VII

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{POV; Chiara}

Desperté algo más pronto de que la música comenzará a sonar. Esa ruidosa e insoportable música.
Miré a mis lados a la vez que recordaba todo lo que pasó ayer con Violeta, alegrándome y tranquilizandome al saber que ya está todo zanjado y que el problema había terminado.

Me giré para encontrarme con la pelirroja, aún dormida, relajada y con una carita de niña buena.
Me puse en su lugar y pensé que a mi no me gustaría que me despertase esa música del diablo, yo preferiría que me despertase algo más suave.
Con la yema de mis dedos acaricié sus mejillas, después mi dedo se movió hasta su nariz, dejando suaves toquecitos en esta. Un poco involuntariamente, volví mi mirada a sus labios rosados. Mi dedos también fueron a parar allí, acariciándolos.

Entonces, antes de que yo pudiera reaccionar, mordió mi dedo mientras reía.

De verdad me asusté y lo siguiente que sentí fue vergüenza al saber que ella estaba despierta mientras yo rozaba sus labios.

-Good morning, baby.- dijo después de soltar mi dedo.

Y antes de que yo pudiera responder, Violeta se abrazó a mi cintura tal y como anoche, ahora dejando su cabeza apoyada en mi pecho.

-Hueles muy bien.- susurró, haciéndome recordar a aquel pase de micros, el culpable de nuestro pequeño malentendido.

-Lo sé.- dije, sarcásticamente, haciendola reír y sacando de mí cabeza ese otro tema. No quería recordarlo ni una sola vez más.

De pronto, la música sonó, haciéndola pegar un pequeño salto.

-Ufff, la odio.- dijo, refiriéndose al sonido.

Entonces se abrazó más a mí y comenzó a dejar besos por mi escote, provocando que no pudiera evitar sonrojarme. Posiblemente es que ella lo hiciera con todas sus amigas, que yo era una más, pero por una vez más, no podía evitar sentirme especial.

-Venga, parejita, que hay prisa.- dijo Naiara, saliendo del cuarto.

-¿Prisa?- pregunté mientras Violeta sacaba su cabeza de aquel hueco.

-Noemí quiere hablar con todos inmediatamente. Lo dijo ayer cuando ninguna de las dos estaba.- habló Denna, sin casi mirarnos y salió también del cuarto.

Ambas, Violeta y yo, nos levantamos y dándonos la espaldala una a la otra, nos vestimos.

-Oye, ¿No has notado a Denna un poco enfadada?- pregunté una vez estuvimos listas las dos, antes de salir.

-Mmmm... No sé, yo creo que estaba normal.

Decidí hacerle caso, al fin y al cabo ella era su amiga, no yo. Después salimos y fuimos hasta la sala de ensayos, esperamos a que llegarán los pocos que faltaban y, cuando estuvieron, Noemí se preparó para hablar.

-Ayer revisé las cámaras y me encontré con una pequeña sorpresa. Pero antes de nada, ¿Os gustaría decirme las normas que tenemos qué seguir?

-Respeto.- dijo Martín, y Noemí asintió.

-Ser higiénico.- habló, esta vez Bea.

-Seguir los horarios.- Habló Omar justo después.

-Muy bien los dos, pero, ¿No se os olvida alguna?

Violeta, quien estaba a mi lado, levantó la mano y la profesora le dió el turno de palabra.

-No ir a la sala de audiciones, al gimnasio o aquí después de las 10 y antes de las 8.

-Muy bien, chica... Qué hipócrita que seas tu quien lo diga, ¿No, Chiara?

Aquello último nos dejó desconcertadas a las dos y nos miramos la una a la otra, hasta que al mismo tiempo recordamos la escena de ayer y nos sentimos totalmente pilladas.

-Y por culpa de estas personas que he visto desobedeciendo esta regla, todos tendremos un castigo.

La sala se llenó de lamentos de nuestros compañeros. Sonido que imité para que no sospecharan.

-¡Eh, eh! Aquí cobran justos por pecadores.- habló, como si hiciera lo correcto. -Ahora mismo me vais a recrear de nuevo vuestra actuación, y espero que os salga mejor que el pase de micros de ayer.

-Ni si quiera hemos desayunado.- se quejó Paul.

-Lo sé y no me importa, empezad.- Dijo, sentándose.

Fuimos saliendo todos en el mismo orden de ayer y tarde o temprano les tocó a Denna y a Violeta. Hoy no quería que se volviera a repetir lo de la otra vez. No lo quería ver y tampoco quería escuchar a mis compañeros animándolas o a Noemí felicitándolas.
Violeta se lo merecía cien por cien, pero Denna no.

Antes de que empezarán, me levanté y fui con la profesora.

{POV; Violeta}

Vi como, antes de que Denna y yo empezáramos con el número, Chiara se levantó a hablar con Noemí.
No sé que le dijo, no lo pude escuchar, pero lo siguiente que pasó fue que la pelinegra salió de la sala.

Obviamente me preocupé, pero no pude hacer nada, pues la música ya había empezado.

"TOGETHER"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora