Mi razón de existir

6

Nirvana: Es necesario llevar tanto equipaje?

- una gota de sudor caería por la nuca de Nirvana, él solo traía una mochila con cosas necesarias, mientras que los demás llevaban maletas enteras.

Rias: Estaremos muy ocupados, así que necesitaré todas estas cosas.

Nirvana: Si tú lo dices...

- Suspiraria cansada cansadamente ante las ocurrencias de estos niños.

Nirvana: ¿Cómo iremos al inframundo?

Rias: Tú solo déjame eso a mi

- Rias rompería un pergamino donde este los teletransportaria hacia una especie de estación del tren.

Rias: Esto nos llevará al inframundo.

Nirvana: ¿No podías transportarnos y ya?

Rias: Hay nuevos miembros en mi nobleza, Airi y Asia nunca estuvieron aquí, quiero que conozcan mi hogar.

Nirvana: Ya veo...

- Simplemente seguiría a Rias que se subía a un tren y se sentaba tranquilamente.
El viaje era muy tranquilo, el séquito Gremory hablaba felizmente, mientras que Nirvana estaba en un asiento un poco alejado pensando en cosas de su pasado

Nirvana: Así que ahí moriste, idiota.

- Nirvana estaba mirando fijamente un enorme valle, lleno de vegetación, sin embargo lo raro de ese valle, es que estaba ocultando bajo su vegetación, rastros de una enorme explosión.

Nirvana: Quién lo diría, tanto poder y aún así fuiste derrotado.

- Él sería interrumpido por una voz que lo llamaba suavemente

Rias: Nirvana-kun, ven con nosotros, no estés tan alejado.

- Rias se había acercado a él para llevarlo de su mano junto a los demás.

Rias: Nirvana-kun ¿estuviste en el infierno alguna vez?

Nirvana: Creo que si, no lo recuerdo muy bien, pero estoy seguro que habrá cambiando mucho.

Rias: Desde el fin de la guerra, muchas cosas cambiaron, y ahora con el gobierno de mi hermano, el infierno es un hermoso lugar desde hace muchos años.

Nirvana: Sirzechs Lucifer, el satan rojo, el primer super demonio en aparecer. Nunca me esperé que serías la pequeña hermana de alguien tan importante como él. Debe ser genial poder ser hermana de uno de los seres más fuertes del mundo

Rias: Admito que es genial, yo aspiro a ser tan fuerte como mi hermano.

Nirvana: Es una gran meta.

- El tren rápidamente frenaria dando a entender que ya habían llegado.

Rias: Llegamos a la capital del infierno, bienvenidos a Lilith.

- Diría felizmente mientra señalaba una inmensa ciudad de demonios.

Akeno: Hace mucho tiempo que no venía a éste lugar jeje.

Kiba: Si, ha pasado tiempo.

Koneko: Sigue igual que antes...

Airi: Es giganteeeeeeeee!!!

Asia: Que bonito.

- Nirvana solo observaba con una mirada tranquila.

Rias: Perfecto, usaremos magia para llegar más rápido a mi hogar.

- Un portal con el símbolo Gremory los cubriría, para simplemente ser transportados al hogar del clan Gremory.
En el corazón del inframundo, entre sombras danzantes y murmullos de intrigas demoníacas, se alzaba la majestuosa Mansión Gremory. Una estructura imponente, con torres que se elevaban hacia el cielo infernal y jardines exuberantes que resplandecían con flores de colores intensos y plantas mágicas. La entrada principal, flanqueada por estatuas de demonios antiguos, se abría a un vestíbulo opulento. Alfombras rojas y doradas se extendían por el suelo pulido, guiando a los visitantes hacia salones decorados con tapices que contaban la historia del linaje Gremory. Las paredes, adornadas con reliquias demoníacas y retratos de antepasados, susurraban secretos de un legado lleno de poder y prestigio.

Rias: Qué les parece mi hogar, Airi, Asia?

Asia/Airi: Increíble...

- No podían creer tantos lujos

Rias: Qué hay de ti, Nirvana-kun?

Nirvana: Es normal que seas tan mimada, mira el lugar donde creciste...

Rias: Creo que tienes razón jeje.

- Rias rápidamente se dirigiría hacia una puerta doble, hecha de un hermoso material, una puerta que rápidamente sería abierta por un pequeño niño que tenía el mismo color de cabello que Rias.

¿?: Tía Rias!!!

- El niño rápidamente abrazaría a Rias

Rias: Millicas, cómo has estado?

Millicas: He estado muy bien, Tía Rias.

- Seguido de eso saludaria a todos los demás.

Rias: ¿Tus padres?

Millicas: Papá está trabajando, y mamá está con papá.

Rias: ¿Tus abuelos ni vinieron?

Millicas: Nop, tenían algunas cosas que hacer en su hogar, pero dijeron que tan pronto como lo terminen vendrían.

Rias: Espero que no terminen nunca...

- Seguido de unas cuantas charlas, Rias le daría una habitación a cada uno, dándoles tiempo para que se acomoden.
Y así llegamos a esta escena, en la que Nirvana estaba sentado en el balcón de su habitación, mirando con una sonrisa el hermoso jardín Gremory.

Nirvana: Creo que debería contactarlo...

- Se concentraria tratando de comunicarse con alguien

Nirvana: (Soy yo, necesito un favor)

¿?: (Así que estás vivo)

Nirvana: (Tu sabes muy bien que no puedo morir, creo)

¿?: (Tienes razón, quién sería tan tonto para desafiarte)

Nirvana: (Supongo, en fin, necesito un favor)

¿?: (¿Qué necesitas?)

- Y así luego de una charla, Nirvana le explicaría el por qué lo contactaria

¿?: (Ya veo, así que la sekiryuutei...)

Nirvana: (¿Crees poder manejarlo?)

¿?: (Claro que puedo, solo es una cría de sekiryuutei)

Nirvana: (Gracias, mañana comenzamos el entrenamiento. Te la llevaré para que la prepares)

¿?: (Yo me encargo de hacerla alguien aceptable)

- La comunicación simplemente se cortaría. Nirvana solamente siguió disfrutando del ambiente. Llegado la noche, sería interrupido por un pequeño ruido de su puerta.

Nirvana: ¿Quién es?

Rias: Soy Rias, ¿tienes un momento? Quiero hablar contigo...