Ecos del Pasado, Destinos Futuros - Satoru Gojo x Tú

Capítulo 50: Sombras de San Valentín

Se acercaba el 14 de febrero y esta vez Satoru estaba decidido a no arruinarlo. Estaba emocionado por recibir chocolates de Akari. Aunque una parte de él temía que no le regalara nada. El último San Valentín que estuvo con ella, se había portado como un idiota cuando eran niños. Aunque ya se habían reconciliado, temía que ese día se reabriera la herida otra vez.

Satoru estaba en su habitación, en pijama, paseando de un lado para el otro, pensando en cómo podría compensarle ese día a Akari. Pensó por un buen rato hasta que se le ocurrió una buena idea: apreciar juntos las flores de temporada. El Festival de la Ciruela de Bunkyo en Yushima Tenjin es uno de los mejores eventos florales de Tokio y normalmente se celebra desde principios de febrero hasta principios de marzo. Se lleva a cabo en el hermoso templo del mismo nombre. Era un plan perfecto.

Satoru se detuvo en seco y sonrió para sí mismo. "Sí, eso le encantará," murmuró, sintiendo una oleada de alivio y emoción. Se dirigió hacia su escritorio y comenzó a buscar información sobre el festival, tomando nota de los horarios y los eventos especiales que se llevarían a cabo.

El Yushima Tenjin, con sus hermosos jardines y árboles de ciruela en flor, sería el lugar ideal para un día romántico. Imaginó a Akari caminando entre los árboles en flor, su sonrisa iluminada por los pétalos rosados y blancos que caían suavemente. La imagen le llenó de calidez y determinación para hacer de este San Valentín un día inolvidable.

Satoru deslizó la puerta de la habitación de Akari sin tocar, la mañana del 14 de febrero. Entró con entusiasmo, vestido con una camisa azul, una playera de manga larga debajo y unos pantalones de vestir que se veían sorprendentemente bien con sus tenis converse negros. Llevaba puestos sus lentes rectangulares de sol que ella le había regalado en su cumpleaños y portaba su anillo en su dedo anular como siempre.

"¡¡Akari!! ¡¡Feliz día de San Valentín, mi vida!!" exclamó mientras revelaba un enorme arreglo floral. El arreglo era una explosión de colores y fragancias, con rosas rojas y blancas, lirios amarillos y naranjas, tulipanes rosados, y pequeños ramilletes de flores silvestres azules. En el centro, un lazo de seda dorado mantenía todo unido de manera elegante.

En el arreglo venía una nota que decía: "Perdón por haber sido un imbécil hace 10 años."

Akari, todavía medio dormida, se despertó de golpe al escuchar el grito entusiasta de Satoru. Se sentó rápidamente en la cama, su cabello desordenado y los ojos medio cerrados, tratando de procesar lo que estaba sucediendo.

"¡¿Qué?! ¡¿Qué está pasando?!" exclamó, parpadeando repetidamente para despejarse.

Satoru se acercó a ella con una gran sonrisa, sosteniendo el arreglo floral frente a su cara. "¡Feliz San Valentín, Akari!"

Akari miró el arreglo floral con ojos aún llenos de sueño y confusión. "¿Qué... qué es esto?" preguntó, tomando la nota y leyéndola en voz alta. "Perdón por haber sido un imbécil hace 10 años."

Satoru se rió, rascándose la parte posterior de la cabeza. "Bueno, quería empezar el día con una disculpa sincera. Sabes, por aquel San Valentín desastroso de cuando éramos niños."

Akari lo miró, parpadeando lentamente mientras procesaba sus palabras. Luego, una sonrisa perezosa se formó en sus labios. "¿Realmente te levantaste tan temprano solo para traerme flores y disculparte por lo que pasó hace una década?"

"Absolutamente," respondió Satoru con una sonrisa. "Quería asegurarme de que este San Valentín sea perfecto."

Akari rió suavemente, dejando escapar un suspiro de resignación divertida. "Eres genial, Satoru. Las flores son preciosas."