LXX

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{POV; Violeta}

-Oye, Violeta... Violeta, Chiara...- oía una débil voz susurrando mi nombre y el de mi novia. -Ir a vuestros cuartos ya, las cámaras se van a encender en cinco minutos.

Tarde unos segundos en poder abrir mis ojos y cuando lo hice allí ya no había nadie.

Solamente estaba yo, acurrucada, como si de un bebé se tratara, sobre el pecho de mi novia.

-Kiki, Kiki... Amor...

Abrió lentamente sus ojitos, lo justo para verme.

-Mmmhh...- murmuró y se dio la vuelta, volviendo a cerrar sus ojos.

-¿Enserio?

Al ver que su intención no era moverse, tuve que ser una persona responsable y cargarla en brazos hasta el cuarto, no podía dejar que las cámaras la grabaran sobada en el sofá.

Entré al cuarto, la dejé en la cama y, ni cinco segundos después, la música comenzó a sonar.

-Violeta, apágala...- murmuró mi novia, aún en su quinto sueño por lo menos.

-Ojalá pudiera, amor.

A pesar de que hoy nos habían dejado levantarnos más tarde, por que no había clase con Toni, estaba igual o más cansada que de normal. Mira que me encanta el inglés, pero en la clase de Jill estaba que me caía del sueño que tenía y veía a mi novia, que le pasaba más o menos lo mismo.

Después de la clase, aunque ya hubiéramos desayunado, en unos minutos rápidos me hice un café, para intentar despertarme algo más y ser más productiva, pues ahora me iría con Bea y con Abril, a ensayar la puesta en escena.

Era algo sencillito, sin mucho movimiento pues la canción era lenta y tanto mi compañera como yo nos lo aprendimos enseguida. Tan rápido que solo estuvimos ensayando por menos de una hora, unos cuarenta minutos o así.

Más tarde, antes de comer, me duché para estar más fresquita y a la hora de comer, por falta de sitios, me tuve que sentar al lado de Salma. Pensaba que iba a tener que pasar de nuevo por un mal rato, pero ni si quiera me miró durante la comida.
A decir verdad, ni durante la comida, ni en la clase de inglés, ni mientras desayunabamos... Directamente no habíamos hablado en todo el día y eso eran muchas horas. Nunca nos había pasado algo así.

Por una parte me recordó a Denna, pero no tenía nada que ver. No sé porque al principio le caía mal Chiara, pero ella no era mala y me lo demostró. Salma esta haciendo todo lo contrario: Actua como si no tuviera ningún problema y después demuestra que algo pasa.

-Violeta, por favor, ven a mi despacho.- se escuchó la voz de Noemí mientras yo estaba fregando.

Sonreí, sin saber lo que se me venía encima, y le pasé me trabajo a Álvaro, por ser el que más cerca estaba.
Tranquilamente, sin malpensar nada, me presenté donde Noe me había citado y, una vez dentro de aquella sala que ya me sabía de memoria, me ofreció asiento delante suya.

-Una de las cosas que más odio, Violeta, es que me desobedezcan. Que se pasen mis normas por el forro.- habló, notoriamente enfadada, lo que hizo desaparecer mi leve sonrisa. -¿Tú me has desobedecido?

-¿Yo? Claro que no, Noe, yo nunca-

-Te lo volveré a preguntar.- me interrumpió. -¿Te has pasado mis normas por el forro?

Esta vez me callé. Tenía claro que quería que dijera que si, pero realmente no sabía que había hecho mal.

-A lo mejor esto te refresca la memoria.

Me enseño su móvil, con una foto de la terraza, donde salíamos Kiki y yo en la pantalla.

-Solo estábamos hablando.

-Solo estábamos hablando...- resolpló. -Veo que no te acuerdas de la primera vez que viniste aquí.

Inmediatamente la recordé.
Estábamos mi novia y yo sentadas mientras ella nos reñía. ¿Porqué?
Por ser pareja nada más. Cada vez que lo pienso más rabia me da y más injusto me parece.

-¿Te lo tengo qué recordar? ¿Es necesario qué te lo recuerde?

Agaché mi cabeza, clavando mi mirada en mis rodillas y en mis dedos jugando entre ellos por culpa de los nervios, esperando a que esta bronca no fuera para tanto o, por lo menos, que fuera corta. Pero no tenía pinta ni de lo uno ni de lo otro.

"TOGETHER"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora