Conflictos sentimentales

18 3 0
                                    

Miro el teléfono y suspiro ignorando de nuevo una llamada de Ginjo. Soy la peor persona del mundo. Tengo un novio que más de uno querría y aunque no es perfecto, era perfecto para mi hasta que ese idiota tuvo que meterse en medio y joderlo todo. Mierda. Después de momentos como los de anoche, no sé que pensar ni sentir. Odio a Grimmjow. Eso lo tengo clarísimo pero, a la vez, cuando se comporta como anoche, sé que algo en mi interior se despierta y me da miedo su intensidad. Además, lo que susurro ayer... Dios, no sé que pensar. Encima sé que Ginjo hoy querrá quedar y todavía siento el semen de Grimmjow pegándose a mis boxers. Es como si lo hiciera a propósito.

-Hola.- Cuando alzo la vista y veo a Mugetsu frente a mi lo miro sorprendido.

-Mugetsu... ¿qué haces por aquí?- Lo cierto es que no suele acercarse por la zona de la universidad.

-Te estaba buscando.- Veo sus ojos intensamente serios y eso solo significa una cosa.- He venido a hablarte de Kaien.

-No me apetece hablar de él.- Digo sintiendo cierto alivio. En realidad nunca hemos estado peleados entre los tres y saber que no estamos bien, tampoco me tenía demasiado tranquilo.

-Ichigo, sabes que sé cuando mientes ¿verdad?- No puedo evitar sonreir un poco cuando se sienta a mi lado.- ¿Aun no le has perdonado que te besara?

-Sabes que no fue solo eso.

-Ichigo, Kaien jamás haría nada para dañarte.- Dice serio mirando al frente.- Él te quiere de verdad. Somos familia. Se preocupa por ti como lo haría por mi.

-Lo sé pero, no solo fue lo del beso...

-¿Hablas de lo de Ginjo?- dice y cuando lo miro veo como su mirada me intimida. Mu no es como Kaien. Sin duda su seguridad es mucho mayor.

-No quiero hablar de ello.

-Que quieras pensar que algo no es cierto, no significa que no lo sea.

-Mugetsu, por favor.- Digo sintiéndome mal por momentos.

-Ichigo, puedes pensar lo que quieras. Puedes pensar que te decimos esto porque ese gilipollas no nos cae bien o puedes pensar que es porque Kaien te quiere más de lo que debería, y acertarías con las dos.- dice haciéndome abrir los ojos.- Ginjo te engaña. Es un cabrón y un hijo de puta que no solo te pone los cuernos con cuanto tio se le pone a tiro sino que encima, presume de ello.

-No es cierto.- Digo retirándole la mirada.

-Lo es. Ya te he dicho que aunque fuera un gilipollas al que odiara, si te hiciera feliz, lo dejaríamos pasar, pero no lo es. No te hace feliz.- Siento unas tremendas ganas de llorar y sé que es porque en el fondo, muy en el fondo, supongo que lo sabía. Sabía que Kaien no me mentía y que todas las señales que me negaba a ver, eran ciertas. Dios, me siento un completo idiota.- Y sobre el otro asunto...- Dice mirándose las manos y me extraña verlo arrugando el entrecejo.- También es cierto. Kaien te quiere. No como a un primo.- Dice mirándome y entonces lo noto. Su mirada ha cambiado. Es... como él. Como Kaien.

Antes de que pueda evitarlo, Mugetsu se acerca tomándome del cuello y me besa lentamente. 

Puedo sentir sus labios a la perfeccion contra los mios, como su lengua entra en mi boca, lamiéndolos y encontrando mi lengua. Su sabor y su calor me embargan haciéndome estremecer y entonces, recuerdo exactamente, como me sentí cuando nos besamos por primera vez. Oh, sí. Él fue mi primer beso. Emito un ligero jadeo por la nariz cuando el beso se torna más caliente, más intenso y cuando se separa y logro abrir los ojos, veo el brillo que tienen y sé que estoy totalmente excitado.

-Kaien te ama, Ichigo. No como primo, sino como hombre.- Siento su mano acariciar mi cara y puedo ver una ligera sonrisa e incluso algo de vergüenza o nerviosismo.- Y yo también te amo.- Cuando abro la boca para decir algo él me calla con un par de dedos.- No quiero que me digas nada. Aclarate con ese cabrón y con lo que sea que tengas con tu compañero de piso.- Mierda. ¿Tambien sabe lo de Grimmjow?¿Como?- Nosotros siempre estaremos para lo que necesites, Ichigo. Aunque no te podamos tener como deseamos. Pero no vuelvas a dudar de nosotros. Nunca te mentiríamos sobre un tema así de importante. Jamás te haríamos daño.

Apartamento CompartidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora