"TOGETHER"

L

{POV; Violeta}

No sé como había empezado esta conversación en contra de mi sexualidad, solo se que me estaba agobiando mucho.
Se estaban metiendo directamente conmigo, diciendo barbaridades frente a mi novia y yo no me veía capaz de poder pararlos.

-Menos mal que por fin has abierto los ojos.

-Has hecho muy bien, chica, ser lesbiana con la cantidad de buenos hombres que hay es un desperdicio.

-¿Y no hay ningún chico por ahí qué...? Ya sabes.

No reconocía a mi familia. Me undía darme cuenta de, que en todo el tiempo que he estado con mi ex, eso era lo que en realidad pensaban. Pensaban que yo era rara, que daba asco, que mis gustos solo eran una tontería; y celebraban que, según ellos, "No me gustasen las mujeres".

-Permiso, necesito ir al baño.- oí la fina voz de mi novia y después la vi levantarse de la mesa y marcharse, con esa cara que siempre ponía cada vez que le preocupaba algo o algo la ponía triste.

Mi cabeza me dolía al ver que mis gustos era el tema principal de conversación en la mesa, y no de una forma positiva. Ya que mis padres no hacían nada, no hablaban pero tampoco hacían callar, entendí que era yo la única que podía poner freno a esto.

-Espera, espera, espera...¿No tendrás un novio ya y por eso Julia y tú lo habéis dejado?

-De hecho si.- dije firme y, ante la vista de todos, me levanté y puse mis dos manos sobre la mesa. -La hermosa mujer que se acaba de ir es mi maravillosa novia, y ahora mismo me estará esperando en la cama. Me voy, que no quiero hacerla esperar mucho.

Dicho esto, me di media vuelta y caminé tranquilamente hasta el cuarto de baño del piso de arriba, dejando atrás un gran silencio que yo había provocado.

Después de subir las escaleras, justo en frente, vi la puerta del baño cerrada y supuse que allí estaría Kiki.

{POV; Chiara}

No estaba llorando, no podía, simplemente estaba sentada en el suelo, callada, pensando en todo.

Después de conocer a sus padres pensaba que toda su familia sería igual de simpática y cariñosa, pero me sorprendí al ver que no era así, al ver la mente tan retrógrada que tenían todos.

-Mi amor.

No contesté. Simplemente abrí la puerta para encontrarme cara a cara con ella.

-No me deberías llamar así aquí.

-No importa, ya saben que eres mi novia.- habló y me extendió la mano para que la cogiera. -¿Te apetece ver una peli en mi cuarto antes de dormir?

Entrelazé mi mano con la suya con una sonrisa e, ignorando completamente el ambiente tan tenso que se había quedado en el piso de abajo, fuimos a su cuarto. No era grande, pero tampoco pequeño y estaba muy bien amueblado. Incluso tenía una tele colgada en la pared y, llamadme loca, pero no muchos tienen eso en su habitación.

Violeta me dejó elegir a mí la película que veríamos y, de todas las que habían, obviamente puse "Nightmare before Christmas" (Pesadilla antes de Navidad), una de mis pelis favoritas desde que era joven.

Nos acostamos, ella detrás mía, haciéndome una pequeña cucharita y vimos la peli empezar.

Pero tampoco vimos mucho más, ella no me dejó, pues a los diez minutos de película, comenzó a hacerme cosquillas.
Al principio fue algo sutil que, perfectamente podrían haber sido caricias, pero después comenzó a atacarme mientras yo reía y reía cada vez más.

No sé como pero, dando vueltas, acabé con ella encima mía, inmobilizando todo mi cuerpo a la vez que no podía parar de reir.

-¡P-para, Para!- supliqué como pude, ahogada de la risa.

-Tu cara...- rió ella, parando sus ataques. -Es tan bonita vista desde aquí.

-Cállate.

Noté mis mejillas colorarse a la vez que mi novia bajó hasta mi cuello, donde empezó a dejar besitos y algún que otro mordisco.

-Vivi... Vivi...- la llamé, frenándola.

-¿No te apetece?

-Si, pero... ¿Y si abren la puerta?

Violeta rió y bajó por mi cuerpo hasta quedar a la altura de mi entrepierna.

-Esta el pestillo puesto.- habló con una sonrisilla juguetona mientras desabrochaba mi pantalón.