XCIII

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{POV; Chiara}

Era un día normal, con actividades normales y situaciones normales, pero no era lo mismo.

Desde que me había despertado no tenía ganas de hacer nada. Si hubiera estado en mi casa, me hubiera tirado en mi cama todo el santo día, pero allí me obligaban a ser productiva.

No me apetecía hablar, ni estar con mis amigos o compañeros, tampoco quería tocar el piano, pero había otro instrumento.
Cogí aquella guitarra eléctrica que, desde que está, solo la habíamos usado yo y ruslana un par de veces y, tumbada en el sofá, me dispuse a tocar.

"But through all of that sorrow,
We were riding high.
And the truth of the matter is
I never let you go, let you go..."

En aquel momento quería que Violeta estuviera viendo el 24 horas, porque eso era literalmente lo que le diría si la tuviera en frente. Quería trasmitirle ese mensaje aunque fuera a esta distancia.

-Chiara, estás aquí.- habló Ruslana, asomándose por la puerta.

-Si, estaba tocando la guitarra un poco.- dije con un tono tristón.

Ruslana chasqueó la lengua y se acercó hasta estar sentada a mi lado, aunque un poco alejada, seguramente por lo de ayer. Estaba avergonzada pues me arrepentía de haberla tratado así, a ella y a Naiara. Ahora no sabía si ellas pensarían que era una maleducada.

-¿Te la regaló Violeta verdad?

Simplemente asentí.

-Ella es tan buena persona, entiendo por que la echas tanto de menos.- habló, dibujando una leve sonrisa. -Estoy segura de que ella también te extraña muchísimo a ti y que está muy orgullosa por lo bien que vas a hacer esta gala. Seguro que te salvas.

-Ella no sabe que estoy nominada.- me limité a contestar.

-Seguramente ya haya visto el 24 horas y ya lo sepa, pero eso es lo de menos.

-¡Ruslana! ¡Chiara! ¿Venís o qué?- gritó algún chico.

-Es verdad, ya es hora de cenar y he venido a avisarte.- dijo Ruslana, levantándose del sofá y extendiendo su mano para que la agarrara.

-Gracias.- fue lo único que pude decir, con una débil sonrisa en mi cara.

-No es nada. Y venga, creo que hay puré de patatas para la cena.

{POV; Violeta}

Llegué sobre las 3 de la madrugada a mi casa, después de la gala y lo único que me apetecía en ese momento era dormir. Estaba reventada así que, después de saludar a mi familia, me subí a mi cuarto y me tiré a la cama. Si, sin ponerme el pijama o desmaquillarme.

A la mañana siguiente, aún me levanté pronto, a las 10. Me desperté hambrienta y de la cama, fui directamente a la cocina, haber si encontraba algo rico, pero antes me encontré con mi hermana.

-¡Ostia, la llorona se ha metido a casa!- gritó, de broma, seguramente refiriéndose a mi maquillaje.

-Ja, ja... Eres la revolución de la comedia.

Seguí con mi objetivo y, tras coger unas cuantas galletas caseras que hacía mi madre y estaban muy buenas, subí al baño. Aunque no me importara que mi familia me vea así, tampoco era plan de ir como la llorona por casa, según mi hermana.

Y, cuando me vi al espejo, comprendí totalmente su susto.

Tenía las pestañas hacia arriba, todo el rimel y las sombras corridos por alrededor de mis ojos y el pintalabios me llegaba hasta mitad de mi mejilla. Más que la Llorona era un poco el Joker, pero bueno.

Me lavé la cara hasta dejarla completamente limpia y libre de maquillaje y, después de lavarme los dientes, fui hacia mi habitación. Pensé en vestirme e ir a dar un paseo o llamar a alguno de mis mejores amigos, para saludarnos y tomar un café o algo, pero para eso tendría que deshacer la maleta.

Saqué y saqué ropa, tantas prendas que algunas no sabía ni que existían y otras que no me había puesto nunca, pero me quedé muda al ver, al final de la maleta, una prenda que conocía muy bien.
Una sudadera blanca que, cuando la cogí, vi una estrella en el centro de esta.

La pegué a mi pecho, dejándome captar aquel olor tan característico de mi novia y acordándome de ella, hechándola de menos.

Me enfadé por lo que había hecho, por haberme dado su sudadera favorita sin que me diera cuenta por más que le dijera que no, pero enfadarme no me servía de nada. Mejor, me alegraría. Con esto tendría algo para recordarla todos estos días, mientras espero a que ella sea la ganadora.

"TOGETHER"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora