El increíble sonido del bajo comenzo a sonar a mis espaldas, cerré mis ojos una vez más, no para imaginar que estaba solo, sino para imaginarla a ella, mi corazón latió al ritmo del instrumento y comencé a cantar Whatever de la zoe.
El sensual y dulce sonido de la melodía hacía a mi cuerpo estallar en electricidad.
Me sentí libre como en los viejos tiempos.
***
Después de una semana de estar a su lado las cosas tomaron su lugar, más personas de las que podía contar me detestaban, pero no importaba, tenía a la única persona que me interesaba en el mundo a mi lado, Gabbe no había aparecido en la escuela, había prometido hacerlo ese día.
Lo hizo, llegó con el cabello de un color distinto, ahora era un rojo llamativo.
-No vinieste- reclamó Sophia tomada de mi mano.
-Tuve algunos problemas- dijo Gabbe sin decir más.
Entramos al salón de clases detrás de ella y Sophia subió a la tarima del salón, quedando a mi altura. La besé sin miedo, sin importar lo que pasara.
Cuando abrí mis ojos y me despegue de ella Gabbe estaba a nuestro lado con ojos de impresión y alegría. <<una mirada que nunca había visto en su rostro>>
-Olvidamos decirtelo- repliqué sonriente.
-Se ven hermosos ustedes dos juntos- dijo sonriendo a la más que podía.
Me puse rojo y Sophia se rió entre dientes.
Los días desde ese momento eran extraños, a pesar de que eramos pareja nunca alejamos a Enzo o a Gabbe. Al contrario, estuvimos más unidos que nunca.
***
De regreso al departamento recordé mi triste realidad sobre Valery, seguía viviendo conmigo y tenía que hacer algo al respecto.
Con las manos sudorosas abrí la puerta y la encontré sobre el sillon nuevamente, con un Short que se le había hecho hábito ponerse.
-Hola- dijo ella despreocupada.
-Tenemos que hablar Valery- dice cerrando la puerta y lanzando mis llaves al sofá.
-Contando con que nunca me dices mi nombre, supongo que es algo importante.
Cambió de su despreocupada postura semiacostada a poner sus converse negros y sucios por fin en el suelo.
Me senté a su lado y ella me miró.
-creo que esto que estamos haciendo ya no es sano.
-¿Qué no es sano? ¿Platicar?- preguntó sarcásticamente con una sonrisa amplia en el rostro.
-Me refiero a... tengo pareja- lo solté de pronto.
Sus rasgos se endurecieron pesar de que quiso ocultarlo.
-¿En serio? Felicidades.
-Creo que no podemos seguir viviendo juntos...
-Lo supuse, no importa regresaré con mi madre, de todos modos el departamento pronto te lo iban a quitar, así que previne todo.
-Gracias por entender- dije fingiendo que no me daba cuenta de lo mal que se sentía, pero sabía que si preguntaba o hacia el más mínimo intento de ampliar esa charla terminaría cediendo con ella. Preferí callar.Después de vestirme formalmente para asistir a la oficina para terminar los pendientes antes de dejar de ir. Me metí en un taxi y le pedí que me llevara al corporativo.
Keidy estaba en la oficina con uno de sus vestidos negros, cortos pero tremenda mente elegante.
-Julián que bueno que te veo- sonrió y sus hoyuelos se marcaron.
-¿Qué pasa?- pregunté.
-Con lo del arresto de tu padre, y con tu nueva relacion-<<¿como diablos se enteró?>>-. Creo que ya no es necesario que lleve esto puesto.
Se quitó el anillo de compromiso y me lo tendió en la mano. A pesar de no querer nada con ella, sentí un extraño dolor en el pecho.
-Te dije que podrías quedartelo- le comenté en voz baja.
-Fue una ilusión hermosa, Julián, pero solo eso, prefiero olvidar todo esto porque es un tanto incómodo.
-Lo entiendo- dije en el mismo tono de voz.
La tomé de la nuca y le di un beso en la frente que El aceptó tomándome del brazo.
Sin duda ese había sido el día más difícil de mi vida entera, pero también el que confirmaba que todo comenzaba a estabilizarse, todo se acomodaba en un orden específico que debían llevar en mi vida.
Keidy era una amiga, no debía estar a mi lado como una pareja o algo más... Sophia era el amor más puro que había sentido y Valery no tenía un lugar definido, era rebelde incluso de manera hipotética en mi vida.
¿Sería que este era el final feliz que tanto esperaba?
Será? ...
***
Gracias por haber leído mi historia, es la primera historia que he terminado, espero que les haya gustado...Mentira... ahora falta lo mejor
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Liston Rojo
RomanceJulian es un chico solitario que decide emprender un viaje en la legendaria supersticion del liston rojo que, atado a tu muñeca rige tu vida. En su primer dia de clases conoce a Valery, la amante perfecta y a Keidy, la chica que invoca su lado roman...