Luv Is A Maze ೃ Kookmin au

ೃ Cap 17࿐

Al cabo de unos minutos, y tras voltear a verlo, noté que se había quedado dormido profundamente. Sé que estaba mal todo lo que estaba haciendo, sé que no tenía derecho de interferir, de llevármelo sin consultarle ni nada de todo lo que hice, lo sé, pero moralmente no estaba bien que él por necesidad tuviese que entregarse así a alguien, más aún luego de haber visto que no se sentía cómodo con la situacion y que seguramente algo lo estaba impulsando a hacerlo. Observé su rostro tan delicado, con un corte en su labio, que recordaba perfectamente que no tenía la última vez que nos habíamos visto. Otro flagelo más, otra abominación contra la persona más bella que había conocido jamás.

Me levanté con mucho cuidado intentando hacer el menor ruido posible, para buscar mi billetera, sin que él lo notara y con mucha delicadeza, dejé dinero en el bolsillo de su pantalón. Para luego volver a la cama, y recostarme en la posición en la que estaba anteriormente, sin tocarlo, sólo de lado, apoyando mi cabeza en mis brazos, sólo para poder mirarlo en detalle, sin perderme un suspiro suyo. Y no voy a negarlo, se sentía todo tan extraño, teniendo en cuenta que jamás había compartido la cama con otro hombre, y menos aún que estuviese grabando en mi memoria cada detalle suyo simplemente porque no podía concebir que alguien fuese así de bello.

Lo miré, lo disfruté, y comencé a perderme más y más en su perfección, hasta que comencé a sentir los parpados que me pesaban, y sin darme cuenta, también de un momento a otro, me quedé profundamente dormido.

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Me giré en la cama, de repente, sintiendo unos fuertes brazos que me rodeaban desde la cintura, y me envolvían por completo regalándome un cálido abrazo que necesitaba hacía mucho, sumado a ese perfume que me enloqueció desde el momento cero en que lo percibí. Aún en el estado de somnolencia en el que me encontraba, más la comodidad que estaba experimentando luego de tantos días sin haber podido dormir bien, simplemente me dejé llevar, y me acerqué más a él. Y aunque estaba dormido, sabía perfectamente que quien me estaba abrazando era nada más ni nada menos que Jungkook... Y porqué? La verdad que ni idea porque lo hacía, quizás simplemente también se había quedado dormido y lo hizo inconscientemente. Y sé que mi salud mental iba a lamentarse luego, pero quería aprovechar y disfrutar ese mínimo momento de contacto con ese hombre, que era el más hermoso que había conocido por lejos.

Me acerqué más a él, e instintivamente, recibí como respuesta un abrazo mucho más fuerte, uno que casi me quitaba el aire, que en estos momentos no necesitaba para nada, porque solo quería estar en sus brazos.

Estábamos frente a frente, y creo que jamás había estado con nadie que no fuese una pareja, de una manera tan cercana y tan íntima. Y sé que no estaba bien, porque ver su anillo en su dedo me perturbaba la mente, pero no me podía negar a este regalo que estaba recibiendo.

Lo miré un poco mientras dormía, con su perfecta piel, producto claramente de un estilo de vida saludable sin dudas. Sus labios finos pero formados, su nariz con su puntita un poco redondita pero aún así respingada, sus cejas un poco pobladas pero no tanto, su pequeña cicatriz en el pómulo, todo su yo completo.

Y esta era una pésima señal, porque lo sabía, en mis adentros sabía perfectamente que ya había caído terriblemente por él, y que aunque no quisiera, me estaba enamorando de él aún más, porque sí, este hombre me tenía loco desde hace años, desde esa primera vez que lo vi, que bastó para jamás poder sacármelo de la cabeza.

Me escondí en su cuello para no verlo creyendo que iba a ser menos dañino, pero era imposible batallar contra eso, porque estando justo en ese lugar, su perfume invadía todos mis sentidos, el aroma fresco de su piel que opacada cualquier fragancia artificial que pudiese existir, convirtiéndolo en el peor remedio ante esta adiccion de necesitar verlo. Y para que no hacerlo? Así que preso de lo que sentía, llevé mi rostro frente al suyo nuevamente, mirándolo. Hasta que...