Damian's Version

Capítulo 20: Sparks Fly

ERIK

Ordeno mi cuarto, por suerte casi nunca tengo desordenado, aparto unos cojines extras sobre mi cama que antes eran de Agostina, mi Mamá pregunta si quiero cenar ahora o más tarde cuando cierren el restaurante, le informo que Damian va a venir a quedarse conmigo y ella asiente sonriendo, se hacen las 10:15, me acerco al comedor para mirar por la ventana y de pronto veo su camioneta estacionarse afuera, se acerca hacia la puerta y yo me hago el desentendido, cuando golpea me tardo un poquito en abrir, cuando lo hago él aparece con su almohada y la mochila con ropa para mañana.

Él camina con mucha timidez hacia la cocina, mi Madre se acerca para besarle en la mejilla y Papá le estrecha la mano, Mamá me lo roba por un par de minutos, cuando por fin lo libera llegamos al cuarto, él deja las cosas en la silla de mi escritorio y se sacude el cabello un poco avergonzado en lo que pregunta:

—¿Te molesta si mañana me ducho acá antes de ir a la Uni? Tengo clases temprano, a las 9:30.

—Sí, no te preocupes, eso si yo entro más tarde, a las 11:00 es mi primera clase.

—Vale, genial... creo —tomamos asiento en mi cama, enciendo la Nintendo y empezamos a jugar Mario Kart juntos, de seis partidas él gana cuatro, lleva la delantera, y creo que las otras dos me ha dejado ganar.

—¿Cómo lo haces para ser tan bueno en esto? —río.

—Cuando no tienes amigos y te la pasas todo el tiempo entre libros y videojuegos aprendes ciertos trucos —ese comentario hace que deje de jugar y vuelva a perder, Damian sonríe al tener la victoria y me mira a los ojos —lo siento, no debí decir eso.

—No yo... está bien que seas sincero conmigo, además lo importante es que ahora si tienes amigos, están los chicos de la cafetería, Harper, yo... ¿Algún día vas a ir a verme tocar con la banda? Steve te conoce, pero Matt aún no y es uno de mis mejores amigos.

—Creo que voy a tener turnos los viernes por la noche en la cafetería.

—Pues si quieres le hablo a Steve.

—Claro que no, voy a resolverlo yo mismo, pero iré algún día lo juro, Harper también me ha insistido mucho que vaya —Harper, hace bastante que tengo cierta incomodidad al respecto.

—¿Ustedes dos son muy buenos amigos?

—Nuestra relación va creciendo de apoco.

—¿Crees... que ella guste de ti?

—¡¿Qué?! No —él ríe —Claro que no, espero que no, no quiero lastimarla.

—¿Por qué podrías lastimarla? ¿A caso no sentirías algo por ella si Harper comenzara...? Ya sabes.

—Soy gay, Erik, me gustan los chicos así que sería difícil —Damian ríe y comienza otra partida en el juego —Pon atención o vas a perder —cierto, si pestañeo voy a perderme en el camino, y el final de la ruta es Damian, es ahora o nunca —¡Erik! —exclama cuando le doy pause al juego —Que tramposo eres.

—¿Quieres salir conmigo mañana por la noche? Quiero ir al arcade y vencerte en todos los juegos posibles.

—¿Sabes que eso jamás va a pasar? Si puedo salir, pero voy a patearte el trasero y te quedarás sin monedas.

—Eso lo veremos mañana por la noche —Damian le quita la pausa al juego y volvemos a mirar la pantalla.

***