Corazones en guerra (AlanxJeff)

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Alan

Había pasado una semana desde el baile. Nunca me había preocupado por leer las noticias más allá de si esperaba algo importante, pero teniendo en cuenta las miradas que había recibido últimamente, los comentarios de mi madre y el cada vez más creciente murmullo al pasar la curiosidad me venció.

¡Últimas noticias!

En un giro inesperado y emocionante, el príncipe heredero de Eldoria del Sur ha extendido una invitación sorprendente en el baile de clausura de las celebraciones del rey Pete: ¡al príncipe Jeff de Eldoria del Norte! Los dos príncipes se miraron con una calidez que dejó a todos boquiabiertos. Testigos cercanos comentaron sobre las dulces miradas que intercambiaron y señalaron que nunca antes se había visto al príncipe Alan con una expresión tan suave y serena.

No cabe duda de que el príncipe Jeff es de una belleza deslumbrante, pero ¿será que ha logrado derretir el corazón de nuestro príncipe heredero? Este encuentro ha desatado una ola de especulaciones sobre el futuro de ambos reinos, que han estado en conflicto desde tiempos inmemoriales. ¿Podría ser esta una historia de amor que finalmente ponga fin a la enemistad?

La opinión pública está dividida. Algunos se muestran escépticos y acusan a los príncipes de traición, mientras que otros albergan la esperanza de que este gesto marque el inicio de la tan anhelada paz. Sin duda, estaremos atentos a los próximos acontecimientos y seguiremos informando sobre esta emocionante historia.

Mientras avanzaba línea por línea de la sensacionalista noticia del periódico, no podía evitar fruncir cada vez más el ceño. "Nunca antes se había visto al príncipe Alan con una expresión tan suave y serena", repetí la frase en voz alta. ¿Qué se supone que quiere decir eso? Siempre soy calmado y sereno.

¿Qué miradas dulces intercambiamos? No cabe duda de que me las perdí, definitivamente no son las miradas que recuerdo.

¿Una belleza deslumbrante? Bueno... Siguiente.

Él... ¡él no ha derretido mi corazón! Pete, él sabía que esto pasaría.

¿Podría ser esta una historia de amor que finalmente ponga fin a la enemistad? Me quedé pensando unos segundos. ¿Marcar el inicio de la tan anhelada paz... sería posible?

Bueno, siempre supe que como príncipe heredero mi matrimonio probablemente sería meramente político. Especialmente si quiero fortalecer mi reino, ya demasiado frágil. El amor... nunca he pensado que vaya a entrar en la ecuación. Por supuesto, cuidaré de mi futura pareja, pero no esperaba nada como un cuento de hadas. Simplemente cumplir con mis obligaciones reales, y listo. Este matrimonio sería... sería algo así. Es político, no se necesita amor. Solo que nos toleremos lo suficiente y sepamos cómo actuar ante la sociedad. Cumplir con el deber de cada uno y ya.

Pero... supongo que allí es donde empiezan los problemas. Para empezar, no nos toleramos. Veo realmente difícil que simulemos amor. Ni siquiera puedo pensar cómo se supone que continuaremos el linaje. Temo que si siquiera lo rozo me pueda quemar, pero de lo frío que es. Ese chico es... es sumamente extraño. ¿Por qué rayos estaba en un árbol? ¿Una... una piedra? No lo entiendo, no hice nada malo. Yo solo... solo debí dar la media vuelta. Sí, eso debí haber hecho. Quizás si lo hubiera hecho no me odiaría tanto después... pero, solo no podía hacerlo. Todavía creo que volvería a ser entrometido. ¡Era peligroso!

Luego está el baile. Fue un completo desastre, aunque afortunadamente nadie lo notó. Perdí la cuenta de las veces que me pisó involuntariamente, creo que dejé de contarlas cuando empezó a hacerlo de forma voluntaria y con saña. Su aroma... ¿cómo alguien que huele así de bien se aplicaría otra cosa extraña? No puedo entenderlo. Me confundió hasta tal extremo que terminé preguntando lo que no debía y fui grosero. Pero, ¡me disculpé! ¡Lo hice! No tenía que insultarme. Con su forma sutil y elegante, pero no tenía que hacerlo.