¿?: Oye Elohim, ¿crees que debería morir?
Elohim: ¿Por qué dices eso?
¿?: Mi vida no tiene sentido, he estado aquí por no sé cuanto tiempo, soy incluso más antiguo que tú, y aún así no sé qué sentido tiene mi vida...
Elohim: Nirvana... sólo tú pued...
Nirvana: Wow, los sitri si que son minimalistas con sus... casas.
- Nirvana se encontraba parado frente a una enorme casa que pertenecía a los líderes de la familia Sitri. Este lugar no solo era el hogar donde crecieron Serafall y Sona, sino que también desempeñó un papel fundamental durante la guerra al funcionar como un hospital para atender a los heridos. Las paredes de la casa llevaban historias de valentía y sacrificio, recordando los tiempos difíciles que la familia había enfrentado. Las habitaciones aún resonaban con ecos de risas y conversaciones familiares, creando una atmósfera única que transportaba a Nirvana a través de los recuerdos compartidos. Era un lugar lleno de significado, donde la vida cotidiana se mezclaba con la lucha por la supervivencia durante aquellos tiempos tumultuosos.
Serafall: Hogar dulce hogar, sígueme te mostraré los alrededores.
- Serafall se dispuso a guiar a Nirvana por los vastos rincones de la enorme casa que alguna vez fue el epicentro de la familia Sitri. Mientras recorrían pasillos amplios y decorados con toques familiares, Serafall compartía historias sobre los distintos lugares. Se detuvieron en la antigua biblioteca, repleta de libros que contaban no solo la historia de la familia, sino también relatos que habían servido como refugio intelectual en tiempos turbulentos. La cocina resonaba con aromas familiares, evocando recuerdos de comidas compartidas durante celebraciones y momentos cotidianos. La extensa galería de retratos mostraba generaciones pasadas, conectando el presente con el legado familiar. A medida que exploraban, quedaba claro que el hogar de los líderes de la familia Sitri no solo era grande en tamaño, sino también en riqueza de experiencias y memorias.
Nirvana: Veo que desde que eras una niña te gustan las cosas mágicas.
- Nirvana estaba observando con una pequeña sonrisa un cuadro de una Serafall en su etapa de niña.
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Serafall: Deja de estar viendo eso, es vergonzoso!!!
- Serafall, abrumada por un repentino ataque de nervios al pasar frente a un cuadro cargado de emociones, tomó la decisión impulsiva de congelarlo. En un instante, el hielo envolvió la imagen, distorsionando las caras y haciendo que la foto se volviera irreconocible. Era como si el frío temporal hubiera congelado también las memorias y las emociones asociadas con ese retrato familiar. Nirvana observó con sorpresa cómo la obra, antes llena de vida, quedó suspendida en el tiempo, esperando pacientemente a que el hielo se derritiera para revelar nuevamente su historia.
Nirvana: Vaya, que desperdicio...
Serafall: Vamos al salón principal, mis padres deben estar esperandonos.
- Serafall, con un gesto de calma tras su impulso anterior, tomó suavemente la mano de Nirvana. Guiándolo con confianza a través de los pasillos congelados por el recuerdo, llegaron al imponente salón principal. Al entrar, se encontraron con los padres de Serafall, quienes los esperaban con sonrisas cálidas y gestos de bienvenida. El salón, decorado con elegancia y toques familiares, irradiaba un ambiente acogedor. Era el corazón del hogar, donde las risas y las conversaciones familiares fluían como un río constante. Con la mano de Serafall aún en la suya, Nirvana sintió la conexión entre el pasado y el presente, mientras se preparaban para compartir más momentos significativos en este hogar lleno de historia y amor.
