💣DAMAGE💣 [Serie Salento - Libro 2]

20. No me asustan

─Alista el baño para el señor. ─ordenó Jooheon a una de las criadas mientras caminaba con Baekhyun en sus brazos hacia la habitación principal.

El único pensamiento claro en su cabeza era que debía limpiarlo y cambiarlo antes de que llegara su jefe o el próximo en convertirse en puré de humano sería él. También necesitaba revisarlo, un nuevo desmayo no era nada bueno y estaba rogando para que se tratara de una baja de glucosa por el shock y no de un problema más serio en su sistema circulatorio. Cargar dos bebés ya tenía a su cuerpo en marcha extra, sumado al desastre que era su vida, él no quería ni pensar en que Baekhyun pudiera perder a los bebés.

Al llegar al baño, él y la criada se quedaron mirando uno al otro sin saber qué hacer, la jovencita lo observaba con algo de temor, pero no por la sangre y los pedazos de piel y carne que el doncel tenía hasta en el cabello, era porque ambos compartían un mismo pensamiento. ¿Quién iba a desnudarlo y a bañarlo? El señor Park los mataría por ese atrevimiento.

─Lo haremos entre los dos, quítate los zapatos y métete en la bañera, yo lo sumerjo y tú lo limpias.

La chica asintió y entre los dos le quitaron las prendas a Baekhyun dejándolo apenas cubierto por la ropa interior; afortunadamente, él reaccionó antes de que lo sumergieran al agua y ni siquiera protestó, dejó que la chica lo ayudara a limpiarse manteniendo los ojos cerrados mientras Jooheon salía del lugar.

Cuando terminaron, ella también le ayudó a vestirse y a meterse en la cama. Para ese momento su presión estaba estable, aunque su glucosa sí mostraba un descenso y su nuevo médico personal lo obligó a comer algo antes de dormirse.

─Baekbeom... Él... ─El temblor en la voz del doncel le indicó a Jooheon que no era capaz ni de terminar la frase.

─Él no importa, señor, lo único que debe preocuparle es ponerse bien antes de que llegue el señor Park o va a matarnos a los dos. ¿De acuerdo?

─¿Lo maté?

─No. Se desmayó por el dolor, no creo que haya nada que pueda hacerse por su mano, iré a cortarla en unos minutos. ¿Desea que lo cure o que lo deje sufrir?

─No quiero que muera todavía.

─Entendido.

─Gracias por cuidarme, Joohoney.

─Usted sabe que le debo mi vida.

El hombre le guiñó un ojo y Baekhyun sonrió un poco, a pesar de todo, le caía muy bien ese chico y no le producía nada de miedo. Según sus cálculos, tenía un par de horas para dormir antes de que llegaran los demás y debía aprovecharlos porque se sentía en verdad debilitado. Dormir era su cosa favorita ahora, al menos allí en sus sueños nada malo sucedía.

─¿Está seguro de que es ella, capitán?

Chanyeol estaba en la estación de policía, en las oficinas que dirigía el capitán Sandoval, quien lo había llamado para informarle de un hallazgo en el teléfono de Shownu.