Un oscuro salón de guerra. Las paredes están cubiertas con mapas y estrategias militares. En una mesa central, Tanya Degurechaff, una niña pequeña con ojos fríos y calculadores, revisa informes. Brunhilde, una valquiria de mirada dura y gesto imperturbable, entra en la sala.
Tanya: (Sin levantar la vista de sus informes) ¿Quién eres y qué quieres?
Brunhilde: (Con voz firme y decidida) Soy Brunhilde, una valquiria. Vengo a reclutarte para luchar contra los dioses y salvar a la humanidad de su destrucción.
Tanya: (Alza una ceja y deja los informes a un lado) ¿Salvar a la humanidad? (Ríe fríamente) ¿Y por qué debería importarme eso?
Brunhilde: (Dando un paso adelante, sus ojos brillan con determinación) Porque los dioses son arrogantes y creen que pueden jugar con nuestras vidas. Tú, más que nadie, deberías entender lo que significa ser manipulado por seres superiores.
Tanya: (Cruza los brazos y se inclina hacia atrás en su silla) Interesante enfoque. ¿Y qué te hace pensar que estaría dispuesta a unirme a tu causa? Mi único interés es mi supervivencia y comodidad. No me arriesgaré sin un beneficio claro.
Brunhilde: (Sonríe con malicia) Sabía que lo dirías. Te ofrezco poder, recursos y una oportunidad para vengarte del ser X,que es un dios exterior. Serás libre de su influencia, y podrás vivir tu vida sin la sombra de los dioses sobre ti.
Tanya: (Sus ojos se estrechan mientras considera la oferta) Poder y libertad, dices. (Se levanta y camina alrededor de la mesa) Es tentador, muy tentador. Pero necesito más que palabras. Necesito garantías.
Brunhilde: (Asiente) Tendrás la ayuda de una de mis hermanas, una valquiria convertida en un arma capaz de matar dioses, la podrás usar para matar a tu enemigo jurado. No solo estarás luchando para salvar a la humanidad, sino para forjar tu propio destino sin interferencias divinas.
Tanya: (Deteniéndose frente a Brunhilde, mirándola directamente a los ojos) Acepto tus términos, pero ten en cuenta esto: no me uniré a una causa perdida. Si veo que esto no tiene futuro, no dudaré en abandonarte y encontrar mi propio camino.
Brunhilde: (Sonríe, satisfecha) No esperaba menos de alguien como tú. Juntas, haremos temblar a los cielos y a los dioses que creen tener el control sobre nuestras vidas.
Tanya: (Sonríe con frialdad) Entonces, tenemos un trato. Vamos a enseñarles a esos dioses lo que realmente significa el poder humano.
Brunhilde: (Asiente y extiende su mano) Por la humanidad.
Tanya: (Toma la mano de Brunhilde, sellando el trato) Y por la libertad.
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Shuumatsu no Isekai
Fiksi PenggemarLos dioses han decidido exterminar la humanidad por el simple hecho que están perdiendo mucha vida humana en Japón debido a los múltiples rencarnaciones e invocaciones que han surgido a lo largo de la historia ya que no permitirán que otros dioses u...
