Shuumatsu no Isekai

Capítulo 24:Ojos Demoniacos vs Octava Conciencia

El sol del mediodía iluminaba la arena, creando sombras danzantes que reflejaban la tensión que flotaba en el aire. Rudeus, con su característico cabello plateado y vestimenta de guerrero, mantenía una postura tranquila pero alerta. A su lado, Buda, con su actitud relajada y una paleta de dulces en la mano, observaba a Rudeus con una sonrisa despreocupada.

Rudeus: (murmurando para sí mismo) "Este enfrentamiento no será fácil. Buda es más poderoso de lo que parece, y su confianza en sí mismo es impresionante."

Buda, con su voz tranquila y desenfadada, rompió el silencio.

Buda: "Oye, Rudeus-chan, ¿no crees que podríamos resolver nuestras diferencias de una manera más pacífica? No quiero arruinar mi merienda."

Rudeus, consciente de la personalidad de Buda, respondió con cortesía.

Rudeus: "Lo siento, Buda-sama, pero no puedo dejar que amenaces a mi familia. Estoy dispuesto a luchar para protegerlos."

Buda: "Oh, Rudeus-chan, siempre tan serio. Pero entiendo, la familia es importante. ¿Qué te parece si haces una pausa en esta batalla y compartimos algunos dulces? La felicidad está en las cosas simples de la vida, ¿sabes?"

Rudeus, aunque apreciaba la oferta, mantuvo su mirada enfocada en el enfrentamiento que se avecinaba.

Rudeus: "Gracias por la oferta, pero primero debo cumplir con mi deber. Luego podremos charlar y compartir dulces, si así lo deseas."

Buda asintió con una sonrisa, dejando claro que no se tomaba la situación tan en serio como Rudeus. La multitud que rodeaba la arena observaba con expectación, ansiosa por presenciar la batalla entre estos dos poderosos guerreros.

Rudeus desplegó su magia, creando un brillo mágico a su alrededor, mientras Buda, con una tranquilidad pasmosa, continuaba saboreando su paleta de dulce.

Rudeus: "Prepárate, Buda-sama. No subestimo tu poder, pero tampoco permitiré que amenaces a mi familia."

Buda: "Oh, Rudeus-chan, siempre tan serio. Pero ya verás, la verdadera felicidad viene de dentro. ¿Estás listo para aprender esa lección?"

La batalla comenzó con un choque de habilidades mágicas y estrategias tácticas. Rudeus, con su mente analítica y Ojos Demoniacos, buscaba debilidades en la defensa de Buda, mientras este último confiaba en su Iluminación para anticipar cada movimiento de su oponente.

En medio de la batalla, Buda, con su actitud desenfadada, no dejaba de ofrecer dulces a Rudeus, creando un contraste entre la seriedad del combate y la despreocupación del dios. La arena se llenaba de magia y energía, y el destino de esta épica confrontación aún estaba por decidirse.

Rudeus esquivaba con destreza los ataques de Buda, utilizando su magia para crear barreras defensivas y contraatacar con hechizos poderosos. Sin embargo, cada vez que parecía tener a Buda acorralado, este último se desplazaba con una agilidad sorprendente, evitando hábilmente los ataques de Rudeus.

Buda: "¿No es este un buen momento para un descanso, Rudeus-chan? Estás perdiendo la oportunidad de disfrutar de estos deliciosos chocolates que tengo."

Rudeus, concentrado en la batalla, apenas prestó atención a la oferta de Buda.

Rudeus: "Tu actitud despreocupada no cambiará mi determinación, Buda-sama. Estoy dispuesto a luchar por lo que creo."

La lucha continuó, y en un momento de intensidad, Rudeus se encontró en una situación apremiante. Buda, sin perder la sonrisa, aprovechó la oportunidad para lanzar una serie de preguntas filosóficas mientras esquivaba los ataques de Rudeus.

Buda: "¿Qué es más importante, la fuerza bruta o la paz interior, Rudeus-chan? ¿Crees que la verdadera victoria está en la batalla o en la aceptación de uno mismo?"

Rudeus, con sudor en la frente, respondió entre golpes.

Rudeus: "No tengo tiempo para reflexiones filosóficas ahora, Buda-sama. Estoy aquí para proteger a mi familia, y haré lo que sea necesario para lograrlo."

La batalla llegó a su punto culminante cuando ambos guerreros desataron sus habilidades más poderosas. Rudeus canalizó su Aura de batalla, envolviéndose en una energía mágica que aumentaba su fuerza y velocidad. Buda, por su parte, desató la plenitud de su Iluminación, creando una atmósfera llena de luz y poder divino.

En medio de la intensidad del enfrentamiento, Buda continuaba disfrutando de sus dulces, como si la batalla no fuera más que un juego para él. Rudeus, a pesar de su destreza mágica y táctica, luchaba con su propia inseguridad y dudas.

Buda: "Rudeus-chan, la vida es corta, ¿no crees? Tal vez deberías relajarte un poco y disfrutar del momento."

Rudeus, agotado pero determinado, respondió con firmeza.

Rudeus: "Puede que tengas razón en algunas cosas, Buda-sama, pero hay cosas por las que vale la pena luchar. Y mi familia es una de ellas."

La conclusión de la batalla se mantenía incierta, pero ambos guerreros continuaban enfrentándose con todo lo que tenían, cada uno con sus propias filosofías y motivaciones. La arena resonaba con la magia y la energía de su enfrentamiento, mientras el destino de esta épica confrontación pendía en el equilibrio.