Mi razón de existir

31

Vali: (¿Es eso posible, Albion?)

Albion: (Nuestros poderes son el contrario, debería ser imposible)

Vali: (Entonces por qué demonios estoy siendo golpeada por mi propio poder!!!)

- El misterio que rodeaba el nuevo poder de Airi era desconcertante. La asimilación del poder del Hakuryuukou por parte de un Sekiryuutei era algo que desafiaba toda lógica y comprensión convencional. La mayoría de los presentes eran conscientes de los riesgos involucrados en manipular una energía tan poderosa y desconocida, y sin embargo, Airi lo había logrado de manera sorprendente.

Las teorías y conjeturas comenzaron a surgir entre los presentes, tratando de entender cómo era posible que Airi pudiera controlar el poder del Hakuryuukou sin sucumbir a sus efectos devastadores. Algunos especulaban sobre la naturaleza única de su linaje, mientras que otros sugirieron la intervención de fuerzas desconocidas que estaban en juego.

Sin embargo, independientemente de las explicaciones que se ofrecieran, la realidad era innegable: Airi había superado los límites de lo conocido y había alcanzado un nivel de poder que desafiaba toda explicación racional. Ahora, con su nuevo poder desplegado ante ellos, todos se preparaban para presenciar el siguiente capítulo de esta épica confrontación entre dragones.

Airi: Muereeeeeeeeeeeeee!!!

- El puño de Airi se lanzó con una velocidad impresionante, impactando directamente en el estómago de Vali con una fuerza abrumadora. Un estallido de dolor recorrió el cuerpo de Vali mientras el golpe lo enviaba volando hacia atrás, desgarrando su armadura una vez más y dejando un rastro de escombros en su estela.

Vali se retorció en el aire, sintiendo cómo el impacto desgarraba su cuerpo y le robaba el aliento. El dolor era intenso, pero su determinación seguía ardiendo, negándose a rendirse incluso en la adversidad más extrema.

Con un estruendo sordo, Vali chocó contra el suelo, levantando una nube de polvo a su alrededor. Se quedó allí por un momento, luchando por recuperar el aliento mientras su mente se enfocaba en resistir el dolor y volver a ponerse de pie para continuar la batalla.

Vali se encontraba en una situación desesperada, incapaz de avanzar como lo había hecho en el pasado. Sus estrategias cuidadosamente planeadas parecían inútiles frente al poder abrumador de Airi. Cada movimiento que intentaba era anticipado y contrarrestado, dejándolo vulnerable a cada uno de los ataques de su formidable oponente.

La sensación de impotencia la abrumaba mientras luchaba por encontrar una manera de salir adelante. Antes, podía manejar cualquier situación con facilidad, pero ahora, enfrentarse a Airi, que había obtenido un poder inimaginablemente poderoso, lo había llevado al límite de su resistencia. Cada golpe que recibía era un recordatorio doloroso de su debilidad momentánea, y no sabía cuánto tiempo podría aguantar antes de caer derrotada.

Vali: (Maldición Albion, si seguimos a éste paso vamos a perder!!!)

Albion: (Estoy haciendo lo posible Vali, pero esa niña divide constantemente nuestro poder)

Vali: (Mierda!!!)

Albion: (Prepárate para el impacto, Vali!!!)

- Gracias a la advertencia de Albion, Vali pudo elevar su guardia justo a tiempo para enfrentar el próximo ataque de Airi. Con los sentidos agudizados y la determinación renovada, se preparó para resistir lo que fuera que su oponente le lanzara.

El poder de Airi se desató con ferocidad renovada, pero esta vez Vali estaba listo para ello. Cada golpe que recibía era bloqueado o desviado con movimientos rápidos y precisos. Aunque la presión seguía siendo intensa, Vali mantenía su compostura, determinado a no ceder ante la arrolladora fuerza de su adversaria.