Vuelvo a mirar esas dos copias idénticas que tengo delante mía, dos años después vuelvo a ver a Jesús y Daniel Oviedo. Dirijo la mirada a mi amiga que está embobada, igual que yo y de nuevo les miro a ellos.
Examino a cada uno detalladamente y me fijo en Dani, sonrío nada más llegar a sus ojos marrones que me encantan. Él al notar que le miro me sonríe y hace un gesto de "luego hablamos" y yo asiento. Puedo comprobar como Jesús hace lo mismo con Eva.
-Os podéis sentar ahí. -Dice el profesor cuando se va el tutor.
Su sitio está justo detrás nuestra, en cuanto se sientan mi amiga y yo nos giramos y nos sonrien a la vez.
-¿Que hacéis aquí? -Pregunta Eva.
-¿Sorpresa? -Dice Dani divertido.
-Yo a ti te mato Daniel. -Respondo en el miso tono que él.
-Ejem. -Tose falsamente el profesor. -Elena y Eva, sabemos que quieren ligar, pero hacerlo en el patio.
La clase se empieza a reír y yo me giro roja como un tomate.
Las horas pasan lentas, pero teniendo a Jesús y Dani detrás es como si todo volviera a ser como antes, menos aburrido. Por fin suena el timbre del recreo y hago tiempo para quedarme a solas con ellos en clase.
Compruebo que estamos solos y voy a abrazar a Dani con todas mis ganas, le he echado tanto de menos...
-Te he echado de menos. -Susurra.
-Yo a ti también feo.
Giro la cabeza y mi amiga hace lo mismo con Jesús.
-Tenemos que ponernos al día. -Dice Jesús.
-Pues sí.
Salimos al patio y veo como la melliza de Eva, Nerea corre hacia su mejor amigo.
-¡Dani! -Grita abrazándolo.
-Tonta. -Responde con una sonrisa.
-¿Y Lucía? -Me pregunta Jesús.
-Esta mala en casa.
-Dime que luego me paso a verla.
-Chicas, ¿venis a...? -Comienza a decir Calum. -¡Jesus, Dani!
Va a saludarlos y luego vuelve junto a Nerea, su novia.
-¿Vosotros dos juntos, tanto me he perdido?
-Demasiado Dani. -Añado sonriendo.
Nerea y Calum se odiaban, pero dicen que del odio al amor sólo hay un paso, ¿no? Pues ellos son el ejemplo perfecto.
El recreo pasa rápido y las últimas horas también, entro en casa gritando.
-¡Lucia! ¡Lucia! ¿A que no sabes quienes han venido al instituto? -Pregunto entusiasmada cuando abro la puerta de su habitación.
Ella se da la media vuelta y gruñe.
-Dejame dormir.
-Te dejaría, pero los gemelos han vuelto.
-¿Nuestros gemelos? -Pregunta sobresaltada.
Asiento en modo de respuesta y ella sonríe.
-Por fin estamos los cuatro de nuevo juntos.
-Por cierto, luego viene Jesús a verte.
-Ay, cuanto le he echado de menos a este niño. -Dice echándose a la cama sonriendo.
-Te dejó dormir, vengo luego.
Salgo de la habitación y no puedo evitar sonreír, sí les he echado mucho de menos estos dos años.
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Holiiiis, ¿os está gustando?