Luv Is A Maze ೃ Kookmin au

ೃ Cap 26࿐

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Detente me dijo... y se me estremeció el corazón completo. La cagué. Seguro me excedí. Seguro no se sintió cómodo. Seguro fuí demasiado rápido y lo abrumé. No quería ni mirarlo. Quería que me tragara la tierra, porque de seguro mi efusividad y desesperación fue demasiada para él, y lo apabullé o lo espanté... porqué... como podría olvidar que con él no podía hacerlo? Qué me hacía pensar que íbamos a hacer algo más?

Con bastante miedo y sin querer preguntarle, me detuve, lo miré y aún así lo hice.

- Pasa algo? - Le dije. Temiendo su respuesta. Ya estaba preparándome mentalmente para su rechazo, o para que me dijera que le impresionó sentir mi erección, o cualquier cosa heterosexual que podría cruzársele en estos momentos.

Pero él se veía preocupado... dudando. Sí. Me excedí. Sin dudas. Lo sé. Olvidé el enorme detalle de que le gustan las mujeres, y me dejé llevar creyendo por un momento que podría satisfacerlo como si fuese una...

- Jimin yo... - Me decía, pero no terminaba de hablar y a este paso ya me estaba desmoralizando. Lo observé con miedo, esperando a que hablara. - Jimin... yo jamás... estuve con un hombre... Yo... - Titubeaba constantemente. - Yo no sé como hacerlo... perdón.

Qué pensabas Park Jimin? Qué esto no iba a llegar acaso? Que no iba a pasar? Era obvio.

Sin decir nada, atiné a bajarme de encima suyo, porque sólo quería ver como salía de este momento tan bochornoso.

Pero para mi sorpresa él me detuvo. Y abrazándome desde la espalda me llevó hacia él, para no cortar el contacto visual ni crear distancia entre nuestros cuerpos.

- No no... no te vayas por favor.

Y sólo lo miré. Hombre hermoso, hecho un desastre después de haberlo hecho gemir tanto con cada succión y atención que le di, con sus ojitos grandes, bañados en excitación. Su carita perfecta y su cuerpo un infierno al que quería que me condenasen para arder por la eternidad.

- Jimin... Yo... no sé como hacerlo...
- Entiendo. - Le dije un poco cabizbajo. Porque llegar hasta este punto fue más de lo que esperaba de él en verdad.
- Escúchame. - Me dijo tomándome del mentón para que lo mirase. - Si quieres... puedes... decirme? Porque de verdad quiero hacerlo.
- Estás seguro? - Le pregunté casi con una sonrisa en los labios, porque más allá de todo, me estaba llenando de ternura su ingenuidad.
- Si Jimin. De verdad quiero que lo hagamos. Pero no sé como. Si quieres...

Y todo lo que dices puede ser usado en tu contra. Así que eso mismo iba a hacer yo en estos momentos. Recliné un poco el asiento para que estuviese más cerca de mí y frente a frente, sentado en su regazo, le pedí.

- Dame un motivo para hacerlo.

Pero sin dudar un instante me contestó.

- Porque mi cuerpo está loco por tí... desea cada parte del tuyo... completo.

Suficiente para comenzar a besarlo con desespero y frotarme sobre él, despertando más y más la ansiedad que ya traía. Mientras sus manos volvieron a meterse por debajo de mi ropa, y a tocarme con la desesperación que lo caracterizaba, así como yo a él también.