࿐ Flashback ೃ

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10 años atrás...

- Jeon. Vamos. No pasa nada.
- No estoy seguro. Además, mañana tenemos entrenamiento, si nos desvelamos...
- Casi que a diario lo hacemos no?
- Lo sé pero...
- Vamos!

Tomé su mano para adentrarlo a esa fiesta a la que nos habían invitado y que Jungkook se negaba a ir. Pero luego de insistirle un largo rato, decidió acompañarme creyéndose la excusa que le dí, que al estar fuera de Corea no era seguro para mí, ya que sabía que iba a recibir una negativa de su parte y que si nuestro Maestro se enteraba, iba a castigarnos con algunas de sus meditaciones excesivas, pero qué más daba? Somos jóvenes no?

Obviamente Namjoon decidió no acompañarnos, ya que no quería ser cómplice de nada, el mismo lamebotas de siempre, así como lo hubiese hecho Jungkook también, pero su espíritu altruista no permitía dejar que algún amigo suyo estuviese solo. Es por eso que sin más, ya estábamos sentados en uno de los tantos sillones que en esa casa habían.

Es un hecho que no tendríamos que estar aquí con tan solo 16 años, pero qué más daba?

Era definitivamente un mérito de mi parte haber logrado que Jungkook me acompañase, teniendo en cuenta que sus padres detestaban que estuviese conmigo, por esos estúpidos rumores que llegaron a sus oídos, y si... como su hijo iba a estar cerca de alguien que al parecer era un maldito homosexual? Y es que ni siquiera lo sabía aún, pero aún así, ellos me querían lejos de su hijo, temiendo fuera a contagiarle alguna especie de enfermedad que convierta a su hijo menor, y terminase por el mismo camino que aquel hijo mayor que nunca quisieron aceptar. Porque si de dramas familiares se trataba, los Jeon eran los que llevaban la delantera si tuviesen que escribir una novela llena de drama. Aunque por suerte, a Jungkook parecía no importarle, ya que valoraba que nos conocíamos desde pequeños, y nuestra amistad era lo más importante para él.

Una vez en la fiesta y desde que habíamos llegado, una muchacha de nuestra misma edad aparentemente, se le había pegado a Jungkook desde el primer momento en que lo vio, y que era una molestia? Por supuesto, pero que podría hacer yo? Él no era coqueto en cuanto a mujeres se trataban, se le pegaban y ya, y era obvio, en nuestro grupo quien primero llamaba la atención del bando contrario, era Jeon. Quizás por su actitud y rectitud, o por ser el mejor Taekwondoka que conocí además de mi Maestro, quizás por su dinero o apellido, o simplemente, por lo terriblemente atractivo que era.

Y ya a estas alturas de la noche, me costaba articular cualquier tipo de palabras, porque era un hecho que no estaba acostumbrado a beber, pero en cierta forma, necesitaba tapar eso que me estaba perturbando tanto y no me estaba dejando dormir.

- No te cansas de ser una perra regalada? - Le dije sin cuidado a aquella chica que junto a Jeon estaba.

Él sorprendido me miró sin entender que pasaba. Así como ella también. Pero a mi no me interesaba nada, yo necesitaba sacar lo que tenía adentro. Esa molestia que me comía el interior.

Seguí tomando de las bebidas que estaban en la mesa, sin siquiera saber como manejarlo. Aunque repentinamente comencé a ver doble... era verdad eso que decían de los efectos del alcohol en la gente, porque ciertamente todo se me daba vueltas.

De un momento a otro me levanté de la mesa, sin siquiera poder coordinar, buscando un poco de agua. Pero tras de mí, sentí su voz, la voz de Jungkook quien preocupado vino hasta mí.

- Taeoh, estás bien?
- No... no lo sé. Tengo muchas náuseas.
- Te dije que no debíamos venir. Mira todo el alcohol que tomaste.
- Ya deja de regañarme.
- Vamos a buscar un baño. Ven.

Luv Is A Maze ೃ Kookmin auDonde viven las historias. Descúbrelo ahora