Capítulo 54

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Estábamos volviendo ya a casa.

- Y si vamos a un restaurante?.- Pregunté.

- Sii, que quiero comer.- Dijó Nihan ilusionada.

- Pues entonces vamos.

Fuimos a un restaurante, comimos tranquilamente y en paz y de repente sentí que mi corazón se calmaba, como si todos mis problemas se habían ido por un momento. Era una sensación rara pero agradable. Muy agradable.

Sí, todo bien agradable, hasta que empezamos a hablar sobre el pasado y me contó Hakim, que Aymen tenía una ex novia y no me lo había contado.

- Sí, no te acuerdas, Aymen? De Salma.- Dijó Hakim riéndose tranquilo.

Salma? Salma no era la hermana de Rayan?

- Salma?.-. Pregunté.-. La hermana de Rayan?

- Sí, pero estuvieron saliendo unos cinco meses nada más.

- Nada más?.- Pregunté.

- Bueno, y que tal si dejamos el tema?.- Pregunto Nihan.

- Sí, mejor. Por que sino voy a decir un par de cosas que a nadie le va a gustar y encim están los niños delante.

- Gracias.

Comimos todos en un silencio absoluto, menos Rayhan que hablaba como si no hubiese un mañana.

- Tita, tú cuantos años tienes?

- 19 añitos, mi amor y tú?

- Yo soy muy pequeñita.

- Así?

- Sí, todavía tengo 8 años.

- Buff, pues si que eres pequeñita.

- Yo quiero ser mayor, como mamá y como tú.- Si tu supieras, Rayhan. Te querrías quedar en la infancia durante toda la vida.

- No, pero así bien pequeñita, estas muy guapa.

- Ya, pues si ahora soy guapa, Imagínate cuando sea mayor.

- Insha'Allah, mi amor.

Y, así es como me empezó a hacer más de 10 preguntas. Al terminar de comer, cada uno iba ya a su coche.

- Me voy a coger un Taxi.- Le dijé a Aymen cuando ya se fueron los demás.

- Por qué? Si ya tenemos aquí un coche.

- Por que quiero estar sola.

- Y... por qué?

- Aymen, en serio te tengo que dar explicaciones de todo?

- Haber, Amira. Si no me dices por que, pues yo creo que sería un poco lógico que no lo entienda.

- Por que no quiero estar con una persona que me esta ocultando todo.

Suspiró pesadamente - Mira entra en el coche y hablamos.

- No, he dicho que me iré en taxi.

- Amira, me quieres hacer caso por una vez en tu vida. Sube y hablamos las cosas.

- Buff, Venga vale.

Subimos al coche. De camino al hotel  estuvimos en un completo silencio, hasta que yo lo interrumpí.

- Supuestamente íbamos a hablar.- Le recordé.

- Madre mía. Haber cuéntame, qué te pasa?

- Nada, yo estoy perfectamente.

- Los dos sabemos que eso no es así.

- Sí que lo es.

- Entonces cambio la pregunta, por qué estás enfadada conmigo?

- Eso ya deberías saberlo tú.

- Wow, no sabía que era adivino.

- Mira, Aymen no estoy de humor por si no lo has notado.

- Y tú te piensas que yo si?

Este chaval me está vacilado, pero sí es él el que me oculta cosas.

- No sé, lo que sí sé es que nunca me habías hablado de la relación que tenías con Salma.

- En serio? Es eso? Estas celosa?

- Ay dios mio, celosa dice.

Me está tomando el pelo, no? Celosa de qué? Si de lo que estoy cabreada es de que me este ocultando las cosas.

- Haber, como yo te explico que no estoy enfadada por eso, sino por habérmelo ocultado.

- Es que aún así son cosas de mi vida, no tienes por qué saber todo.

- En serio? Aymen, te estás dando cuenta de lo que estás diciendo?

- Obviamente.

De repente me sentí muy agobiada estando en ese coche y además con lo que me esta diciendo, necesito tomar un poco el aire.

- Frena el coche.

- Qué?

- Que frenes el coche, quiero salir.

- No, Amira. Estamos en medio de la carretera.

- Me da completamente igual, si eso me pido un taxi.

- Amira, que no.

Puse las manos en el volante moviéndolo por todos lados sin importarme las consecuencias.

- ¡¡ Amira, quieres parar!! ¡¡ Te estás volviendo loca!!

Paso todo muy rápido, nos chocamos con algo que no pude ver muy bien. Aymen poniéndose delante mía para que no me pase nada, yo viendo cristales por todos lados y de repente solo veo negro.

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