¿?: Oye Elohim, ¿crees que debería morir?
Elohim: ¿Por qué dices eso?
¿?: Mi vida no tiene sentido, he estado aquí por no sé cuanto tiempo, soy incluso más antiguo que tú, y aún así no sé qué sentido tiene mi vida...
Elohim: Nirvana... sólo tú pued...
- La situación era bastante cómica en el club de lo oculto, desde que se había recuperado de su resfriado, Airi ha estado llena de energía, había completado el tiple de los contratos que usualmente hacía. Se veía más reluciente, como si fuera una persona nueva.
Airi: Me siento renovada, así que voy a adelantar trabajo para poder ir a entrenar con el viejo Tanin.
Rias: ¿Pero no crees que te estás excediendo un poco?
Airi: Claro que no, esto no es nada. ¿Por cierto, Nirvana aún no regresó de Kyoto?
Rias: Por lo que escuché regresó hace poco, pero no vino al club de lo oculto y ha estado faltando a clases. ¿A qué se debe tú pregunta?
- Rias observaba seriamente a Airi, no era usual que ella pregunte por Nirvana, por lo que había algo raro entre esa pregunta.
Airi: Solamente quiero hablar con él, necesito preguntarle unas cosas, además también necesito agradecerle por algo que hizo por mi.
Rias: ¿Has visto a Nirvana? Ni siquiera yo pude verlo...
Airi: No lo vi directamente, pero podría decirse que estuve con él de cierta manera.
- Airi tenía una sonrisa boba en su rostro recordando lo cálida que se sentía ser rodeada del poder de Nirvana.
Rias: Ya veo...
Airi: ¿Los demás donde están? No los vi desde que llegué.
Rias: También están adelantando contratos, necesito que vayamos lo más antes posible al inframundo para planificar la reunión de jóvenes demonios.
Airi: ¿Reunión de jóvenes demonios?
Rias: Es un evento que hay entre los herederos de los clanes que quedaron, donde asistenten las figuras más importantes del inframundo para escuchar nuestros sueños y metas. Es más un evento por formalidad que otra cosa.
Airi: Wow, debe ser increíble.
Rias: No es para tanto, usualmente siempre hay peleas entre algunos.
- Las charlas continuaron por un rato hasta que Airi finalmente había acabado sus contratos y se iría hacia su hogar, dejando a una solitaria Rias en el club de lo oculto.
Rias: Tengo que informar a mis padres que iré a su hogar...
- Los pensamientos de Rias serían interrumpidos cuando de repente, las puertas del club de lo oculto serían abiertas abruptamente, exaltando a Rias ya que no conocía a la persona que había abierto las puertas de su club.
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La chica pasó tranquilamente sin siquiera saludar a Rias, y se sentó de igual manera frente a Rias que no decía una palabra ante lo que estaba sucediendo. Sin embargo había algo que ella si logró comprender, esa persona no era alguien al que pudiera desafiar, era una montaña a comparación de ella. Sin embargo no sentía miedo, por lo que ella fue la primera en hablar.
