Las Secuelas de la Guerra (1)
"¡Extra, extra! ¡Ha salido el resultado de la guerra entre México y Francia!"
Un niño en Nueva Orleans vendía periódicos.
"¿El resultado de la guerra? Dame uno rápido."
Un hombre que pasaba por allí, intrigado por el resultado de la guerra, tomó el periódico y lo abrió con expectativas, pero lo que leyó fue completamente diferente a lo que esperaba.
**- ¡Francia cae ante México!
La derrotada Francia se ve sacudida por una revolución ciudadana.**
"¿Francia fue derrotada? Oye, ¿este artículo es cierto?"
El hombre sabía que preguntarle al joven que vendía el periódico no cambiaría la respuesta, pero el resultado era tan impactante que no podía evitar dudar.
"Dicen que las negociaciones de paz ya terminaron bajo la mediación del Reino Unido, así que supongo que es cierto."
"Vaya, increíble."
Y no solo él. Cada vez que el niño vendía un periódico, la gente reaccionaba de manera similar.
"¿Las colonias francesas en el Caribe y Sudamérica, su flota, y hasta reparaciones de guerra?"
"Al menos dicen que han dejado en paz las colonias de América del Norte."
"¿Una revolución y la ejecución del rey? ¡Increíble!"
La victoria de México afectó a muchos países, pero fuera de los implicados directos, el país más impactado fue sin duda Estados Unidos.
Los estadounidenses no veían a México como un competidor. Aunque el Imperio Mexicano era grande en extensión, su población era pequeña y, en su mayoría, compuesta por indígenas que trabajaban en las haciendas. Para la mayoría de los estadounidenses, México era un país agrícola atrasado, y no lo consideraban comparable a las naciones "blancas" como Europa o Estados Unidos. Incluso, hace unos años, habían firmado un acuerdo en el que prometían aceptar a los "indígenas" como inmigrantes.
¿Y ahora resulta que ese país ha derrotado a Francia? ¿Francia, el país que, aunque perdió su hegemonía tras la caída de Napoleón, había sido temido en toda Europa?
Este evento no solo sorprendió al ciudadano estadounidense común, sino también al presidente de Estados Unidos y a las figuras políticas y económicas del país.
"¡Tenemos que tomar medidas!"
"¿Qué medidas podemos tomar contra México por derrotar a Francia?"
"¿Se han olvidado de que México está justo al lado de nosotros? ¡Debemos aumentar nuestro presupuesto de defensa!"
Henry Clay Sr., del Partido Whig, hablaba con vehemencia, pero los demócratas no prestaban atención.
Un ejército federal fuerte significaba más poder para el gobierno federal, y los demócratas, que defendían los derechos de los estados y un gobierno federal limitado, no podían apoyar tal idea.
"No entiendo por qué deberíamos aumentar el presupuesto de defensa cuando no hay amenaza inminente de guerra. México ganó esta guerra gracias a sus nuevas embarcaciones, no por haber movilizado un gran número de soldados."
John Caldwell Calhoun, quien alguna vez había sido vicepresidente, se opuso a Clay, y los miembros del Partido Demócrata lo apoyaron.
"¡Exactamente!"
"¡Solo tenemos que desarrollar nuestros propios buques de guerra modernos! No es necesario aumentar el presupuesto de defensa."
Aunque Henry Clay sentía repugnancia hacia los demócratas por pensar solo en términos de lógica política en medio de una crisis nacional, no abandonó su argumento.
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Me convertí en el príncipe heredero del Imperio Mexicano
Historical FictionMe convertí en el príncipe heredero. "Si hubiera sabido esto, habría ido a Inglaterra o a Estados Unidos." Ah- Suspiré profundamente. Era un joven común al que le gustaban los juegos de historia. En los juegos de historia aparecen muchos países, per...