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{TW:// Toques no consensuados, acercamiento no consensuado, persecución, ataque de pánico, ataque directo, non-con}

Las primeras veces siempre son difíciles, en el sentido de adaptarse a lo nuevo.

Así fue la primera noche trabajando con los lobos para proteger la casa de Bella; porque si aceptaron ayudarnos pero no de buena gana, se veía que era solo por que hay humanos involucrados. No es que nos quejáramos, pero nosotros no les gruñimos cuando hacemos los cambios de turno, somos más educados que eso.

Nos pasamos la semana así, rotábamos la casa comprobando que ningún vampiro volviera a la residencia Swan y si lo hacía, lo acabaríamos. Pero por suerte no pasó y solo hizo que hablara sola con uno de los lobos cuando cambiábamos turnos, es que suelo quedarme más tiempo porque me aburre no hacer algo más, así que ellos soportan mis delirios nocturnos y supongo que eso no los duerme, sus mordidas deben significar que están alertas.

Pero en el día era una rutina diferente, los lobos se la quedaban la mayor parte del día y la tarde mientras nosotros cazábamos eh investigábamos si Victoria volvió o algo parecido, hasta ahora nada, pero nunca se está completamente seguro.

Edward nos dijo que había dejado a Bella con Jacob, y por mucho que le disgustara eso, era lo más seguro para ella. Así todos nos concentramos en seguir buscando algo, lo que sea es bueno en este punto...¿Eso es una persona? No podía ser, se movía muy rápido pero también muy irregular, como si cojeara, ¿Será el vampiro que buscamos?

Lo seguí escondiéndome tras árboles y rocas y el vampiro aparecía y desaparecía de vez en cuando, pero siempre se alejaba más y más de mi. Era extraño, ¿Un don tal vez? ¿Por eso no puedo olerlo por completo? Normalmente tienen un olor pero este...no podía olerlo ni siquiera cuando pasaba por donde había estado. Su sombra me trajo a un sitió sin tantos árboles donde esconderme y se sentía inquietantemente familiar...Podría ser...no, no no no imposible, devoraron su cuerpo.

ßµêñð ßµêñð ßµêñð...§ï ñð ê§ m᧠ñï mêñð§ qµê lå ǵllêñ þêqµêñå...lå qµê þµêÐê vêr å lð§ mµêr†ð§... - oigo la voz de Laurent tras de mi, una voz que me congela el cuerpo, que no me atrevo a voltear - Ðïmê ñïñå...¿Mê vêz? ¡¿Mê vêz?! -

No pude evitarlo, me estremezco por su grito y ahora sabe que yo se que está aquí, su risa me da arcadas y si mi corazón pudiera latir, estaría latiendo como loco - Våmð§, ñð Ð𥠆åñ†ð mïêÐð, §ðlð qµïêrð qµê mïrê§ ¢ðmð mê Ðêjårðñ ê§ð§...målÐï†ð§ þêrrð - no quería verlo, quería irme, quería a mi papá o a mi mamá, a quien sea - Ðïjê QÚÈ MÈ MÌRȧ - jaló mi hombro con fuerza y me hizo mirarlo y...

Santo Dios...

¡¿Donde estaba la mitad de su rostro?! Solo tenía sus ojos y parte de su nariz...abajo no había nada más, ¡¿Y su brazo derecho?! Había mordidas en sus costados y rasguños de garras por todo su cuerpo, la ropa que llevaba estaba rota y hecha tirones, todo él se veía...horrible. Él se río con malicia y su cara se distorsionó como si estuviera sonriendo.

§ï ¢rêê§ qµê mê vêð mål, Ðêßêríå§ ïmågïñår ¢ðmð mê §ïêñ†ð, ¢ðmð еêlê §ï qµïêrå håßlår, ¢ðmð ê§ §êgµïr åqµí ¢µåñÐð §ê §µþðñê qµê Ðêßð ꧆år mµêr†ð - su voz se escuchaba entre cortada, como si se ahogara cuando habla y me di cuenta que su cuello tenía un corte que se movía cuando hablaba, por ahí sale su voz... - þêrð ïmågïñå mï §ðrþrê§å ¢µåñÐð ꧢµ¢hð å lð§ vïvð§ håßlår Ðê êñ†rê ð†rå§ ¢ð§å§, §ðßrê †í...§ðßrê †µ þðÐêr, ¢ðmð þµêÐê§...ñð, ¢ðmð Vħ å 奵Ðårmê å ïrmê Ðê ꧆ê ïñ£ïêrñð ¥ þðr £ïñ Ðꧢåñzår Ðê ê§†å †ðr†µrå -

Ojos BlancosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora