Luv Is A Maze ೃ Kookmin au

ೃ Cap 43࿐

Al salir de ducharnos, ya mucho más relajados, y yo siendo más meloso que nunca, fuimos hasta el salón principal para buscar ropa.

Yo contaba con una muda extra preparada así que simplemente fui a sacarla de mi bolso. Comenzamos a cambiarnos, en silencio.

Me paré frente al espejo que estaba cerca del cuadrilátero mientras me abrochaba la camisa, pero antes de hacerlo revisé las heridas en mis costillas, viendo un poco también mi labio roto, y el golpe en la zona de la mejilla.

Pero sin notarlo, Jimin estaba detrás mío observándome hacerlo. Me tocó nuevamente el hematoma, y me miró frunciendo un poco el ceño, mientras me ayudaba a abrocharme la camisa.

- Mmmm... no te golpeaste. Te golpearon. Te peleaste.

Me quedé callado observándolo.

- Con quién peleaste?
- Con nadie.
- Pues parece que nadie te dio demasiado duro.
- Pero yo lo dejé peor. - Le dije molesto, sintiendo mi orgullo herido.
- Entonces si te peleaste. - Miré hacia un lado molesto. - Con quién peleaste?
- Con nadie.
- Con Kang no?

Lo miré, y no iba a negar que el sólo hecho de escuchar su nombre salir de sus labios me volvía loco a niveles impensados.

- Debes dejar de pelear con él. - Me dijo cerrando el último botón de mi camisa. - No tiene sentido que te lastimes.
- No soy tan débil. No es que vaya a pelear con él y sólo yo salga lastimado.
- Pero que sentido tiene siquiera que te lastimes aunque sea un poco? - Desabrochó los últimos dos botones que había abrochado anteriormente. - Así se ve más sexy. - Dijo. Me sonrió. Y se volteó a buscar su bolso.

Me sonreí solo, y me senté en el borde del cuadrilátero observándolo, guardar sus cosas.

- Jimin.
- Mmmm? - Me contestó mientras cerraba su bolso.
- Comemos algo?
- Comer?
- Vamos a comer algo. Quieres?
- Pero...
- Hey... vamos. - Le dije tirando de su brazo para traerlo hacia mí. - Debes tener hambre después de tanto sexo, y yo estoy que me muero de hambre también. Namjoon no está aquí, así que puedes acompañarme y ser mi cómplice para burlar su dieta, e ir a comer Tteokbokki y Soju a algún puesto callejero, que te parece?
- Porque lo haces tan tentador?
- Para que no puedas resistirte.
- Está bien. - Me dijo con algo de duda.

Le sonreí, lo abracé y nos quedamos besándonos un largo rato. Hasta que pudimos despegarnos y fuimos hasta el auto.

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- El problema es que de pequeño nunca me dejaban comer estas cosas. Imagínate, comida callejera llena de calorías.
- Es deliciosa. Yo no sé como haces para comer siempre tan sano. A veces Namjoon me ofrece desayunos que le acepto, pero creo que voy a morir por lo saludable que son.

Me reí ante su comentario.

- Y aún así tienes un cuerpo exquisito.
- Genética.
- Genética?
- Supongo. Aunque como no conocí a mis padres ni idea, pero se lo agradezco a alguno de ellos. Supongo.

Me dijo dándole un sorbo a su botella de Soju, mientras intentaba batallar con el hilo de queso de su Tteokbokki. Se lo saque del labio, y me lo llevé a la boca. Me miró con picardía.

- Deja de ser tan pervertido en público.
- Y te encanta.
- Si. Aunque siento que todo lo que te digo vas a usarlo en mi contra.
- Dalo por hecho.