Descanso

16 2 0
                                    

Comenzó la hora de descanso y me dejé guiar por Gabbe y su ridícula amiga. Iban hablando sobre algo a lo que no prestaba atención, hasta que llegamos a una cafetería casi vacía que estaba justo al centro del plantel y nos sentamos en la mesa más alejada que había.

-¿En dónde demonios está Miles?- preguntó Gabbe.

-Con su adorada Alexa- dijo Sophia sin despegar los ojos de su tablet.

-El es el que pone interesante los juegos.

-¿De qué estamos hablando?- pregunté un poco confundido.

-Oh, el verdad o reto, para conocerte y que nos conozcas, suena interesante ¿No crees?

-Ay mira- se interpuso Sophia en la charla y puso un vídeo en su aparato.- Es genial ¿No?

Reconocí de inmediato la canción, era King for a day de Pierce the Veil. Abrí los ojos como platos cuando recordé su expresión al referirse al grupo.

-¿Te gusta ese grupo?- le pregunté directamente a Sophia, algo que no había hecho en todo el día.

-¿A quién no?- soltó una de sus mini-carcajadas entre dientes tan molestas de siempre.

-Es el mejor grupo post-hardcore de la década...- agregó Gabbe.

-Incluso atrae a los possers como Shelvy- Sophia puso los ojos en blanco mientras lo decía.

-Un momento. Perdona mi ignorancia pero ¿qué significa Posser?

-El que hace todo por moda y no porque realmente le guste- intervino Gabbe.

-Ya comenzaron a molestar al nuevo con sus cuentos sobre "Shelvy Senos hermosos"- dijo un chico a mi espalda, usaba lentes y unos Jeans ligeramente acampanados, converse y el cabello igual de largo que yo.

-Yei, ya estamos todos juntos- dijo sarcásticamente Gabbe.

-No jodas Gabbe- contestó Enzo.

-Vuelve a decir eso y te pateo el trasero- le sonrió.

-Mientras ustedes se pelean yo iré por algo de tomar- dije mientras me levantaba de la mesa.

Eran muy extraños, eran diferentes al resto de todos los chicos que veía a mi alrededor, no eran tan superficiales.

-Yo te acompaño- dijo Gabbe y se levantó conmigo.

Caminamos hasta la corta fila, en donde comprobé que la mayoría de ellos eran gente superficial y con un cerebro menos desarrollado que el mio.

Miré la mesa y vi que un tipo alto y un poco rechoncho se sentaba al lado de Sophia y comenzaba a hablar con ella mientras Enzo se daba la vuelta y tomaba de la lata de jugo que tenía en la mano.

-¿Quién es el?- le pregunté a Gabbe.

-Oh, él es Sergio, está pretendiendo a Sophia desde primer semestre, pero Sophia solo parece darle el avión.

-¿A qué te refieres?- pregunté.

-Cuando el le dice algo "lindo"- hizo comillas con los dedos.- ella solo se ríe como estúpida.

<<Como de costumbre>> pensé por un momento.

-No es precisamente el tipo de persona con el que solemos juntarnos, a decir verdad es demasiado molesto pero siempre se acerca para platicar con ella- se encogió de hombros.

-¿Es triste?- alcé una ceja.

-Demasiado.

Me atendieron y regresé a la mesa en donde ya no estaba el pretendiente de Sophia.

Era un chico que hasta desde un helicóptero se le notaría lo alzado que era, por su risa estruendosa y sus gestos despreocupados y altaneros.

Me desesperaba y aun no le dirigía la palabra.

-Comencemos el verdad o reto ¿si?- dijo Sophia con una sonrisa que mostraba unos dientes sorprendente mente alineados.

-Esta bien, dinos ¿Sigues siendo virgen después de lo del verano pasado?- preguntó Gabbe.

-Si- contestó Sophia riéndose.

-No te creo- dijo Enzo.

<<Como demonios no le van a creer algo así a esa chica tan boba>>Pensé mientras tomaba un sorbo de mi jugo.

-A lo más que llegué fue a tocarle el miembro- se rió más fuerte.

Al escuchar esas palabras me ahogué con el jugo y comencé a toser y a escupir jugo hasta por la nariz.

-¿Qué pasa?- preguntó Gabbe.

-No, nada- dije mientras pensaba <<Esta chica no es para nada lo que aparenta>>

-Bien y tú Julián ¿Virgen?- preguntó Sophia sonriendo como siempre.

-Ammm, si, si lo soy- mentí recordando por un momento cada beso que le dí a Valery, cada fantasía cumplida con ella en su cuarto.

Gabbe me observó dudando de mi respuesta y se dio la vuelta para ver a Enzo.

-A ti no te pregunto nada, sabemos que eres más virgen que el aceite de oliva- por fin vi a Gabbe reirse y Sophia siguiéndola.

Yo también capté el chiste y me reí. El único que permaneció serio fue Enzo.

-Eso no es gracioso Gabbe, sabes que tengo más experiencias que tú.

-Demonios eso es cierto. Ves Julián, te dije que no era lo que aparenta.

-Soy un maldito rey.

-Oh claro, se te nota desde lejos- reí.

Estaba riendo, no podía creer que sonreía y dejaba atrás el dramatismo que había dominado mi miserable vida.
***
Holaaa!!!
Estoy escribiendo un nuevo libro, totalmente distinto a este, es un tanto de suspenso pero espero que lo lean, escribiré unos cuantos capítulos por adelantado para poder alternar capítulos con esta historia.

Liston RojoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora