Esta historia es la continuación de "La Bruja" decidí que estaría bien seguirle ya que me llego mi inspiración.
Así sin más, espero que les guste.
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Había días que no sabia que hacer, y mas cuando se iba su maestra por días por los encargos que le hacen como Bruja.
Wednesday Addams, una bruja mitad humana, pero también era una inmortal.
Hace un tiempo atrás Wednesday la salvó de unos cazadores, que mataron a todo un pueblo por culpa de ella. Ya que no pudo controlar su transformación y se dieron cuenta que era una cachorra de lobo.
Después de eso la Bruja la salva y la adopta como su alumna.
De eso a pasado unos 7 años y ahora con sus 16 años, Enid Sinclair estaba decidida a hacerle ver a su maestra que puede ir con ella a sus misiones especiales con su maestra.
Ahora mismo se encontraba preparando un remedio mágico, para vender en el mercado humano en uno de los tantos pueblos que compran sus productos de sanación. Le gustaba prepararlo ya que era los aromas florales, que la relajaba de una manera tranquilizador.
De repente oyó como se abría un portal, pero sabia que no era su maestra.
"¿sera la señora Morticia? ¿o la vieja Addams?" Penso Enid mientras miraba la puerta, respiro profundamente y así supo quien era.
Corrio hasta la puerta y lo primero que vio fue la elegante mujer alta y con ropas oscuras, mirándola fijamente.
- buenas tardes pequeña - le sonríe amablemente la mujer.
- buenas señora Morticia - le tenía respeto, ya que era la madre de su maestra y le gustaba pasar tiempo con ella, pues le contaba cosas sobre Wednesday. - ¿cómo se encuentra? -
- todo bien cariño, ¿dónde se encuentra mi gruñona Wednesday? - dice la mujer mientras entra y observa la mesa de trabajo de la joven. - ¿trabajando? -
Enid va a la zona de cocina y rápidamente con un movimiento de mano empiezan a moverse las tazas y algunas cosas más para preparar un té para su invitada.
- si, salió a una misión. Me pidió adelantar unos pedidos para la venta de esta semana - sonríe pues aún cuando era una locura, una licántropo estaba haciendo magia con facilidad.
Morticia sabia poco del entrenamiento de su hija a su protegida, por eso la mujer estaba sumamente sorprendida cuando vio que la chica lo hacía con suma facilidad.
- que impresionante, Wednesday hizo un trabajo sorprendente en poco tiempo - la rubia la mira sin entender. - para realizar un hechizo como el que usas, debes pasar por varios entrenamientos mentales - comienza a explicar, mientras con un chasquido mueve un libro que estaba en la mesa. - ya que es un uso mental cansado para alguien que no nació con sangre de bruja - Enid seguia sin entender, como es que le era una sorpresa para la mujer.
- pues... no sé, la maestra me dijo que tomaba tiempo pero que se podía si despejaba la mente... y pues... - con otro movimiento hace que el mismo libro que se quedó en el aire, fuera a sus manos. - solo sucedió - dice ella sonriendo. - es algo que no comprendo por completo pero... la maestra es amable conmigo y muy paciente... que me lo explica de una forma que puedo verlo con tanta facilidad... - el libro en sus manos lo sostiene de manera suave y lo pone en sus brazos.
La mujer sorprendida por la forma de ser de la rubia, pues no se parecía a los licántropos alfas que suele toparse en sus trabajos de sanadora.
- suelo tener muchos licántropos en mis viajes, y tu definitivamente no eres como ellos - sin usar magia va por su té y toma un sorbo. - me gusta la magia, pero suelo usar las manos más últimamente... ¿te pasa? - mira ella a la chica, mientras se acomoda en la encimera de la cocina.
