Antonella:
Me siento nerviosa, no me gusta tenerlos lejos, últimamente solo estoy tranquila cuando los tengo a los tres a mi lado. No me he sentido precisamente bien, tengo mareos constantes y unas insaciables ganas de tener a Egeo enterrado en mi interior a cada segundo. Me siento tan temperamental.
Egon está tendido a mi lado dibujando, sus obras deberían ser expuestas, a pesar de ser un niño su talento deja sin aliento. Mi pequeño también se siente inquieto sin su padre y hermano. La conexión que existe entre ellos es magnífica de ver, su sincronía, es como si fuesen un solo corazón.
-Pequeño-sus preciosos ojos conectan con los míos-hora de merendar-sonríe, siempre tienen hambre. Toma sus lentes colocándoselos, para luego darme la mano y emprender nuestro camino.
-Hola-saludo cuando entro a la cocina, están todos. Karl, Chema, las chicas, mi papá, Marak, Helga y Evi que reparte tarta. Los tres pares de gemelos, incluso Julia que se está portando amablemente desde mi regreso.
- ¿Hambriento? -pregunta Evi. A Egon no le agrada del todo la chica, pero bueno a mi hijo no le agrada casi nadie. No le responde, toma la tarta y le dejo un vaso de jugo y tostadas.
- ¿Jugamos un poco? - Daniel levanta las cejas de forma divertida y mi hijo asiente efusivamente.
- ¡Los derivaré! -todos sonríen. Dejo un beso en la mejilla de mi hijo, que me mira con adoración. Dios lo amo tanto.
La merienda pasa entre, risas, cuantos y fechorías que todos emos cometido a lo largo de nuestras vidas. Es divertido compartir de esa manera, conocernos.
Las chicas están a mi lado, estamos en el jardín viendo a Egon pelear y jugar con los hombres, parecen niños dejándose perseguir por mi hijo. Sostengo a Markus que no deja de reír con las muecas de Demian. Chema se desploma a lo lejos, trato de levantarme, pero no puedo, el cuerpo me pesa demasiado.
***
Parpadeo varias beses tratando de vislumbrar mi entorno, no sé dónde estoy, siento algo removerse entre mis brazos, centro cuanto puedo mi mirada, es Egon, se acurruca contra mí, está helado. Cuando lo abrazo me percato de unas gruesas cadenas que rodean mis muñecas.-Despertaste pronto-una voz conocida me hace voltear- ¿porque tienes que comer tan poco?
- ¿Que está pasando Evi? -ella me gira los ojos con fastidio.
-Eres tan idiota ¿Porque tenías que volver?
-Yo no volví, me trajeron a la fuerza-resopla.
-Siempre es lo mismo, me secuestraron, yo no quería, pero al final te quedas-hace un ademan con la mano, como si le hastiara.
- ¿Evi donde estamos? Egon no se encuentra bien, debo llevarlo a su habitación-suelta una carcajada histérica.
-Tú y tu engendro no volverán a mi casa, es mi casa y tú no tienes espacio en ella-cubro a mi hijo cuando lo mira.
- Evi -no me deja continuar, estampándome una bofetada.
-Te cayas o el próximo golpe será para tu engendro-la sangre me arde de ira. No sé dónde estoy, pero no hay salida, las paredes son lisas solo está la puerta y está cerrada.
- ¡Egeo te matará! -ella suelta otra de esas carcajadas desquiciadas.
-Él nunca sabrá dónde estás, estarás con tu verdadera pareja-un escalofrío me recorre.
- ¿De qué hablas? Mis hijos, no puedo estar sin mis hijos-continúo examinando el lugar, pero nada, no hay nada.
-Cuando pueda enviaré a tu otro hijo con su abuelo-no, no, no...
- Evi por favor no, haz conmigo lo que quieras, pero con mis hijos no, no se los entregues, les hará daño.
-Que importa, dejará a Egeo en paz de una vez por todas-una lágrima se me escapa.
-Tu informaste de su existencia-resopla.
-Siempre he sido yo, he estado detrás de todo-se encoge de hombros-prometió que Egeo sería mío-está demente.
