Capítulo 35: Soon You'll Get Better

278 41 7
                                    

ERIK

Ya estando de regreso en el garaje para ensayar algunas de las presentaciones para el día sábado, aprovecho que Steve y Harper se han ido para esperar al repartidor de comida que está algo perdido con la dirección, me quedo a solas con Matt, quién ordena unas partituras de una canción que quiere cantar.

—Entonces, ¿Por qué el primo pesado de Damian te saluda y tu solo te quedas... callado? —pregunto confundido, recordando lo incómodo de la situación.

—Es un imbécil la verdad.

—Pero, ¿De dónde lo conoces?

—No es la gran cosa, solo estaba el otro día saliendo de mi casa para el trabajo cuando... —Matt me cuenta como se lo encontró en el suelo, intentó ayudarle y lo trató mal, y posterior fue a burlarse al trabajo —Tuve que tragar saliva y morderme la lengua, y ahora que me lo encontré en casa de Damian fue como... —Matt exhala agotado —suficiente para mí, no sé qué le pasa, pero es un puto imbécil, todo lo contrario a Damian; ambos tienen familias con dinero, pero Dami es genial, es humilde y agradecido, en cambio este otro...

—La verdad es que no sé si realmente será así siempre —admito —Pero su Papá está... perdido, hizo unos negocios algo mierda y se escapó, lo dejó solo.

—¿Por eso es que está en casa de Damian?

—Si —admito, Matt se queda pensativo y en silencio, cuando regresan Steve y Harper nos comimos la comida china y terminamos de ensayar, al regresar a casa siento la necesidad de querer llamar a Damian, pero sé que no va a responderme, estos primeros días de su terapia han sido horribles, espero que las horas pasen rápido para yo poder volver a verlo.

DAMIAN

Leo la página 122 de mi libro, y siento como golpean la puerta, Polo toma asiento a mi lado de la cama y me pregunta si se puede quedar estudiando conmigo un rato, la chica que está al otro lado del cuarto ha tenido una crisis y la cosa no pinta muy bien.

—Claro, estaba prácticamente en silencio leyendo.

—Me sirve —ríe, acomodando la almohada y tomando sus libretas —Me sigue sorprendiendo que los de la Uni no te hayan dejado seguir estudiando.

—Es porque iba en último semestre y necesitaba estar en clases presenciales, lo bueno es que a ti si te dejaron estudiar y tu hermano te trae los apuntes.

—Sí, aún me falta año y medio en la Uni así que supongo que, si hubiera estado en último semestre igual que tú, la historia sería distinta —muerdo mi labio inferior cuando recuerdo que en este tiempo solo su hermano lo ha visitado, y una vez a la semana, no más de eso. Leo se da cuenta que me quedé en silencio de forma abrupta, parpadeo rápido para despertar de mi trance —Te quedaste con la mirada de las mil yardas —río de lo que dice, pero luego me pongo serio y uso un tono de voz más dulce, para preguntar lo que quiero saber.

—Polo... si no te molesta que pregunte, ¿Qué sucede con tus Padres?

—Ah —responde bajando la mirada —Mi Mamá murió en un accidente camino al trabajo, y Papá murió un mes después porque no soportó la tristeza, quedamos mi hermano mayor y yo, eso fue como hace tres años, cuando comenzó mi desorden alimenticio.

—¿Esa fue la causa de todo?

—Supongo que sí, lo he hablado con la psicóloga y ella dice que la depresión que me dio fue tan grande que es el pie inicial para todo esto. Mi hermano es dos años mayor que yo, y trabaja mucho para poder pagar las cosas de casa, por eso estudio tanto, para poder tener mi título y generar dinero.

Damian's VersionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora