Ángeles Caídos

Intuición.

Viernes 25 de septiembre. 8:30.
Pablo.

Hace una media hora que Lucía y yo nos hemos levantado, hemos hecho nuestros desayunos y nos lo hemos comido mientras hablábamos sobre los dibujos que estaba viendo. Ayer por la tarde Malú se fue con Pablito a Algeciras después de surgir un imprevisto en su vestido de novia.
Hace un par de semanas, antes de volver a Madrid, estuvo visitando una tienda de vestidos de novia, donde la mayoría de las mujeres de su familia habían sido vestidas anteriormente y todas terminaban encantadas. Así que decidió probarse varios hasta enamorarse completamente de uno, y ahora, por unos problemas ha tenido que bajar y hasta mañana no vuelven.

-¿Vamos a vestirnos? -pregunté levantándome y recogiendo los platos-. Te tengo que llevar un poquito antes al cole porque hoy tengo grabaciones muy temprano.

+Vale. ¿Hoy me recoge mi padre?

-Tu abuela.

+¿Y duermo contigo?

-No, con tu abuela.

+¿Y por qué no duermo contigo? -preguntó levantándose con los brazos cruzados.

-Porque mañana te recoge tu padre y mamá lo ha decidido así.

+¿No te cae bien mi padre?

-¿Y yo le caigo bien a tu padre? -pregunté sonriendo-. Ve a vestirte, venga, que vamos a llegar tarde. Ponte el uniforme verde, hoy no tienes deporte.

Se marchó sonriente y limpié rápidamente la cocina. Después me duché, me vesti y bajé a buscar a Lucía a su habitación, ya llegábamos un poco tarde. Ya estaba vestida y me pidió que la peinara y le hiciera dos coletas, como iba la mayoría de veces peinada. Hice lo que me ordenó y aunque no quedó muy contenta con el resultado, finalmente aceptó que yo no era el mejor peinando.
Nos marchamos y durante el corto trayecto en coche me contó todo lo que pensaba hacer con su padre el fin de semana.
Me despedí de ella cuando la dejé en una sala multiusos donde habían varias monitoras que se encargaban de los niños que llegaban antes y me marché rápidamente al plató de la voz. Hoy era la grabación del último asalto y sería un día muy largo.

21:30.

Caí rendido en mi sofá en cuanto llegué al camerino. Habían sido unas horas muy duras donde tuve que tomar ciertas decisiones que habían dejado a concursantes con un gran talento fuera de los directos. El público del plató pasó a Raquel, dejándome sin saber a cuál de los dos chicos, los cuáles eran mis favoritos para ganar la edición, dejaba fuera del concurso. Aquello trastocó nuestros planes y entre Antonio y yo decidimos que pasará Jorge. En directos ya les esperaban Thiago, que tenía todas las papeletas para ser el ganador y Rober, el chico que le robe al equipo de Alejandro. La verdad es que los cuatro podrían ser los ganadores pero no entendí la decisión del público ya que aquella no había sido su mejor noche.

+Pablo. -dijo Alejandro entrando en mi camerino-. ¿Te vienes a celebrarlo?

-¿Celebrar el qué? -pregunté serio.

+Que hemos terminado. Vienen los asesores y algunos concursantes. ¿No te apetece?

-Sí... ¿Dónde váis?

+A la discoteca, pincha Jan. Avisa a Lula y que venga.

-Está en Algeciras. -dije levantándome del sofá.

+No lo sabía. ¿De vacaciones?

-No, tenía unas cosas que hacer con el vestido de novia y vuelve mañana.

+¿Ya has mirado tu traje? -preguntó acariciando mi hombro.

-Sí... están arreglándomelo.

+Espero que me llegué la invitación. -contestó riendo.