Hola, bueno ya al fin pude terminar todos mis proyectos finales del semestre. Eso quiere decir que estoy libre hasta Agosto, lo cual es genial.
Quiero agradecerles por todos los votos que ha recibido mi anterior fic, la primera parte de este, MIL GRACIAS por visitarlo y darse el tiempo de leerlo, comentar y votar, ya van 9,000 visitas, la verdad no creí que llegaran a tanto.
No se que mas decirles, pero espero que disfruten del capítulo, si quieren recomiendenlo y me harán mas feliz de lo que ya estoy. Si quieren que me pase por alguna de sus historias, sean libres de comentarlas o enviarme un mensaje privado, tengo dos meses y medio de vacaciones, habrá que aprovecharlas en algo.
Si están de vacaciones, disfrútenlas tanto como yo disfrutare las mías, solo el Ángel sabe cuanto las necesito ;)
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Cuando Nina entro a su apartamento con Ian delante de ella, lo último que esperaba era encontrarse tal desastre. Los muebles volteados y los cuadros que servían de adorno en las paredes también, la mesita de cristal rota en mil pedazos...
— ¡Lilly! — el grito salió del fondo de su garganta al ver el descomunal desastre.
Dio unos pasos y su hermano la siguió.
—No te despegues de mí. — Ian asintió enérgico, en su mente revoloteando imágenes de un desorden similar en su propia casa, hace un par de años y Nina, su hermana, tenía esa mirada cautelosa como si en cualquier momento la fueran a atacar.
Avanzo con cuidado entre los destrozos de la sala y el pasillo para encontrarse con una Lilly tirada en el suelo. Se acerco para revisar su pulso, rogando interiormente que su corazón latiera, un alivio la recorrió por completo cuando sintió el pulso en el cuello de su amiga.
—Lilly, despierta. — le hablo en voz alta acariciando su cabello. — No quiero golpearte, abre los ojos por favor.
—Nina... ella... ¿es tu amiga? — la pregunta de Ian la saco de su estupor.
—Algo así amiguito. — su amiga despertó de la nada, sus ojos la observaron con cansancio. — Aún me debes mis vacaciones.
Dos horas después Jace, Clary y Alec estaban en el departamento de Lilly escuchando la explicación de esta.
—Y no tengo la menor idea de cómo rayos se desató. — conto Lilly finalmente.
— ¿Solo se fue? — volvió a preguntar Alec.
—Sí. — volvió a responder Lilly por séptima vez.
—Nina, ya me aburrí y tengo hambre. — una voz infantil se escuchó en la sala, el niño rubio estaba cruzado de brazos y su ceño levemente fruncido, estaba medio escondido en el marco de la puerta.
—Se un buen niño y tráeme de la alacena las galletas de chispas de chocolate y la mantequilla de maní. — Nina enarco una ceja hacia su amiga, pero no dijo nada, igual que los demás. — Lo digo en serio, dijo que esta aburrido y tiene hambre, puede coger alguna barrita de cereal, de paso.
—Ve a traer eso Ian. — acordó su hermana mayor.
Asintió bufando.
— ¡Oí eso! — exclamó Nina por la reacción de su hermano.
— ¡No es mi culpa que tengas un oído supersónico! — exclamó de vuelta.
Nina quería darse con la pared, a veces ese niño que tiene por hermano es demasiado irritante. En momentos como este, desearía ser hija única.
— ¡Se acabo! ¡Ian! — se levanto del sofá para buscar a su hermano.
Los demás solo se dedicaron a observar la escena de a continuación. Como una rubia cargaba a su hermano en su hombro, mientras este se retorcía para zafarse, sin éxito.
—Me alegro de ser hija única. — afirmo Lilly sin dejar de verlos. — Es mejor que tener hermanos maniáticos o malcriados, aunque por lo menos lo segundo es más tratable. — miro de reojo a Clary.
Sip, se alegraba de no tener hermanos, por hoy.
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Cazadores de Sombras: Ciudad de Luces (2° parte)
FanfictionSinopsis (Secuela) Si hace dos años le hubieran dicho a Nina Sawyer, que los mismos Cazadores de Sombras que casi la envían al exilio, estarían en el umbral de su casa solicitando su ayuda no lo... Bueno, pensándolo bien no podría evitar el famoso:...