de separarse por falta de aire.

—Deseaba tanto besarte.

—¿Si? —susurró en su oído mientras con lentitud llevaba sus manos a su espalda baja.

El pelinegro pasó sus brazos detrás del cuello del mayor y acercó sus rostros.

—Te amo, Vegas —dijo rozando sus labios con los suyos.

No dejó que el chico respondiera y de nuevo lo besó con una intensa necesidad, mientras ambos devoraban la boca del otro sintió como las grandes manos de Vegas bajaron hasta su trasero y le dió un apretón, lo que lo hizo sentirse más acalorado de lo que ya estaba.

Vegas estaba muriendo de deseo, quería llevarlo a un lugar más privado y explorar el cuerpo entero de su novio con su boca, quería poseerlo por completo pero sabía que Pete no estaba del todo listo así que se limitó a besar con fuerza su piel blanca en el cuello y más abajo, dejándole una visible marca en la clavícula.

—Te amo tanto, Vegas —dijo Pete entre jadeos mientras sentía la lengua de Vegas recorrer su piel —No puedo imaginar a nadie más conmigo en esta situación más que a ti.

—Te juro que yo tampoco quiero estar con nadie más que tú.

Sus bocas se volvieron a juntar con desesperación y ambos se aferraban con fuerza al cuerpo del otro, como si fuera la última vez que se encontrarían.






La pareja estaba absorta en su mundo de pasión que jamás imaginaron que un tercero oculto en una esquina había presenciado la declaración de amor entre la pareja, con el corazón roto y el alma llena de rabia, Arm se alejó del lugar a pasos rápidos.










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Arm no había podido quitarle la mirada de encima a Pete en toda la noche, desde que llegaron y el chico comenzó a beber toda su atención estaba en él, había quedado fascinado con ese lado animado de Pete. Con las mejillas ruborizadas y esa gran sonrisa en su rostro era imposible no enamorarse de él, el chico tenía un brillo parecido a una constelación en sus ojos, pero esos ojos no lo miraban a él si no al tipo junto a él.

Cuando Arm escuchó el rumor de que la pareja había terminado se animó a hablar con su compañero con la esperanza de consolarlo y hacerlo sentir bien para ir ganando poco a poco su corazón, pero nada salió como esperaba ya que Vegas siempre estaba presente en cada conversación.

"—Vegas no ha dejado de llamarme."

"—Cuando Vegas y yo salíamos..."

"—A Vegas no le gusta esto."

"—Mis padres preguntaron por Vegas."

Estaba harto de escuchar ese maldito nombre salir de la linda boca de Pete. Él no lo merecía en absoluto, Vegas no era capaz de hacerlo completamente feliz, si tan sólo Pete se diera cuenta de que él si lo quiere realmente y supiera lo que es ser tratado con cariño y respeto mandaría a volar a Vegas.





Cuando ambos se pusieron de pie y se alejaron no se sintió tranquilo pero disimuló indiferencia, sin embargo cuando se dió cuenta de que la pareja ya se había tardado de más fué en su búsqueda con miedo de que Vegas pudiera estarle reclamando a Pete por beber demasiado, entonces él lo defendería. Pero la realidad fué otra, una que le hizo sentir como si una daga estuviera atravesando su corazón, escuchar como Pete le decía a Vegas con tanto anhelo que lo amaba, que lo deseaba a él solamente lo hizo enojarse.

Porqué no podía ser él quien estuviera abrazándolo y besándolo, porqué no podía ser él la persona a quien Pete ama.

Le advirtió una vez a Vegas que estaba interesado en el chico y no quería verse como el villano pero seguiría intentando ganar el corazón del pelinegro.

Sin importar qué.

S t i l l [VegasPete]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora