Ángeles Caídos

¿Dos bandas?

4 días después. Viernes.
Pablo.

Casi eran las dos de la mañana cuándo me tiré en el sofá tras dos días de grabaciones para el especial de navidad, que tras muchos años esperándolo, por fin contaron conmigo para regalarle mi música a mis fans por Nochebuena. Desbloquee mi teléfono, al cuál no hice mucho caso estos días y estaba lleno de miles de notificaciones. Respondí a mi madre, abrí los mensajes de varios grupos y leí los tres mensajes de Malú antes de escuchar su audio.

-Holaaa. El domingo hago una comida y he invitado a muchos compañeros, así que no acepto un no por tu parte 😊

-Se que andas liado así que ya me responderás, espero que estés bien y lo pases bien, aunque no me hayas invitado... 🙄🙄

-Bueno y Lucía quiere decirte algo...

Reproduci el audio y reí al escuchar a la pequeña pedirme que fuera a comer a casa y a pintar juntos.

-Tito Pablo, ven el domingo a comer que ya tengo las pinturas para pintar juntos.

+Allí estaré! Será un placer pintar con la pequeña 😎

Cerré el chat a sabiendas de que era imposible recibir una respuesta suya a estas horas y miré las redes por encima antes de levantarme para irme a la cama a dormir. Pasé antes por el baño para secarme el pelo y cuando salí vi como la pantalla de mi móvil se iluminaba debido a un mensaje en Gmail. ¿Quién podía ser a éstas horas? Anduve hasta mi habitación y sentado en la cama abrí el correo, el cuál de asunto tenía puesto "Para Pablo López". El correo era de un tal Óscar y en el habían cuatro archivos, los cuáles decidí descargar al morirme de la intriga por verlos. Quizás era algo relacionado con el especial y por ello tenía mi correo pero no era así, ya que al reproducir el primer vídeo supe que no tenía nada de relación con lo que yo pensaba. El corazón se me hizo pedazos al reconocer su silueta y decidí cerrar el vídeo rápidamente. Aquella imagen besando a otro hombre me dejo totalmente descompuesto pero la intriga me pudo y decidí abrir los otros tres archivos antes de borrarlos. El segundo vídeo era parecido al primero y las fotos eran demostrandome que era reciente, concretamente de hace dos días. Apagué el móvil y me tiré en la cama sin entender absolutamente nada. Estaba enamorada de mí y quería estar conmigo pero entonces, ¿por qué me engañaba? La pantalla de mi teléfono se iluminó de nuevo y era otra notificación de un correo, el cuál abrí de nuevo al ver que solo era un pequeño texto.

<<Soy un amigo cercano, se qué estáis comenzando algo, o eso dice ella, pero no lo parece. Así que te lo mandó para que veas que te está engañando ya que parecia tener una relación estrecha con el chico. Fue en una fiesta hace dos días en Andalucía, como puedes comprobar en las dos fotos que te mandé. Un abrazo.>>

Deje el móvil en la mesita y me acosté en la cama mientras analizaba la situación. Se había ido a Andalucía unos días, cuando me dijo que estaba en Madrid ocupada con el disco y que por eso no podía quedar, y se había enrollado con otro hombre mientras que hoy me mandaba un mensaje invitándome a comer a su casa el domingo. Genial, pensé, seré el segundo plato y estaré para lo que le conviene. Negué con la cabeza tras pensar eso y coloqué una almohada encima de mi mientras la apretaba con fuerza. No entendía nada, parecía la típica pesadilla en la que te cuesta muchísimo despertar, pero no era así, era realidad y no lograba borrar aquellas imágenes de mi cabeza. Pensé en coger el móvil y pedirle explicaciones pero, ¿de que me iba a servir? Solo éramos un rollo, quien sabe si serio o pasajero, pero un rollo, aunque no iba a permitir ser utilizado por ella. Estaba enamorado, incluso llegué a creer que está vez podríamos ir en serio pero lo que acababa de ver me había dejado totalmente destrozado. Abrí el cajón y saqué el bote donde guardaba las pastillas para dormir, tomé una y volví a acostarme. Necesitaba conciliar el sueño aunque fueran unas horas y olvidarme completamente de lo que acababa de ver pese a saber que por la mañana esas imágenes volverían a reproducirse en mi cabeza una y otra vez.