Caroline

20 1 0
                                        

Nunca pensé que nuestra mudanza a Chicago sería por mí. Obviamente era consciente de lo enfadada que estaba mi madre sabiendo lo que pasó entre Michael y yo. Pero nunca pensé que aquella fue la gota que colmó el vaso en su relación con mi padre y con el club.

-Mi madre hizo lo necesario para estar bien. Mis padres no estaban bien desde hacía demasiado tiempo. Tu lo sabes mejor que nadie...

-Por supuesto que lo sé mejor que nadie amor. Era yo quién estaba contigo todas las noches que aparecías en mi puerta llorando. Era yo quién te limpiaba las lágrimas y te acariciaba el pelo hasta que conseguías dormirte. -Me recordó con ironía.

-Por eso mismo no deberías culparla por lo que hizo... Al fin y al cabo no era ella quién llegaba todos los días colocada a casa, ni tampoco dejaba la droga tirada por todos los lados ni mucho menos se ponía delante mía cuando era una niñ...

-No digas que eras una niña. No te atrevas a decirlo Caroline, porque eso ¿en qué lugar me deja a mi? ...

-Tú nunca me viste cómo tal. -Aclaré intentando reconducir mis palabras.

-Claro que nunca te vi cómo una niña. No podía. No era capaz de ver cómo una niña a alguien qué era más madura que yo, aún teniendo casi cinco años menos. No cuando dormíamos juntos casi todas las noches. No cuando me confiabas tu vida...

-Ripper...

-No me llames así por favor. Tú no... -Pidió susurrando.

-No me arrepiento de aquello. Quiero decir, lo que pasó entre nosotros pasó porque los dos lo queríamos.

-Yo te quería Caroline. Te quería de verdad.

Esto no podía estar pasándome. ¿En qué momento he pasado de llevar una vida tranquila en New Haven a encontrarme con mis fantasmas pasados?

Desde el momento en el cuál vi a Michael en el pueblo no podía estar tranquila, tenía un mal presentimiento sobre esto y aún así decidí irme con él y hablar. Cómo si esto pudiese salir bien. Cómo si pudiéramos ser dos viejos amigos que se encuentran tras muchos años para ponerse al día.

Que ilusa soy.

Es obvio que Michael y yo nunca podremos ser eso. No cuando él fue una de las personas que más me decepcionó en la vida. La doctora Gilbert tiene razón. También estaba dolida con él.

-No digas eso.

-Es la verdad Caroline.

-No, no lo es. Y aunque lo fuese... Han pasado nueve años, no es bueno remover el pasado Michael. -dije intentando callar todas las voces que dentro de mí me pedían seguir con esta conversación para saber a dónde llegaría.

-¿Sabes por qué tu padre confía tanto en mí? -preguntó cruzándose de brazos. -¿Sabes por qué he pasado de ser el novato a ser la mano derecha del vicepresidente?

-No es asunto mío. Nada que tenga que ver con él lo es.

-Fue por tí...

-¿Cómo? -pregunté sin entender.

-Cuando desapareciste, cuando tu madre se largó llevándote con ella. Él me culpó de ello, me culpó de tu marcha. Hasta que vio cómo me destrozó la vida la decisión de tu madre.

-Eso no tiene sentido.

-Cuando tu padre se enteró de lo nuestro quiso matarme. Quiso matarme por tocarte, por atreverme a dormir contigo, por atreverme a quererte... Pidió mi chaqueta, hicieron una puta votación para echarme del club de mi vida.

-¿Para qué cojones me cuentas esto? Dime, ¿para qué? ¿Es necesario que yo sepa que aquello no te sirvió de nada? -pregunté levantando la voz mientras le hincaba el dedo en su pecho.

INEVITABLESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora