💣DAMAGE💣 [Serie Salento - Libro 2]

37. A la izquierda

Baekhyun llevaba un buen tiempo sin sentirse tan nervioso. Ni siquiera con todo el exabrupto de Chanyeol le habían sudado las manos como ahora solo por saber que debía enfrentar a su hermano. Este era un peligro diferente, él debía disculparse y exponer su corazón abierto, y ahora, eso le resultaba más aterrador que enfrentarse a una bala.

Sehun le sostuvo la mano en el camino y le ayudó a bajar del helicóptero de la misma manera, sin embargo, él tenía asuntos que atender y una reunión confidencial con Esmeralda a la que Baekhyun no estuvo invitado y que le llenó la cabeza de cucarachas. No quería pensar mal de su casi cuñado, pero podía entender que Luhan estuviera tan paranoico cuando esos dos se andaban encontrando a solas por todos lados.

La enfermera le anunció que las visitas a Minseok no estaban permitidas y ese fue su primer rechazo, ellos dos sabían que él vendría a hacerse un chequeo y que aprovecharía para hablar con Jongdae antes de que se marcharan a Dusan, así que era dolorosamente obvio que el chico se había negado a recibirlo.

El examen fue exhaustivo y nuevamente resintió la ausencia de Chanyeol. Baekhyun comenzaba a acostumbrarse a esa situación, había pasado toda la noche reflexionando en lo que sentía, lo que pensaba, lo quería para su vida y la de sus hijos y cómo encajaban las personas a su alrededor en ese panorama.

Baekhyun llegó a la conclusión de que su vida era un enorme rompecabezas al que le faltaban varias fichas que no podía recuperar; había otras que no encajaban y que todavía debía discernir si las tenía ubicadas en el lugar equivocado o simplemente no pertenecían allí. Y Finalmente, estaba ese pequeño pedacito perfectamente armado que le mostraba un paisaje hermoso y lleno de luz, sus hijos.

─Doctor, ¿está seguro de que todo está bien? He tenido varios malos momentos durante mi embarazo.

─Eso puede afectar de diferentes maneras a tus hijos, pero físicamente están muy bien, sus medidas están acordes a la media para el tiempo gestacional y ya descartamos cualquier enfermedad o complicación, tus mellizos están perfectos.

─Muchas gracias.

─Debo ir a revisar al pequeño Juno dentro de dos semanas, te haré un nuevo chequeo entonces. Mientras tanto, procura estar tranquilo, sé que es difícil teniendo en cuenta lo que sucede a tu alrededor, pero piensa que justo ahora tú eres todo lo que ellos tienen. Su alimento, su salud y su estabilidad dependen de ti, así que no puedes descuidarte ni arriesgarte. Hazlo por ellos.

─Yo tengo eso muy claro, doctor, el problema es que no tengo a dónde ir. El lugar más seguro para mí es en esa hacienda.

─Y eso está bien, ahí tienen todo lo necesario para cuidarte, aun así, depende de ti mantenerte al margen de los conflictos. Yo sé que me entiendes. ─El doctor señaló la venda en su brazo y Baekhyun tuvo que asentir.

Eso era enteramente su culpa, él ya sabía que Chanyeol estaba mal y se metió en la cueva del lobo por su propia voluntad. La bala pudo impactarlo unos centímetros más a la derecha y habría acertado en su corazón, o quizás un poco más abajo y matar a sus bebés. No podía enojarse con Chanyeol por tener un brote psicótico producto de tantos días de lento deterioro, eso sería como meter la mano en la boca de un perro rabioso y luego culpar al animal por morderlo.

En eso el doctor Andrade tenía razón, él estaba rodeado de un ejército de hombres, estaba parado al lado de tres de los mejores y, aun así, se puso en peligro inútilmente... Chanyeol no lo valía. Lo amaba con todo su corazón, estaba enamorado hasta los huesos y no pretendía huir de esa realidad, pero él estaba en un segundo lugar en su vida, el primero eran sus bebés, esos que solo él podía proteger incluso de su propio padre.

Así que esa era su nueva estrella polar, la seguridad de sus hijos era su mayor prioridad y todas las acciones que emprendiera de ahora en adelante tendrían eso como único objetivo. Todo lo demás era secundario.