Cita con final feliz

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Cuando salgo del trabajo dejandolo todo cerrado y con la alarma conectada. Miro el reloj y veo que aun tengo una hora hasta la cita con Muguruma. Dios, ni siquiera sé por qué he aceptado salir con él. Puede que sea porque es un chico joven y muy atractivo. Desde que entró a trabajar, me fijé en su cuerpo musculado y en sus ojos castaños y profundos. Nunca he tenido nada con nadie del trabajo porque eso solo complica las cosas pero... lo cierto es que hace demasiado tiempo que no tengo nada con nadie, ni del trabajo ni de fuera.

Cuando era joven si era más activo sexualmente. Desde que entre en la universidad y conocí a cierto chico que me cambió el mundo aunque... también lo destruyó. No me gusta pensar en el pasado ya que hay muchos momentos doloroso pero, son cosas de las que se aprende.

En nuestra casa, la homosexualidad siempre fue un tema tabú. Nuestro padre era demasiado chapado a la antigua y un hombre de fuerte caracter por lo que cuando quiso arreglarme un matrimonio concertado, le confesé mis gustos y no se lo pensó demasiado antes de echarme de casa. Mi hermano Shinobu, me siguió poco tiempo despues aunque él decidió irse a vivir al extranjero, a un pais donde la homosexualidad no estuviera tan mal vista. Para mi fue una separación demasiado dolorosa. Shinobu era mi hermano mas cercano, tanto en edad como en forma de ser y pensar, por lo que me costó hacerme a la idea.

Hace tres años, mi hermano Jugram salió del armario y mi padre enfureció de tal modo que le dio una paliza mandandolo al hospital. Tras eso, el más pequeño se fue de casa antes de confesarnos que él tambien era gay y pasaba de que padre le partiera los huesos como a Jugram.

A ambos les ofreci vivir conmigo pero Yyl, prefirió ir por su aire y no le quise impedir vivir como él quisiera. En cambio Jugram si acepto vivir conmigo. Nunca nos habíamos llevado demasiado ya que la diferencia de edad nos separó durante muchos años pero, vivir con él es fácil. Tiene un caracter suave y tranquilo aunque, cuando se enfada se parece mucho a nuestro padre.

Llego al apartamento y lo veo en el salón terminando de anudarse la corbata azul cobalto que reslata sobre la camisa negra que acompaña al resto del traje. Su pelo rubio le cae sobre un hombro atado en una coleta baja con un lazo del mismo color que la corbata y cuando me ve, sonríe un poco.

-Hoy llegas pronto.- Dice tomando la chaqueta.

-Si. Voy a salir.- Le digo viendo como se para y me mira escrutandome.

-¿Tienes una cita?

-Algo así.

-Vaya. Creo que es la primera vez que te veo salir desde que vivimos juntos.- Se pone la chaqueta y al pasar a mi lado me abraza suavemente.- Suerte. Llegaré tarde así que si quieres venir aquí...

-No creo que lleguemos a tanto, pero gracias. Ten cuidado.

-Siempre.

Veo como se marcha y miro mi apartamento vacío. Jugram trabaja en un Club nocturno de chicos de compañía. Al principio no me gustó que lo hiciera pero me explicó que no tiene nada que ver con sexo por dinero. Simplemente, dan compañia y conversación a hombres y mujeres que pagan por pasar el tiempo con ellos. No sé hasta donde será cierto o no pero, desde que encontró ese trabajo, se comporta tranquilo. No como al principio de mudarse que estaba algo perdido y desorientado sin saber como enfocar su vida.

Nunca he ido a verlo a su trabajo por no incomodarlo. No quiero causarle problemas. En fin, será mejor que me prepare para salir. ¿Que debería ponerme?

***Shunsui***



Entro en el despacho de mi padre y no puedo evitar mirar al hombre que está sentado en una mesa auxiliar. Desde donde estoy solo puedo ver que va bien vestido y que tiene el pelo negro y largo cogido en una coleta.

Apartamento CompartidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora