25. L i b r a r y

1K 119 18
                                    

Vegas quedó sin palabras, imaginó que Pete querría terminar con él pero no pensó que en realidad fuera capaz de hacerlo. Obviamente no se iba a quedar sin hacer nada, de algún modo tenía que recuperarlo.

Hace un par de minutos que Pete se retiró de ahí junto a sus amigos sin decir más, incluso Mint quien se supone que también es su amiga ni siquiera le dirigió la palabra aunque era evidente que siempre estará de lado de su primo.

—¿Vegas? —dijo una voz femenina.

El chico miró en dirección a ella pero no dijo absolutamente nada.

—¿Estás bien? Sentemonos.

Han había logrado escuchar la pequeña discusión entre ellos por lo que en cuanto vió que Vegas no reaccionaba se acercó a ayudarlo. El chico obedeció y le dió un sorbo al agua que la chica le ofreció amablemente.

—No fué mi intención, pero escuché lo que hablaron.

—¿Qué voy a hacer? —dijo finalmente.

—En serio lo lamento tanto Vegas, por mi culpa ustedes están en esta situación.

—No quiero dejarlo ir, no quiero que Pete se vaya de mi lado ¿Qué debo hacer? —habló con desesperación.

—Tal vez yo pueda hablar con él y aclararle todo.

—No, eso no va a funcionar.

—Déjame intentarlo, si le dejo claro que somos amigos simplemente tal vez quiera escucharte —insistió.

—Gracias Han, pero quiero arreglar esto yo mismo, fuí yo quien lo arruinó así que yo debo solucionarlo.

—¿Estás seguro?

—Pete no querrá escucharte, incluso puedo adivinar que ni siquiera quiere verte.

—Está bien —asintió —Si necesitas algo dímelo.

Vegas asintió en respuesta y siguió pensando.

Era un idiota y lo sabía, sabía que ocultarlo no era buena idea pero temía que las cosas se pusieran tensas, lo que no importó porque de igual manera todo se fué a la mierda. Lo cierto es que amaba a Pete, eso era completamente real, estaba totalmente enamorado de él y se odiaba a si mismo porque aseguró que nadie podría separarlos sin imaginar que él mismo sería quien lo haría.








________________________________________








Durante el resto de sus clases no puso atención alguna, le era imposible concentrarse en estudiar mientras la persona que amaba se estaba alejando. Lo único que comprendió es que debía presentar un informe el siguiente día por lo que cuando finalizaron las clases se dirigió hacia la biblioteca para buscar algunos libros que pudieran ayudarlo, si mantenía su mente ocupada no pensaría tanto en sus problemas personales por un momento pero de nuevo estaba muy equivocado.

En cuanto ingresó al lugar lo primero que vió fué a Pete sentado en una de las mesas con el mismo tipo que le sonreía muy a gusto esa misma tarde: un flacucho con el cabello ligeramente peinado y unos lentes que complementaban su papel de nerd, se ruborizaba cada vez que Pete lo miraba a la cara cuando le hablaba.

Vegas tomó un libro al azar y se fué a sentar a la mesa más cercana a ellos intentando no ser reconocido y lo logró, se sentó detrás de ellos quedándo de espalda a espalda y fingió leer el libro que tenía en sus manos mientras que sus oídos prestaban atención a la conversación de ellos.

—Creo que eso no es lo que quiere decir en realidad ¿Tú qué opinas? —preguntó Pete a su compañero.

—No... No lo sé.

S t i l l [VegasPete]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora