Amigas

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Wednesday Addams miraba con seriedad la chica enfrente de ella, una rubia de ojos azules y también tenía colmillos muy notorios. Pero lonque le llamaba la atención, era que tenía un fuerte hematoma en la mejilla y algo de sangre manchada en su ropa y cara.

No es que esté asustada o preocupada.

Estaba molesta con la niña.

La Addams estaba por cumplir su venganza contra los niños que mataron a Nero su escorpión. Pero se tenía que meter esa niña, aunque, debería haberle agradecido. Bueno eso pensaba la rubia, después de todo esos mocosos la tenian agarrado mientras se rascaba como locos.

Wednesday le había puesto un poco de polvo, algo parecido al polvo pica pica pero era más puro, gracias a las patas de arañas que tiene en su casa. Y no calculo bien, que uno de esos chicos aguanto más su picazón y la tomo a la fuerza.

Sabia pelear, pero ese chico la atacó con la.guardia baja. Lo que ocaciono que la niña parecería que estaba perdiendo.

Eso fue lo que vio la rubia y se metió en medio de la pelea.

Ahora estaba ambas chicas esperando a sus respectivos padres.

- por cierto... porque se estaban rascando como locos esos tontos - la voz de la rubia sonó por todo la habitación.

¿Donde se encontraban? Fácil.

En la comisaría.

El odioso sheriff Donovan las agarró y a los chicos que no paraban de rascarse. Esos pobres chicos fueron bañados para calmarlos pero ni así se les pasaba el pico.

- polvo de pelos de araña - respondió Wednesday aún mirando mal a la niña.

La cual al oír eso le dice. - ¿polvo pica pica? - y la mira con algo de asombro. - genial - y sonrio de una manera algo rara para la Addams.

Luego de eso, los padres de las niñas llegaron a buscarlas. Después de que el sheriff Donovan les explicara lo que sucedió, se las llevaron a su hogar.

Y con ese día, la Addams deseo volver a ver a la niña, que no sabía su nombre.

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- hola, soy Enid Sinclair. Es un placer conocerlos - una rubia de ojos azules veía atentamente a todos sus nuevos compañeros de clases.

Pero le llamo la atención una niña en específico.

- ¡Wednesday! - grito a todo pulmón la niña para llamar la atención de la niña de cabellos oscuros y mirada tétrica.

Se acercó a ella aprovechando que tenía un sitio vacío junto a ella. Todos los que se llaman sus compañeros de clases veían a la rubia como si fuera la última vez. Bien se sabe que el que termina sentado a lado de la niña, cambiaba de escuela y jamás lo volvian a ver.

La Addams solo miro a la niña y fue cuando la reconoció.

- eres la niña molesta de la vez pasada - le dijo indiferente.

- me llamo Enid Sinclair y ahora seré tu vecina de mesa - dijo firme y sonriente.

- que tragedia - fue todo lo que dijo,  y sorprendentemente la niña rubia lo tomo como un cumplido.

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Para la sorpresa de todos sus compañeros y maestra, Enid aún vivía al final de la semana.

Y es que la verdad, Wednesday aún cuando se empeñó a asustarla o incluso amenazó con dejarla calva, la niña rubia no se iba.

Y cuando pasó el mes ya era inútil seguir intentando. La niña no se va a ir.

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