Apartamento Compartido

Amanecer Coyote

Termino de ducharme intentando no pensar en lo que sucedió anoche. Dios, ¿Cómo pudo soltarlo todo delante de Hyo? Pego mi frente a la fría pared intentando no llorar pero me es imposible. Yo... yo, es cierto que al principio me sentí atraído por Hyo porque era muy parecido a Grimmjow. Ese idiota me gustaba mucho y había sido el primero y único con el que había estado y eso, me hacía buscarlo más pero, en realidad, Hyo no se parece en nada a Grimmjow y me gusta realmente. Mierda. Grimmjow se lo dijo todo y Hyo... Hyo se fue dejándome allí, solo y con él. ¿Tan poco le importo?¿Tan poco que me dejó allí con su hermano?

Ento en la cocina viendo a mis hermanos sentados junto a mi padre y solo espero que no se den cuenta de que he estado llorando aunque en cuanto levantan la vista y me miran todos lo hacen de la misma forma. Por suerte, en nuestra familia no solemos meternos demasiado en la vida de los demás y ningúno me dice nada al respecto.

-¿Qué tal anoche?- Dice nuestro padre sin mirarnos.- Me han dicho que la fiesta universitaria fue un autentico desmadre.

-No fue para tanto.- Dice Mu nii mirándome de reojo.

-¿A que hora llegaste Tensa?

-Sobre las cuatro.

-Creo que le das demasiadas alas.- Dice Shunsui sacándome la lengua a la vez que me sonríe.

-Ya tiene dieciséis. Yo a esa edad fui padre.- Suelta mi padre haciéndome escupir. Shunsui no puede evitar reírse porque he salpicado casi toda la mesa y Mu simplemente niega con la cabeza.

-Yo no voy a seguir tus errores.- Le digo intentando limpiar algo del desastre.

-Más que nada porque te van los chicos.- Suelta mi padre dejándome algo paralizado.

-A... mis hermanos también les gustan...- Digo mirándolo con cierta cautela.

-No digo que este mal. Al contrario. Así evitaras las barrigas sorpresa.

-¿Eso es lo que fuimos?- Suelta Shunsui con falsa molestia.

-Tu si.- Le suelta haciéndome sonreir un poco.

-Eres un padre cruel.- Dice antes de levantarse.

-¿Qué vas a hacer?- le pregunta viendo como Shunsui se detiene antes de volverse sonriendo.

-¿Qué otra cosa? Dormir hasta que me toque ir a trabajar.

Cuando hemos recogido las cosas del desayuno, paso por el salón pero antes de poder escaparme para intentar hablar con Mugetsu mi padre me llama con su voz ronca y oscura.

-Tensa.- Me giro y lo miro desde la puerta y cuando sus ojos se fijan en los mios siento como si fuera capaz de ver a través mio.- ¿Estas bien?

-Si.

-Me pareció que tenías los ojos un poco rojos.

-Me entró jabón mientras me duchaba.

-Deberías tener más cuidado cuando te duches.

No dice nada más y yo no digo nada más pero sé que tampoco hace falta. Mi padre no es de los que se inmiscuyan demasiado en nuestras vidas pero es obvio que a pesar de su forma de ser distante, se preocupa por nosotros y eso, en cierta medida, me hace sentir mejor.

-Tensa.- La voz de Mugetsu no tarda en hacerme apartar la vista de la ventana de mi habitación.- ¿Qué te ha pasado?

-Nada. Ya he dicho que..

-Nadie se ha tragado lo del jabon.- Dice sentándose en mi cama.- ¿Ha pasado algo con Hyo?- En cuanto lo menciona siento como se me aguan los ojos pero intento no llorar. Soy un Coyote y en nuestra familia no se llora. Mu suspira por la nariz algo molesto.- ¿Qué ha pasado?¿Te ha hecho algo?- Esa ultima pregunta hasta me hace reir por como ha sonado y como estaba frunciendo el ceño.