Todo fue solo un juego - (español) || Drarry

Capítulo 67: LA ESPERA

Cuando Draco despertó, sentía su cuerpo pesado, incluidos sus párpados. Le tomó varios momentos a su cuerpo poder moverse, y cuando pudo, aún no podía abrir sus ojos.

Extendió la mano hacia su costado, para sentir el cuerpo de Harry, pero en lugar de golpear la espalda o la cintura de Harry, sus manos sobresalieron de la cama, lo que significa que estaba en una cama individual, no en su habitual cama matrimonial en Grimmauld Place.

Al mismo tiempo, al mover su mano, sintió un tirón en sus venas y frunció el ceño, confundido. Intentó parpadear durante varios momentos, pero todavía sentía sus párpados demasiado pesados. La habitación no era particularmente luminosa, pero era diferente.

Cuando por fin pudo abrir los ojos, vio que había un hechizo tirando de su brazo y envolviéndose alrededor de su muñeca. El rayo azul iba dirigido hacia una pantalla, que leía los latidos de su corazón y otros signos vitales.

Esto no era Grimmauld Place. Esto era San Mungo.

Le tomó varios momentos a Draco ordenar sus últimos recuerdos: estaban en Grimmauld Place, junto a Ron y Hermione. Harry no quería recibir tratamiento para sus ataques de pánico e insistía en que huyeran.

Después de eso, todo era borroso.

Oh no, eso debe significar que Harry tuvo un fuerte ataque, el cual Draco no pudo calmar, y tuvieron que terminar aquí.

Pero, espera, ¿por qué estaba él también en la cama? ¿Por qué llevaba una bata de hospital?

¿Él también necesitaba tratamiento? Francamente, con lo mal que lo había pasado en la Mansión durante aquellos dos años antes de la guerra, no le sorprendería que tuviera un colapso mental, aunque no podía recordarlo.

Miró alrededor de la habitación. No había otra cama. Estaba sólo él, completamente solo.

¿Dónde está Harry?

Draco se sentó en la cama, aunque su cuerpo se sentía pesado, y luego, se dio cuenta del hoyo que sentía en su estómago. Sentía... peligro.

¿Dónde está Harry?

Se debatió durante varios momentos, mirando el hechizo atado en su brazo, pero finalmente lo rompió. Todo lo que sabía era que necesitaba ver a Harry.

Lentamente, se puso de pie, sintiendo como si su cuerpo tuviera anclas atadas a sus piernas. Y luego, se dio cuenta de que su Marca Tenebrosa era visible en su bata de mangas cortas.

¿Cómo es que no tenía esposas? ¿Harry habló con el director de San Mungo?

Merlín, ¿por qué todo era tan confuso?

Pero entonces, Draco miró su Marca dos veces, dándose cuenta de que había cicatrices sobre ella. Estaban algo curadas, pero no eran viejas.

¿Por qué se haría eso a sí mismo? Si no lo había hecho en sexto ni en séptimo año, ¿por qué ahora?

¿Él también tuvo una crisis mental?

¿Qué demonios está pasando?

Harry. Necesitaba encontrar a Harry.

Lentamente, Draco salió por la puerta y encontró el pasillo vacío. Una ventana al final del pasillo reveló que era de noche. Draco siguió caminando lentamente por el pasillo, mirando hacia atrás en caso de que alguien más lo viera, aunque nadie lo hizo, hasta que encontró un pequeño vestíbulo donde había un escritorio.

Había una enfermera sentada que miraba páginas y páginas, con el rostro inclinado en señal de concentración.
-Em... –comenzó Draco. Apoyó su antebrazo contra su pecho para que ella no pudiera ver su Marca Tenebrosa.