-Son solo niños-ella ni se inmuta- también le harás daño a él-tarto de conversarla de otra manera-él los ama.
-Se repondrá, puede tener más hijos.
-Él nunca te amará, tubo años para elegirte y no lo hizo-comienza a dar vueltas de un lado para otro.
-Lo sé, pero contigo muerta tendré más oportunidades. Lo fastidiaste, cuando te trajo por primera vez me resigné, la manera en la que te miraba, como dejaba que lo tocaras, se veía tan feliz, pero te fuiste y lo destruiste, no sabes en lo que se convirtió en tu ausencia. Eres una caprichosa que cree que lo tiene a sus pies y puedes hacer lo que te venga en gana, alguien tiene que salvarlo de ti.
-¡Yo lo amo!-me suelta otra bofetada.
-No lo repitas-levanta la mano nuevamente, pero la palma nunca llega a mi mejilla.
- ¡Ni se te ocurra volver a tocarla! -esa voz, es la voz de mi madre.
-Mamá-llevaba años sin verla, papá y mis hermanos dijeron que no era seguro tenerla cerca. Mis piernas se manchan de sangre, es la sangre de Evi que cae desplomada al suelo y veo el cuchillo en la mano de mi madre.
-Ya cumplió su función. Si los traicionó a ustedes, también lo puede hacer con nosotros. Se me ocurrirá algo para tomar a Ezio.
- ¿Porque haces esto? -la voz se me entrecortan, las lágrimas caen sin control.
-Cariño yo te he querido, te he querido mucho, pero tu hermano es más importante, es lo que más amo en la vida.
- ¿Dónde está mi hermano? -ella niega, acariciando mi mejilla.
-Tu padre y esposo no confían del todo en ti-niega-mi inocente niña, mi frágil cristal-la miro confundida tratando de apartarme de su contacto.
-Nunca existirá mayor amor que el que sentimos por nuestros hijos, ya sabes de lo que hablo- sus ojos se desvían a mi pequeño que esta inconsciente entre mis brazos, trato de cubrir cuanto puedo a mi niño, pero es inútil.
-También soy tu hija y pretendes entregarme a mí y a mi hijo a un monstruo sin escrúpulos-su expresión dura no decae ni un milímetro.
-No los matará, me aseguré de ello, solo quiere experimentar con los niños, en especial con él-apunta a Egon-nadie te hará daño, estarás bien y con la persona con quien debiste estar siempre y no con ese alemán-se a quien se refiere, Azov. Nunca dijo palabra sobre él, ni positiva, ni negativa, pero yo sabía que lo aprobaba.
-Lo que pretendes hacer no tiene justificación-muerdo mi labio tratando de controlar el temblor -solo dime donde está mi hermano.
-Con su padre biológico-mis ojos se abren de golpe-¡Está bien!-es como si tratara de tranquilizarme, darme algún tipo de confort. Por supuesto solo respecto a mi hermano, o tal vez solo está tratando de engañarse ella misma.
- Entiéndelo Antonella, está bien hora, pero no sé en qué momento puede cambiar todo. Necesito recupéralo, no importa el costo, no importa que tus hijos sean los dañados, sacrificaría lo que fuese por él, incluida a ti mi niña.
No digo nada, no tengo nada que decir, ella ya tomó su decisión. Necesito una forma de salir de aquí, de despertar a mi hijo y ella no es una alternativa. Tengo que asegurarme que Egon está bien.
-Egon-nada-Egon-trato de zarandearlo un poco pero no funciona.
-Descansa hija-siento un pinchazo en mi cuello-el viaje será largo.
El líquido irrumpe en mi torrente sanguíneo esparciendo una oleada de agotamiento y pesadez, dejándome inconsciente.
![](https://img.wattpad.com/cover/373332647-288-k308125.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Egeo (Mares)
RomansaLa desconfianza y secretos de mi marido me llevaron a los brazos de alguien más. No cualquier hombre, sino su hermano gemelo. Egeo Mansfeld una pesadilla disfrazada en vivos colores y ojos color hielo. Una mariposa que engaña con vibrantes colores o...