Capítulo 81: Celebración

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El sol brillaba intensamente sobre la amplia terraza donde Elena y Alexia habían decidido organizar la gran celebración. Después de todo lo que habían pasado, sentían que era el momento perfecto para reunir a todos sus seres queridos y marcar un nuevo comienzo en sus vidas.

La terraza estaba decorada con luces de colores, flores frescas y globos, creando un ambiente festivo y alegre. Una gran mesa central estaba repleta de deliciosos platillos y bebidas, mientras que en un rincón había un pequeño escenario preparado para los discursos y algunas actuaciones musicales.

Desde temprano en la mañana, Elena y Alexia habían estado trabajando juntas para asegurarse de que todo estuviera perfecto. Isabella, con su vestido blanco y su sonrisa radiante, corría de un lado a otro, emocionada por la llegada de los invitados.

"¡Mamás, mamás!" exclamó Isabella, tirando del vestido de Elena. "¿Buelos?"

"Pronto, mi amor," respondió Elena, inclinándose para besar la frente de su hija. "Están en camino."

Alexia, mientras tanto, estaba terminando de arreglar las flores en la mesa principal. "Todo se ve maravilloso," dijo, sonriendo a Elena. "Hoy va a ser un día muy especial."

El primero en llegar fue Eli, seguido de Alba. Ambas estaban radiantes y emocionadas por la celebración. "¡Esto se ve increíble!" exclamó Eli, abrazando a Elena y Alexia. "No puedo esperar a ver a todos."

Poco a poco, los demás invitados comenzaron a llegar. La familia de Alexia, incluyendo la madre y hermana, entraron con amplias sonrisas y brazos abiertos. La familia de Elena no se quedó atrás, y sus padres, quienes habían comenzado a reconciliarse con ella, llegaron con lágrimas de alegría en los ojos.

"Estamos tan felices de estar aquí," dijo la madre de Elena, abrazándola con fuerza. "Hoy celebramos el amor y la familia."

Aunque la fiesta era una celebración para todos, no pasó mucho tiempo antes de que Isabella se convirtiera en el centro de atención. Con su energía inagotable y su risa contagiosa, la pequeña capturó el corazón de todos los presentes.

"¡Mira a Isabella!" dijo Alba, riendo mientras la pequeña corría alrededor de la terraza. "Es la más linda de todas."

Isabella, encantada con toda la atención, comenzó a mostrar sus pequeños trucos. Se subió al escenario improvisado y, en lugar de cantar, comenzó a bailar una canción que había aprendido en la guardería, haciendo que todos los invitados estallaran en aplausos y risas.

"¡Bravo, Isabella!" exclamó Eli, aplaudiendo con entusiasmo. "Eres una estrella."

Elena y Alexia observaban a su hija con orgullo y amor. "Es increíble cómo ilumina cualquier habitación," dijo Alexia, tomando la mano de Elena. "Ella es nuestra mayor alegría."

Después de que todos los invitados hubieran llegado y disfrutado de un delicioso almuerzo, llegó el momento de los discursos. Elena y Alexia se subieron al escenario, con Isabella entre ellas, para agradecer a todos por su apoyo y amor.

"Queremos agradecer a cada uno de ustedes por estar aquí hoy," comenzó Elena, mirando a la multitud. "Estos últimos años ha sido un desafío, pero también una bendición. No podríamos haberlo superado sin el apoyo de todos ustedes."

Alexia tomó el micrófono y añadió: "Hoy celebramos el amor, la familia y los nuevos comienzos. Gracias por ser parte de nuestra vida y por ayudarnos a crear estos hermosos recuerdos."

El discurso culminó con un brindis, y todos levantaron sus copas para celebrar el amor y la resiliencia de Elena y Alexia.

La tarde continuó con música, risas y baile. Isabella, quien ya había conquistado a todos los presentes, decidió que era el momento de mostrar más de sus pasos de baile. Subió al escenario una vez más, esta vez arrastrando a sus madres con ella.

"¡Mamá, mamá, baila!" dijo Isabella, tirando de la mano de Alexia.

