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Nueva York, Estados Unidos, 29 de Agosto del 2024.
AUTUMN
Hoy nuevamente estaba en el museo pero siendo únicamente para representación de las obras, hoy no tenia que exponer. Estaba usando un vestido rojo a combinación de morado, éste fue improvisado porque no tenía tiempo para comprar uno por lo que use un vestido que nunca había usado, era algo elegante pero extravagante que me hacía sentir cómoda. Me había tomado el tiempo para poder hablar con algunos de los representantes del museo que han sido muy amables conmigo.
Podía ver como algunas personas habían venido a ver las obras con admiración, en especial con la muerte de fénix. Les gustó el seguimiento de la original por lo que parecían entretenidos con ello, con el inicio del final algunos decían que se reflejaba muy bien el final de una relación y lo entendía. Cuando estaba iniciando la obra, era la idea principal pero creo que eventualmente el significado fue cambiando gracias a volver a ver a Charles.
Ayer luego del mensaje que le envié, no me contestó así que asumí que estaba ocupado con Ferrari por lo que no insistí, luego de la exposición fuimos con mi familia a cenar con mis amigos, fue una noche que no olvidaré. Hoy sólo estaba acompañada de Alex, Stella, Grace, Frey y Belle. Mis padres tuvieron que viajar junto a Michael por la empresa, los pilotos hoy debían estar en Monza por lo que al terminar de cenar se fueron rápido al aeropuerto. Al saber que éste fin de semana era en Monza, me sentí muy triste, el recuerdo del 2019 se hizo presente pero no dije nada.
—Autumn. —Grace apareció extendiendo un vaso con agua.— Te traje agua, casi no te he visto tomar nada. —sonreí tomándolo.— Alex, Stella y yo iremos por un café ¿Quieres que te traiga un chocolate caliente?
—Claro, y un croissant, por favor. —me miró burlona pero asintió yéndose con mis amigos.
Me quedé en mi lugar viendo alrededor soltando un suspiro, me gustaba tanto el arte e independientemente si ya he visto estas obras. Siempre encuentro algo nuevo que verles, hoy esperaba que algunas personas vieran eso en las mías. Aunque mis pinturas no están a la venta, me gusta pensar que se identificarán con ellas y poder avanzar motivandose con ellas.
—Señorita Laurent, la están buscando en la sala de descansos. —avisó una de las encargadas.— Yo me quedaré aquí, no se preocupe.
—Claro, ya vuelvo.
Deje el vaso a un lado levantándome dirigiendo mi cuerpo hacia la sala de descanso, movía mi cabeza al ritmo de la música que sonaba por las bocinas. Al dar unas vueltas finalmente llegue a la sala tocando primero la puerta para después entrar, al estar dentro vi un cuerpo enfrente de mí dada espalda. Pero podía reconocer de quien se trataba, mi corazón se detuvo al verla darse la vuelta con una pequeña sonrisa. Miré alrededor pensando que se trataba de alguna broma pero supe que no era así cuando encogió los hombros nerviosa, ¿Qué hacía Alexandra Saint Mleux aquí?