ᴮᴬᶜᴷˢᵀᴬᴳᴱ ☂️ // ᵀᴱ ᴱˣᵀᴿᴬÑÉ.

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Escena eliminada: Capítulo Veinte.
[Sensei Pogo]
(En mi libro: Te extrañé)

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(Narrador)

Pogo se había encargado de la preparación excelente de los integrantes de la academia Sparrow.

- Ya deben saber que tener algo en frente de ustedes no significa...- golpeó levemente con su palo la espalda de Alphonso.

- Ey.- se quejó.

- Que esté a su alcance.- completó Pogo.- Siempre habrá algo que se interpondrá, a veces podrán ser sus oponentes...a veces podrán ser ustedes.- explicó viendo cómo Jayme y Ben pasaban en frente para pelear.

Ambos se saludaron con un asentimiento de taekwondo y se posicionaron en forma de combate esperando la orden de Pogo para empezar a pelar.

- ¡Comiencen!.- estos empezaron el combate.

Sus misiones: Tocar la campana que tenían en medio.

Ben estaba por tocarla pero Jayme alcanzó a detenerlo golpeandolo en el antebrazo y distraerlo para poder tocarla ella pero ahora el asiático la detuvo mandanola a volar para que cayera alejada de esa.

Se levantó adolorida pero Ben la golpeó con su tentáculo tirándola de nuevo en el duro piso. Jayme preparó su boca y escupió el líquido negro, el cual fue evitado por el tentáculo del coreano siendo tirado en medio de Fei y Marcus.

El resto de la academia solo miraban nerviosos la pelea, Ben se lo solía tomar muy encerio y cuando esté empezaba, era difícil detenerlo.

Dos tiró sus tentáculos hacia la pelinegra quien los evitó agachándose pero para su desgracia fue tomada por otros más.

- Ríndete o desmayate.- sugirió Ben al tenerla enredada inmóvil entre sus tentáculos y manteniendo su boca tapada.- Tu eliges.- Jayme negó.- Es tu vida.- empezó a estrujarla con fuerza.

- ¡Ben, suficiente!.- ordenó Sloane.

- La lastimas, pulpo de mierda.- escupió Amelia enojada. Ben solo sonrió y la apretó con mayor fuerza.

- Jayme, vamos, ríndete.- sugirió Alphonso al ver cómo se quejaba del dolor.

- Me temo que en la vida real no podrán rendirse, niños.- comentó Reginald entrando a la sala de entrenamientos ganándose todas las miradas.

- ¡Es todo!.- ordenó Pogo alzando el puño.

- No.- lo interrumpió.- Jayme nos dirá cuánto resista.- la pelinegra mantenía sus ojos cerrados por el intenso dolor pero no era más grande que su ego...¿O si?.

Todos miraron a los oponentes, Ben sonrió más al estrujar nuevamente a Jayme, está se quejó bajando la mirada, notando como había un pedazo puntiagudo de madera y sin dudarlo lo empezó a tomar, Reginald al ver esto, su orgullo creció y más cuando la pelinegra se lo encajó a un tentáculo de Ben haciéndola sangrar.

- ¡Agh!.- con dolor soltó finalmente a Jayme.

Alphonso y Amelia sonrieron al ver el dolor de Ben, la pelinegra se levantó adolorida y golpeó la campana mandandola hasta el otro lado de la habitación, todos sonrieron felices.

- En tu cara, calamarcito.- soltó burlona.

- ¡Bravo!.- felicitó Reginald, Ben bufó y se levantó molesto para salir de ahí.- Recuerden niños, no sabemos de los que somos capaces realmente hasta que nos fuerzan a probar nuestra extinción.- explicó.