Consecuencias y lamentaciones

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En cuanto escucho la puerta de cerrarse salto de la cama y salgo para encontrarme frente a frente con Jugram.

-Ichinose... ¿Qué haces levantado? Es muy...

-¿Tarde?- Digo sin poder contener el enfado que he acumulado.

Joder, Jugram no suele llegar temprano cuando va a trabajar al club pero nunca había llegado por la mañana y además, su aspecto es horrible. Puedo ver claramente como trae las ropas desarregladas, su cabello está mal recogido y no quiero ni pensar que es esa marca rojiza que tiene en el cuello.

-Iba a decir temprano.

-Será temprano para ti. Yo llevo toda la noche preocupado por ti. Creí que te había sucedido algo.

-¿A mi? Pero si sabías que estaba trabajando.

-¿Hasta las ocho de la mañana?- Esta vez golpeo la mesa con mi puño mientras arrugo la frente con una mezcla de frustración, cabreo y preocupación latente.

-El Club ha cerrado más tarde. Había una fiesta y...

-¿Y no se te ocurrió avisarme?

-Sabes que no podemos tener los móviles mientras trabajamos.

-Ya. Claro.


***Jugram***


-Estoy agotado...- Le digo pasando por su lado y esperando que simplemente me deje tranquilo.

No sé ni como soy capaz de mirarlo a la cara. Lo que he hecho es imperdonable. Lo que he sentido, como lo he disfrutado y como he perdido totalmente el control sobre mi. Con cada paso siento como parte del semen de Yhwach se escapa de mi interior y por nada del mundo querria que Ichinose se diera cuenta de ello. Dios. Soy lo peor. He engañando a mi pareja y aunque lo tengo frente a mi muerto de la preocupación, en lo único que puedo pensar es en que quiero irme directo a la cama y dormir, olvidarme de todo, pero sobre todo que no me descubra.

-¿Y que me dices de tu aspecto?- Dice tomándome del brazo cuando paso a su lado y volviéndome.

Su agarre es tan fuerte que me duele un poco pero solo frunzo el ceño un poco al ver su creciente enfado. Una nueva ráfaga de semen sale mojándome más y casi siento como resbala por mi muslo, mojando mi pantalón. Tiro de mi brazo mirándolo molesto.

-¿Qué pasa con mi aspecto?- En cuanto me miro en el espejo del salón, veo claramente que vengo hecho unos zorros. Dios, esto no va a salir bien. Si tan solo se acercara podría oler a Yhwach en mi. Yo aun puedo olerlo sobre mi.

-¿Es que no te ves? Tu ropa... toda mal puesta...- Dice tirando de mi chaqueta.- Y esto... ¿Qué es esta marca?- En seguida me llevo la mano al cuello y lo miro abriendo los ojos.

Mierda. Yhwach me mordio y chupó por todos lados. Seguro que me ha dejado una marca... o varias.

-No es nada. Un compañero quiso gastarme una broma.- Digo intentando aparentar normalidad.

-¿Un compañero?

-Si.

-¿No fue uno de tus clientes?

-No, Ichinose, no fue uno de mis clientes. Jamás dejaría que uno de ellos se me acercara tanto.

-Pero a tus compañeros si ¿no?¿Fue ese Yhwach?- En cuanto lo nombra varias imágenes de esta noche me asaltan excitándome un poco.

Aun tengo algo de los efectos de afrodisiaco pero al menos ya puedo controlar mi cuerpo y mi mente. Cosa que no fui capaz de hacer anoche. Dios... anoche, todo ese sexo, todo ese placer y deseo... Desvío la mirada de Ichinose y casi puedo escuchar como rechina sus dientes.

Apartamento CompartidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora