Mi razón de existir

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Nirvana: Wow, veo que no comieron nada por un buen tiempo... me quedaré sin dinero...

- La situación se podría decir que era un poco cómica, Nirvana y las dos exorcistas estaban en un restaurante.

¿?: Muchas gracias, desconocido-san. No hemos comido porque mi compañera fue estafada con una pintura...

¿?: Oye!!!

Nirvana: No hay problema, ¿podrían decirme sus nombres?

¿?: Me llamo Xenovia, y ella es Irina, somos enviadas de la iglesia.

Nirvana: Así que la iglesia las mandó, ¿a qué se debe su visita?

Xenovia: Lo lamento, pero es algo confidencial, necesitamos hablar con los que están al mando de éste territorio.

Nirvana: Así que quieren hablar con Rias, no tengo problemas en llevarlas, sin embargo les aconsejo que no hagan ningún problema, no les conviene hacer percances en territorio de demonios.

- Esas palabras por parte de Nirvana hizo que las 2 exorcistas pongan un rostro serio.

Xenovia: Entonces llevamos con la que está al mando.

Nirvana: Claro, pero terminen su comida...

- Aun tenían unos cuantos platos por terminar. Un rato después, ya habiendo pagado la comida, los tres se aportarían un poco de las personas para luego ser transportados a lo que sería el club de lo oculto.

Nirvana: Tomen asiento, iré a buscar a Rias.

- No le tomaría mucho tiempo, recién salían de los vestidores de la piscina ya con ropa cómoda. Nirvana le pondría al tanto de las cosas a Rias, cabe aclarar que Rias se molestó que exorcistas irrumpan en su territorio así como si nada. Hay protocolos que seguir, y ellos habían decidido burlarse de esos protocolos.
Tanto Rias como su séquito seguirían a Nirvana que los guiarla hacia donde estaban las exorcistas sentadas en uno de los sofá del club, esperando tranquilamente a los demonios. Una vez llegado a donde estaban ambas, Rias tomaría asiento mientras que todo su séquito se paraba atrás de Rias. Nirvana simplemente tomaría asiento en otro sofá.

Rias: ¿A qué se debe la visita de los enviados de la Iglesia?

- Hablaría Rias con una mirada seria y amenazante.

Xenovia: Heredera Gremory, seré rápida. Fuimos enviadas a rescatar unos objetos que fueron robados. No se metan en nuestros asuntos, es eso lo que quería decir.

Rias: Exorcistas, saben muy bien que hay protocolos que seguir para entrar a territorio de demonios, y a pesar de eso, vienen y me plantan cara, intentando darme orden...

- Rias dejaría salir un poco de su energía de la destrucción en un intento de asustar a ambas, accion que sería repelida cuando xenovia sacaría de su espalda un cúmulo de vendas que tenían forma de espada, una espada bastante grande. Xenovia clavaria la espada en el suelo del club, mientras apoyaba sus manos en el mango de dicha arma

Xenovia: Conoce tú lugar, Gremory.

- La mirada de Xenovia haría que la paciencia de Rias de a poco se vaya acabando. Sin embargo el ambiente sería interrumpido por Nirvana que lanzaría un pequeño palillo hacia Kiba que miraría a Nirvana con enojo.

Nirvana: No hagas nada estúpido, mocoso.

- La mirada de Nirvana haría que Kiba solo baje la cabeza, apretando fuertemente sus puños.

Nirvana: Exorcistas, traer dos excalibur a territorio de demonios puede dar graves problemas a los ángeles. Si vienen por órdenes, deberían haber venido en paz, en lugar de hacer tanta tensión. No sean inmaduros, mocosos.