
Sinopsis: - Grogu está emocionado porque las primeras fresas de la temporada están maduras. Estás emocionada de que tu mandaloriano esté en casa por unas semanas.
Número de palabras: -3800
Advertencias:- +18 Sexo PIV sin protección, relación establecida, comida y sexo, juego con semen, juego con pezones, dedos, chorros, pdoa, fantasías, malas palabras, se quita el casco. Una pequeña cantidad de violencia y preocupación, pero nada importante ni que lastime a ningún personaje.
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Tu pequeña cabaña en las afueras del pueblo es perfecta. Todavía eres parte de la comunidad pero estás escondida. Hace que sea más fácil para tu compañero ir y venir y para que los aldeanos no hagan preguntas. Les rascas la espalda y ellos te rascan la tuya. No estaban contentos cuando tu clan llegó para establecerse, pero 48 horas después ya no eran extraños recibidos con una sonrisa amistosa cuando se dieron cuenta de que tener un mandaloriano viviendo en sus afueras en realidad los mantendría a salvo. Como hija de un exsenador, antes de la caída del imperio, tienes una manera de lograr que la gente haga lo que quieres y no pasó mucho tiempo antes de que la pequeña cabaña que encontraste se transformara para que viviera tu clan.
Es principios de verano y tienes un pequeño huerto de frutas y verduras. Todos los niños se sorprenden una vez cada 10 días cuando les traes frutas y verduras frescas a la ciudad. Ellos cultivan los suyos propios, pero hay algo en el suelo un poco más lejos que es más nutritivo que el de ellos. Probablemente no se haya cultivado durante los últimos cien años y tampoco se vea afectado por el pantano. Tu cara se ilumina una mañana mientras desayunas y ves una gema roja.
“Grogu…”
“¿PATU?” Él responde y le frotas la cabeza y lo levantas hasta el alféizar de la ventana.
"Mira, fresas", hace un gorgoteo emocionado y automáticamente extiende la mano para usar la fuerza y conseguir algo de comer. Rápidamente agarras su muñeca y la bajas.
“No, no, no, Grogu” te mira con ojos tristes. “Primero debemos comprobar que están maduros y luego podemos ir a recoger algunas. ¿Puedo prepararte mermelada de fresa o leche?" Él rebota y arrulla. "Buen chico, déjame vestirme adecuadamente y luego podremos ir a mirar"
Resulta que solo 2 estaban maduras ese día, pero sabías que el resto no tardaría mucho, así que tú y Grogu se comieron las dos que eligieron. Sus labios se volvieron de un rojo brillante después, deseando desesperadamente otro.
"Mantengamos esto entre nosotros, Grogu, no queremos que papá piense que se lo perdió..."
“¿Qué me perdí?” Viene la voz modulada detrás de ti y saltas. Él se ríe suavemente cuando ve el estado de Grogu. "Ahhh, no podía esperar eh"
“Sólo eran dos”
"Está bien, puedo arreglármelas, pero la próxima vez conseguiré la mejor fresa" Grogu resopla entendiendo la palabra de Din y se ve triste, luego también mira hacia otro lado mientras lo abrazas y besas su casco.
"Te extrañé"
“También te extrañé, pero estaré en casa durante las próximas semanas, así que…” y el clic debajo del casco resuena en la habitación. Automáticamente cerraste los ojos como solías hacerlo antes de jurarle lealtad. Su pulgar enguantado frota tu mejilla. "Está bien, recuerda que ahora puedes verme" y cuando abres los ojos, automáticamente miras fijamente esos grandes ojos marrones, todavía sientes mariposas cada vez que miras su rostro, él realmente no tiene idea de lo guapo que es. Pero te aseguras de hacérselo saber mientras tus labios abrazan los suyos. Él gime por una vez, no tú. "Hmm, esa fresa sabe bien, casi tan bien como tú", luego se ríe y te das la vuelta todavía abrazándolo a él y a su beskar y ves que Grogu tiene las manos sobre los ojos. No estás segura de si no quiere ver la cara de su padre o ustedes dos abrazados. Ambos sospechan lo último.
