ERIK
Miércoles por la mañana, ordeno mis cosas del bolso para irme a la Universidad, la clase de la mañana se canceló porque el maestro está enfermo, así que me dio tiempo de tomar desayuno con mis Padres y compartir un poquito con ellos.
Dejo mis libros dentro del bolso y busco mi billetera por todas partes, le pregunto a mi Madre si la ha visto y ella menciona que está sobre el sofá del comedor, Papá la trae y casi me la entrega.
—Espera, ¿Tienes dinero para el almuerzo?
—Algo tengo, estoy bien no te preocupes.
—Déjame darte algo más.
—No es necesario —río nervioso, él saca unos tres billetes de cinco dólares de su bolsillo y abre mi billetera para dejarlos allí, cierro mis ojos en estado de pánico, sé perfectamente la conversación que se viene entre los tres.
—¿Qué es esto? —pregunta riendo, Mamá toma mi billetera y abre su boca sorprendida.
—¡Oh por Dios! —grita.
—Ya por favor —les quito mi billetera y la lanzo al bolso con enfado —Dejen de reírse de mí.
—¿Es Damian? —Mis papás descubrieron que tengo una de las fotos de la cabina puesta en mi billetera, es precisamente la que me animé en besarle la mejilla. Dios, que vergüenza.
—Somos amigos.
—¡Claro que no! —dice Papá —Anda, cuéntanos, ¿Están saliendo?
—No Papá, es solo... somos amigos... —Mi Mamá niega de inmediato.
—Eres un mentiroso, ¡Admítelo ya! Te gusta Damian, pasas todo el tiempo con él.
—Además dormiste en el hospital —agrega Papá —Estoy seguro que te gusta tanto que no eres tan cool como para aceptarlo y...
—¡Vale, vale, ya! —grito, tomando mi bolso —¡Me gusta! ¿De acuerdo? Ustedes ganan, me gusta, y no desde ahora, hace como tres años ya que Damian me gusta y mucho, pero somos amigos, aún... así que por favor no se entrometan donde no les llaman, me voy...
—¡Espera...! —Mamá sale corriendo a la cocina y regresa con un paquete de dulces —Son para Damian.
—Joder que pesados.
DAMIAN
Viernes por la mañana, me levanto temprano a ducharme y cambiarme ropa, necesito pasar urgente a la fotocopiadora de la Uni a retirar unos apuntes que olvidé ayer, estudiarlos toda la mañana para un examen que tengo esta misma tarde, mi día comienza horrible y eso que aún no son ni las ocho de la mañana.
Bajo rápido las escaleras, busco las llaves de mi camioneta y no las encuentro por ningún lugar, reviso entremedio de los cojines del sofá, pero no, no están.
—¿Qué buscas? —pregunta mi Padre con un tono de voz serio.
—Mis llaves.
—Ya no están —responde —Tu camioneta tampoco.
—¿Qué? —pregunto sin entender nada, él me indica que mire por la ventana, es cierto, mi camioneta no está afuera, ¿Qué mierda? —¿Qué pasó?
ESTÁS LEYENDO
Damian's Version
RomanceDamian es un chico de 22 años, que está por finalizar la Universidad, la vida debería comenzar supuestamente a tomar forma, pero en realidad lo único que sucede es que todos los caminos le llevan a hundirse cada vez mas. Sus Padres son de clase alt...