Elena y Alexia no pudieron resistirse y se unieron a su hija en la pista de baile. Pronto, todos los invitados se unieron, creando un ambiente lleno de alegría y celebración. Los padres de Elena, quienes no habían bailado en años, también se unieron, riendo y disfrutando de cada momento.

"Es como un sueño," dijo la madre de Alexia, observando la escena con una sonrisa. "Ver a todos tan felices, especialmente después de todo lo que han pasado, es realmente conmovedor."

Para asegurarse de que este día especial fuera recordado para siempre, Elena y Alexia habían contratado a un fotógrafo profesional. Mientras la fiesta continuaba, el fotógrafo capturó momentos preciosos: Isabella riendo con sus abuelos, Eli y Alba compartiendo un abrazo, y Elena y Alexia bailando juntas bajo las luces de colores.

"Estas fotos serán tesoros para toda la vida," dijo Alexia, revisando algunas de las imágenes en la cámara del fotógrafo. "Quiero que Isabella crezca viendo cuánto amor la rodea."

Elena asintió, sus ojos llenos de emoción. "Cada momento aquí es un recordatorio de lo afortunadas que somos."

A medida que la tarde se convertía en noche, los invitados comenzaron a reunirse en pequeños grupos para conversar y reflexionar sobre el día. Elena y Alexia, con Isabella en brazos, se tomaron un momento para observar a sus seres queridos y reflexionar sobre todo lo que habían vivido.

"Hemos pasado por tanto," dijo Elena en voz baja. "Pero ver a todos aquí, felices y juntos, hace que todo valga la pena."

Alexia la abrazó, besando la frente de Isabella. "Somos una familia fuerte y unida. Nada puede cambiar eso."

Isabella, aunque cansada, seguía sonriendo. " amo, mamá," murmuró, abrazando a Alexia.

"Nosotras también te amamos, mi amor," respondió Alexia, sintiendo una profunda gratitud por la vida que habían construido juntas.

Para cerrar la celebración con broche de oro, Elena y Alexia habían planeado un espectáculo de fuegos artificiales. Todos los invitados se reunieron en la terraza, mirando hacia el cielo mientras las luces brillantes y coloridas iluminaban la noche.

"Es tan hermoso," dijo la madre de Elena, con lágrimas en los ojos. "Esto es realmente un nuevo comienzo."

Elena y Alexia, con Isabella entre ellas, miraron los fuegos artificiales con una mezcla de emoción y esperanza. Sabían que, aunque el futuro aún podía traer desafíos, estaban más fuertes y unidas que nunca.

Con el espectáculo de fuegos artificiales terminado y los invitados comenzando a despedirse, Elena y Alexia se tomaron un momento para agradecer a todos por venir. Abrazos, risas y promesas de futuras reuniones llenaron el aire mientras la terraza se vaciaba lentamente.

"Hoy ha sido perfecto," dijo Alexia, tomando la mano de Elena mientras observaban a Isabella, que finalmente se había quedado dormida en brazos de su abuela. "Nuestro amor, nuestra familia, todo es perfecto."

Elena asintió, sus ojos llenos de gratitud. "No podría haber imaginado un mejor día. Este es solo el comienzo de muchas celebraciones por venir."

Finalmente, cuando todos los invitados se habían ido y la terraza estaba en silencio, Elena y Alexia se quedaron juntas, disfrutando del momento de paz. Con Isabella dormida en su cuna, se abrazaron, reflexionando sobre el amor y la fortaleza que habían encontrado en su viaje.

"Te amo," dijo Elena, mirándola a los ojos. "Y estoy tan agradecida por cada momento que compartimos."

"Yo también te amo," respondió Alexia, besándola suavemente. "Hoy celebramos no solo nuestro amor, sino también nuestra resiliencia y el hermoso futuro que tenemos por delante."

Y así, con corazones llenos de amor y esperanza, Elena y Alexia cerraron un capítulo importante de sus vidas, listas para enfrentar cualquier cosa que el futuro les deparara, siempre juntas y más fuertes que nunca.

Ecos de Amor  - Alexia Putellas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora