Egeo:
-Egeo, no estoy precisamente aquí porque así lo quiera-suspiro fuerte conteniendo la ira-pero te deseo, está más que claro y aunque no lo hiciera no quiero hacerte sentir mal, respetaré tu limites-joder cada que sale una palabra de su boca, solo hace aparecer otro candado en las rejas invisibles, que la rodean solo para mí.
-Y si me ayudas a romperlos-sus ojos se iluminan.
-Me encantaría-responde sin pensárselo, acaricio sus labios, joder me encanta su boca.
- ¿En verdad nunca habías besado a nadie? -me rio.
-Nunca chiquilla-se pone colorada.
-Lo haces tan bien, me encanta que...
No la dejo continuar tomando sus labios, joder son tan dulces, suaves y jodidamente sensuales, que me ponen duro nuevamente. Paso mi lengua incontables veces por ellos antes de soltarlos y ella tiembla tan agitada que quiebra por completo mi fuerza de voluntad.
-Egeo-pronuncia sobre mis labios-quiero ayudarte.
La miro a los ojos.
- ¿Los italianos quieren el proyecto? -suspiro.
-Si, todas las organizaciones criminales y los países implicados quieren el suero. Unos para impedir una guerra, otros para iniciarla. En realidad, no se sabe quiénes son los buenos o los malos, o si existen dos bandos, yo me inclino más por lo último.
- ¿Cuáles son esos países?
-España, Rusia, Francia, Inglaterra, Irak, Corea del Sur, Turquía y Grecia están con Alemania, mientras que Italia tiene América casi por competo y algunos de Asia.
- Azov necesita el suero ¿verdad? -odio que lo mencione.
-Antonella-se estremece al escuchar su nombre de mis labios, pero es que odio que lo tenga presente-si tomó el mando de la Cosa nostra es porque prometió obtener el proyecto para Italia. Ellos no son mejores que mi padre y los rusos. Ellos también quieren poder y controlar el mundo, quieren estar en la cúspide de la pirámide.
-Quiero ayudarte en lo que pueda-la pego más a mi cuerpo.
-No es sencillo chiquilla. No es solo romper acuerdos, matar a un grupo de científicos, a pesar de que estoy aquí en Berlín, los laboratorios principales no están aquí. Mi padre va y viene cuando me necesita, no hemos podido descubrir donde está la verdadera base, ahí están todos sus avances y formulas. Me tuvieron ahí de pequeño, pero no recuerdo que lugar era, mi mente casi nunca estaba lucida.
-Tu abuelo le enseñó a Rudalf ¿Él no te enseñó a ti? -sonrío ante su curiosidad, pocas personas me lo han preguntado.
-Por supuesto, pero cuando comprendió que estaba más interesado en curarme que en mejorar, dejó de utilizarme. Tenía muchas esperanzas en mí, el suero no solo desarrolla los sentidos, estimula el cerebro, mí capacidad de pensar retener información es superior. Lo estudié desde pequeño, nadie sabe más del proyecto que yo.
- ¿Estudiaste? -evita preguntarme si hay cuera, porque estoy seguro que sabe que no la hay.
Nada puede limpiar mi organismo, solo podría combatirlo con algo más fuerte y mi organismo competiría y se agotaría demasiado hasta la muerte.
-Soy bioquímico chiquilla, con doctorados en biotecnología y farmacéutica. Me instruyó el grupo de mi padre desde que tengo uso de razón. Mi vida se ha vasado en ser una rata de laboratorio, que estudiaba, entrenaba y luego follaba. Solo eso hasta que comprendió que no lo ayudaría a replicarlo y me dejó ser parte de la dirección del ejército. Esto es militar, un centro de inteligencia militar, son científicos militares. Ha temprana edad ya yo era coronel, pronto alcancé el rango de general y tomé el mando. Cambié la manera de pensar del ejército, convirtiéndonos en una clase de ejercito revolucionaria dentro de la nueva asociación nasi alemana.
- ¿Estudias los que te suministran? -asiento.
-Generalmente tardo unos meses, es difícil, los análisis son exhaustivos. Trato de combatir los efectos secundarios de las nuevas dosis, pero cada vez es más difícil. Contigo en ocasiones es más fácil, me generas paz, pero también me descontrolas.
-No sé si sentirme alagada señor Mansfeld-une sus labios con los míos en un casto beso, pero cuando sus ojos conectan con los míos me pierdo en ese gris tormentoso-Puede que tenga una idea para ayudarlo.
-Dijeron que las prostitutas son de lujo-continúa, dejando de lado el tono divertido-en lugares de lujos y exclusivos. Resulta que mi mejor amiga Katerina está inscrita en otra compañía aparte de la ópera de parís. Ella necesitaba el dinero, no se me hacía extraño que lo hiciese, un día le pedí ir a verla, la función era en el Palacio Garnier y me dijo que no, que eso no era para mí, sabía que había algo extraño, averigüé el nombre de la compañía, la cual no figura en ningún lado y su nombre era Hetera.
-Las distinguidas artistas y prostitutas de la antigua Grecia-concluyo.
-No pude seguir investigando porque regresé a Italia, todavía estoy en contacto con Katerina, es mi mejor amiga. Soy bienvenida siempre que quiera, podríamos empezar por ahí, lo que tengo que ir en persona-niego.
-No pudo involúcrate en esto, es...-me calla dejando un pico en mis labios.
-No quieres terminar con todo esto. Egeo ya estoy involucrada, lo mejor que puedo hacer es ayudar y ahora lo primordial es salvar a esas mujeres y sus hijos-ella es jodidamente perfecta, pero es que yo no podría soportar que algo le pasase.
-Podrías estar conmigo a todo momento-sugiere tratando de convencerme.
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Egeo (Mares)
RomanceLa desconfianza y secretos de mi marido me llevaron a los brazos de alguien más. No cualquier hombre, sino su hermano gemelo. Egeo Mansfeld una pesadilla disfrazada en vivos colores y ojos color hielo. Una mariposa que engaña con vibrantes colores o...