Continuación de Enid en problemas, nada de +18 en esta ocasión.
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Todo estaba en silencio en la academia Never More, el único sonido que se podía apreciar, era la lluvia misma. Por eso todos los alumnos estaban en sus respectivas habitaciones y la hora de dormir ya había pasado desde hacía dos horas.
También que desde los sucesos de Lauren Gates y Tayler, el nuevo director decidió implementar el horario de cierre de entrada. Dejando a los chicos sin posibilidad de salir a una hora respectiva.
Solo que había dos chicas que ni la hora de dormir, ni la de no salir respetaban.
Una chica oscura, con mirada tan fría que podría congelar a todos lo que se atrevían a verla, andaba caminando hasta una vieja cabaña en los alrededores de la academia y era conocida por ser la sede del club de apicultura.
Seguida por una rubia colorida que también estaba muy molesta con su compañera, intentaba seguirle el paso a su pequeña novia.
Cuando ambas llegaron a la cabaña, Wednesday mandó un mensaje a Eugene para que las cubra por si pasaba algo y prometiendo que cuidaran de las abejas.
Enid estaba muy preocupada porque estaba muy cerca de las abejas, era conocida por ser peligrosa apra los licántropos. Incluso podía matar a alguien... luego de cierta cantidad de picaduras. La chica miraba con cautela la pequeña habitación, pues aún cuando se unió formalmente al club, casi no iba a no ser que ambos chicos solitarios necesitaban una mano extra (aparte de Things).
Eso incluía arreglos permitidos a dicho espacio, cosa que aprovecho Wednesday para ampliar el lugar y modificar un poco. Teniendo algo de dinero extra (gracias herencia Addams) pidió al director permiso de modificar y mejorar todo el sector de apicultura, dejando que se haga una mayor producción de miel que ya estaba generando ganancias a los chicos.
Hasta Enid que solo iba de visita y colaborar en reparaciones, logró tener una cuenta especial por ser miembro del grupo y su billetera estaba incrementando significativamente.
Wednesday la verdad no usaba ese dinero, aunque solo lo usaba para mantener el lugar como gastos comunes y para utilidades.
Les estaba llendo bien a los chicos.
Eso lleva a porque estaban ahí.
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- sabes que fue mala idea, ¿verdad? - dice una rubia un poco mojada, pero también molesta.
Wednesday que se estaba sacudiendo y también el contenido de su pequeño bulto, hace un sonido de queja con su boca.
Dejando sus cosas en la pequeña mesa, va a lo que es la cocina que se adaptó para sus necesidades y toma del pequeño frigorífico una barra de chocolate.
Se acerca a Enid y se lo entrega. - ten, ahora mismo hago algo caliente - dice Wednesday observando fijamente a la rubia, luego se aparta y va a preparar un poco de té para su novia y un poco de café para ella misma.
Lo genial de tener más libertades (estar a último año escolar, y portarse bien ayuda mucho), es que logro tener muchas modificaciones a esa cabaña. Incluyendo el frigorífico y su cafetera, algo que no le dejan tener en su habitación desgraciadamente. Una de las modificaciones también incluye una pequeña habitación con cama y baño, pues en época de frío a Eugene le gusta pasar tiempo con sus abejas. Tanto que sufría también de frío, algo que cuando se enteró Wednesday se encargó de los permisos y mando a construir inmediatamente.
Enid se quitó su chaqueta mojada y lo tiende en la silla donde estaba ella en ese momento, luego se pone a pensar en como terminaron ahí.
Y recuerda cómo es que la gotica la convence fácilmente esa mañana.