El fin de semana fue tranquilo, como de costumbre no vi a Valery, Joss y yo fuimos a tomar un café y platicamos de todo lo que nos rodeaba.
-Y ¿Que paso con Albaro?- pregunté sonriente.
Dejó su café sobre la mesa y se pasó el trago de café que tenia en la boca.
-Ya casi no lo soporto- me dijo.
Sonreí.
-¿En que sentido?
-¡En todos!- espetó-. No se quiere separar de mi, me quiere besar y yo quiero conseguir algo asi como un amante.
Reí un poco.
-Debes causar un enorme impacto en ese tipo de personas. Y sobre el amante: Dile a él- volví a reir.
-No- gritó con su voz aguda-. Es capas de obsesionarse mas conmigo.
-He notado que es como una mascota para ti... te da ternura, lo tienes en la palma de la mano pero hasta ahi llegas con el pobre hombre.
-No jodas- sonrió.
Llegué al departamento cansado, era de noche y tenía sueño, pensaba en lo que me esperaria en la escuela a la mañana siguiente... me dejé llevar por mis pensamientos pero al final el sueño venció sobre la angustia.
Mis emociones eran tan cambiantes que si se pudieran ver marearian a cualquiera. Entré a la escuela el lunes de la siguiente semana al incidente, aun con el miedo de encontrarla fuera del aula.
Aun que había un miedo aún mas grande: El de si el escandalo del "supuesto suicidio fallido" había sido una noticia que habia llegado a todos lados. Con mi caminata por los pasillos de la escuela con la miradas bien en alto y la muñeca escondida en la manga de mi sudadera, me di cuenta de que nadie sabia nada. De haber sido lo contrario todos me mirarian o se reirian cuando pasase a su lado.
-Hola mi amor- llegó Valery a mi lado, como si no hubiera pasado nada el fin de semana pasado, como si todo de pronto regresara a la normalidad.
-Hola- le dije.
-Vamos a saludar a mis amigos ¿si?
Suspiré y me dejé guiar por ella saludando a toda la escuela, cuando ya ibamos por el cincuenta por ciento me detuve y le dije:
-¿Es necesario esto?
-¿Que?- preguntó desconcertada.
-Que vaguemos por toda la escuela saludando gente.
-Quiero presumirte amor- me abrazó y de inmediato me soltó.
-Valery sabes como soy- le dije-. No me gusta estar en plena exposicion publica, me siento incomodo.
-Lo siento ¿Si?- se puso de puntillas y me dio un beso que me hizo sonreir.
Me llevo a rastras como era su costumbre hasta el edificio.
Pensé por un momento que habia entendido, me sentia estresado, sofocado y harto de todo cuando se acercó a otro grupo de chicos.
Solté un bufido y pensé: <<Espero no arrepentirme de esto>> Y me marché al salon de Matematicas, dejandola de pie delante de todos.
Durante la clase hubo un silencio perpetuo entre los dos, nadie comentó nada, nadie siguió el sistema de siempre... yacimos separados y en nuestros propios mundos.
-Oye ¿Que te pasa?- me preguntó al salir de clases.
-Valery, es genial ser parte de tu locura, es genial estar contigo en el jardín trasero, es genial hacer el amor contigo pero... por fin has logrado ponerme incomodo y esto no debe ser así...
-Basta, sé lo que estas haciendo y te voy a ahorrar todo el sermón, ya te entendí. Esto se acabó- dijo la ultima frase molesta y se marchó, dejandome en la entrada del salón, parado.
Caminé por el pasillo con miedo de toparmela y crear una total atmosfera de incomodidad. <<¿Que demonios hice?>> Me pregunté mientras caminaba hasta el eatacionamiento, la lluvia comenzaba a hacerse mas intensa cuando me metí en el auto... por alguna razon mi subconciente se dividió. Por un lado me sentia bien, un tanto liberado de un estres enorme, pero el otro y el casi vencedor hacia que me sintiera mal, sabia que no era ni semejante a la sensacion de un corazón roto, pero tambien sabia que queria demasiado a Valery como para dejarla ir tan facil... debia dar mi punto, pero tambien debia darme un respiro de los arranques que teníamos ambos cuando estabamos juntos.
De pronto cuando intenté meter la llave en la ranura que esta detras del volante escuché un toque en la puerta. Valery estaba parada frente al auto, empapada.
Me pregunté que demonios estaba pensando, por que estaba ahi parada frente a la ventana del auto, pero salí de este y lo unico que rompió el silencio que aguardaba fue su voz, en un tono tranquilo.
-Quiero un beso- bajo la lluvia pude ver como sus ojos eran invadidos por las lagrimas-. Un beso de despedida.
Se alzó lentamente hasta llegar a la altura de mi rostro y me dio un beso, hizo un gesto de dolor mientras sus labios tocaban los mios. Instintivamente la abracé y me separé de sus labios. <<Demonios ¿Que tiene esta chica?>> Ella me abrazó mas fuerte y despues de un momento me dio un beso en la mejilla y se alejó.
<<¿Por que el final debia ser así?>>
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Liston Rojo
RomanceJulian es un chico solitario que decide emprender un viaje en la legendaria supersticion del liston rojo que, atado a tu muñeca rige tu vida. En su primer dia de clases conoce a Valery, la amante perfecta y a Keidy, la chica que invoca su lado roman...