En las profundidades de los sueños de Elira, un dragón la visita noche tras noche, un presagio de un destino desconocido. Intrigada por este vínculo, se aventura en busca de respuestas para estas insistentes visitas, pero tan solo logra descubrir un...
Me hacéis reir muchísimo y me emociono al saber que os está gustando tanto la historia ❤️
Tened paciencia conmigo, que se que estos capítulos pueden parecer lentos o aburridos, pero recordar que esto es solo un borrador y que la historia aun está por corregir (y Vaelor quiera, por publicar)❤️
Quería deciros que he creado un canal de telegram para que podamos pasarnos fanarts, avisaros de cuando hay un nuevo capítulo y todas las novedades!
Me encantaría que me dijérais qué os gusta y qué no, para seguir mejorando siempre ❤️❤️
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Erebus, con su vasto poder sobre las profundidades del océano, era conocido por su temperamento impredecible y su naturaleza feroz. Sin embargo, fue la dulzura y la serenidad de Nerra lo que capturó su atención. La forma en que ella le cantaba a los pájaros, en melodías que parecían fluir desde el mismo corazón de la Tierra, resonaba con tal belleza que incluso las olas se calmaban para escucharla.
[...]La atracción que sentían el uno por el otro era innegable. Cada encuentro entre ellos, ya fuera bajo la sombra de los árboles antiguos o en la orilla de un océano en calma, se cargaba de una energía tan intensa que parecía que el mismo Magna contenía la respiración, esperando lo inevitable.
Sin embargo, ambos sabían que su unión estaba destinada a ir más allá de lo que las normas divinas permitían. La atracción era correspondida, pero también comprendían que cualquier intento de unir sus destinos sería un desafío directo a los designios de Gaiana, y a las responsabilidades que cada uno tenía.
La situación se tornó aún más complicada cuando llegó el momento de cumplir con sus deberes divinos: fueron obligados a comprometerse con dioses inferiores, para mantener el equilibrio y asegurar la estabilidad. La separación se volvió inevitable, y cuando Nerra cortó la relación con Erebus, un vacío inmenso se abrió en el corazón del dios de los mares y océanos.
